Coincidencia conquista.

6.

EVA.

Agosto llegó y con eso venía el fin de la gira, quedaban pocos conciertos y estaba muy feliz. Ahora mismo estaba en Paris, hoy tenia el último show acá y luego volvía a mi casa a descansar mientras esperaba los conciertos que haría de cierre en Madrid y Barcelona, al fin llegaban las esperadas vacaciones.

Con Hugo todo iba más que bien, venía en serio la cosa y él era hermoso conmigo. Los rumores empezaban asomar, ya que el me había venido a ver uno que otro día. Empezaron a sacar conclusiones de cuando nos vieron también en aquella premiere, la prensa no se perdía ni un detalle.

Hay fotos de nosotros cuando estuvimos en Roma.- le comenté por videollamada.- lo siento.- dije con una mueca.

Que no pasa nada, ya sabemos cómo es esto, tú no te preocupes.- soltó con una sonrisa.

Que ganas de ser ese sillón.- dije y soltó una carcajada. Estaba en su oficina y Hugo de traje era lo más sexi del mundo.

Eres increíble.- soltó riendo y también lo hice.- con respecto a lo anterior, quieres salir aclarar algo.- pregunto y negué de inmediato.- perfecto.

Es que tampoco hay nada que aclarar.- solté.- tampoco es que sea oficial esto, entonces no puedo presumir aquello.- le dije jodiendo.

A caso esto es un palazo para que te lo pida formal.- pregunto sonriendo y reí.

No.- negué mirándolo.- yo solo te estoy diciendo la verdad.- dije.

Puedo viajar ahora mismo a Paris para pedírtelo si quieres.- solto y negué de inmediato, era capas.

Olvidalo, así estamos bien, no me quejo.- solté.- debo dejarte, tengo que ir hacia el estadio.- asistio.- luego vemos si logramos hablar.

Podemos hacer una videollamada hot.- dijo levantando sus cejas.

Hugo.- le dije mientras reímos.- te quiero.-solté.

Y yo a ti.- sonrio.- rómpela, luego hablamos.- le tiré un beso para luego cortar.

Quería verlo ya, abrazarlo y inhalar su olor, siempre olía bien, estaba obsesionada con eso. Luego partí directo al concierto, me parecía una locura llenar estadios. Había gente afuera esperando así que firme lo más que pude y compartí un rato con ellos. Los filme para luego subirlo, me parecían geniales. Luego entre y hice la prueba de sonido para luego empezar a prepararme mientras comía algo. El tiempo se pasó y el concierto llegó para disfrutar a pleno.

Estaba pisando Madrid, iban hacer las 12:30 del mediodía y yo aún con el cansancio y todo me mando a la empresa de aquel hombre, necesitaba verlo.

Señorita Barreiro.- soltó la recepcionista.

Buenas.- sonreí.- esta en una reunión.- le pregunte. Hugo ya le había informado que no debía anunciarme cuando venía, a caso que esté en una reunión.

Está libre, anunció o pasa directo.- sonrio mirándome.

Pasó, no te preocupes, que tengas un lindo día.- le dije y me agradeció, luego partí hacia la oficina.

No golpee, estaba libre, eso significa que estaba solo. Quería darle una sorpresa, pero la sorpresa me la llevé yo. Solo negué cuando el me vio y salí lo más rápido de allí, sin hacer ningún tipo de escándalos.

HUGO.

Estaba en mi oficina, ya pensaba irme, tenía libre. Aún no sabía nada de Eva, pero entre hoy y mañana debería llegar, eso me tenía ansioso, la extrañaba. Me quede pensando en nuestra conversación y aunque ella me lo dijo en joda me hizo pensar, deberia pedirle formalmente ya que sea mi novia, para que esperar más?. Estaba pensando en alguna idea cuando entro mi secretaria.

Así que esto es lo último, tienes una reunión recién el lunes.- solto.

Genial, mañana no creo que venga.- ella asistio.- y tampoco me agendas nada.- solté.

Entendido.- dijo.

Ya puedes retirarte.- solte y ella dejo la agenda en mi escritorio.

Ya que mañana no debes levantarte temprano.- dijo apoyando sus manos en el escritorio y mostrándome sus pechos.- porque no salimos a tomar algo hoy.- soltó.

No.- dije firme y mire mi móvil, sentí sus pasos acercarse.

Por qué no.- pregunto.- un poco de diversión, como los viejos tiempos.- dijo abrazandome por detrás, sentí como posó sus labios en mi cuello, no reaccioné y la puerta se abrió.

Era ella, Eva y ahora mismo quería matarme. Me levante rápido, su cara me lo dijo todo y salió rápido de allí. Yo me giré rápido y la mire.

Qué haces.- solté enojado.

Ay Hugo, tampoco para tanto.- rio coqueta.

Esa que viste es mi novia.- dije.

Pues ya parece que no.- dijo sonriendo.

Estás despedida.- solté y su cara cambió.

No, pero...- y sentía que iba a explotar.

No me importa lo que digas, te lo deje claro hace mucho, no te importo y estás son las consecuencias.- dije enojado.

No por favor, no me eches.- dijo empezando a llorar.- Hugo.- dijo queriendo agarrar mi mano.

Estás despedida anaju.- le grite y salí de allí.- anaju esta despedida, avísales a Recursos Humanos, que busque otra y con buen nivel.- le dije a la de recepción y asistio rápido.

Luego salí y me dirigí rápidamente al estacionamiento, debía solucionar este tremendo problema, me mandaría a la mierda.

Eva ábreme.- volví a golpear.- ya se que estás ahí.- grite.- ábreme o no me muevo de aquí.- solté golpeando y al segundo me abrió y camino hacia su sillón para volver acostarse.

No quiero escucharte.- soltó.- si te abrí es porque no quiero problemas con los vecinos.- soltó y me senté en el piso para verla.

No pienses cualquiera por favor.- dije mirándola.

Pienso con respecto a lo que vi Hugo y vi perfecto como estaba esa mina besando tu cuello.- soltó.- unos minutos más y los encontraba follando.

No, no digas eso, no lo permitiría tampoco.- solté y ella rio, sus lagrimas caían.

Adelante mi vuelo solo para verte.- dijo mirándome.- pero ahora me arrepiento.- soltó, luego se dio vuelta dándome la espalda.

Me sentía un completo idiota, ella estaba llorando por mi, ella había venido antes por mi y tuvo que verme así, no la merecía.

Perdóname.- solté acariciando su pelo.- aunque no es mi culpa, iba a sacarla pero tú llegaste justo y viste lo peor.- dije suspirando.- la despedí, porque claro que no voy a permitir esas cosas.- dije y me saqué los zapatos para acostarme al lado de ella, estaba tapada ya que el aire estaba a ful.- te extrañe mucho.- dije abrazándola por atrás.- y me siento muy mal porque estás llorando por mi culpa, porque tú jamás deberías llorar por mi.- solté y no me contesto.

Su vuelta tendría que a ver sido distinta, con besos y abrazos, no así.

Me quede en esa posición, mirando su pelo y abrazándola, no me había contestado nada. No sabía que hacer.. ¿debería irme? ¿Seguir insistiendo? Capas debía dejarla tranquila, tal vez no la merecía.