11.

1.4K 60 2
                                    

EVA.

Había pasado un año y unos meses. Había sacado otro disco que fue una locura, volví a la gira donde visité lugares nuevos y otros que ya había ido. En cada lugar era una magia distinta, un público distinto, un show distinto y pero todos me generaban algo en común, emoción y felicidad pura. Ahora mismo estaba volvió a España, había echo una gira intensa por Latam. Haríamos un parate, estábamos en diciembre así que sería mi mes de descanso, ya luego en el año entrante seguiremos con los conciertos. Baje del avión y con ayuda me sacaron del aeropuerto, el chofer me estaba esperando para llevarme directo a casa. Me ayudo con todas las valijas y luego nos despedimos, aspire el olor a casa, al fin. Subí solo con mi mochila, quería darme una ducha y tirarme en mi cama. Entre y frene de golpe percatándome de aquella decoración. Había un corazón con pétalos echo en mi cama, un ramo de rosas y mis chocolates preferido.

Hugo.- susurre mirándolo hacia todos lados y no lo encontré.

Te extrañe mi amor.- soltó tras mi.

Me giré rápidamente riendo de felicidad y me colgué en el para besarlo lo más que pude. La última vez lo había visto por días y fue hace un mes. El trataba de viajar siempre y a veces se me aparecía de sorpresa. No importaba si eran solo por horas o semanas, disfrutábamos demasiado cuando nos veía y siempre le agradecía lo que hacía por verme, lo amaba.

Te extrañe también, mucho.- dije enterrando mi cara en su cuello y me baje.- qué te amo.- volví a besarlo.- parece que no te veo hace meses.- solté sonriendo.

Y pasó un tiempito, pero ya estamos juntos de nuevo.- soltó acariciando mi mejilla.- qué hermosa estás.- dijo mirándome.- te han cortado un poco el pelo.- pregunto, cómo se daba cuenta de todo, lo amaba dios.

Un poco, si.- sonreí mostrándole, aunque tenía ondas.- qué guapo por Dios, no pienso dejarte respirar este mes.- solté y reimos mientras nos abrazamos.- Gracias por esto.- solté mirando la cama y agarré el ramo.- las voy a poner en agua.- dije y asistio.

Fuimos a ponerlas en agua mientras hablábamos y le pregunte cómo había estado. Los besos nunca pararon, estaba un poco intensa. Pedimos algo de comer, quería quedarme en casa, no quería salir por unos días, necesitaba descansar.

Que ganas de sacarte todo.- solté mirándolo.- pero tengo mucha hambre.- el rio negando.

Come y después me comes.- soltó canchero.

Siempre tienes buenas ideas.- dije y reimos.- qué frío que hace, en argentina no sabes el calor que hacia.- solté.

Tienes un poquito de color.- dijo mirándome.- pero apenas.- rio.

Y si, que te piensas que fui a vacacionar.- dije jodiendo y reímos.

Se ofendió la estrella.- dijo jodiendo y le pegué en el hombro mientras reíamos.- ven aquí, que te extrañe.- palmeo sus piernas y con una sonrisa me senté encima suyo.

Estuvimos un rato más jodiendo y luego volvimos a reencontrarnos. Sus besos, sus caricias, su forma de mirarme, su forma de amarme, todo había extrañado de él.

HUGO.

Los días pasaban y nosotros disfrutábamos del tiempo, luego volveríamos a separarnos. Este mes era de puro festejo, mi cumpleaños y el Año Nuevo. Tenía muchas ganas de que lleguen mis días libres, pero la realidad del ahora era que quería a despedir a más de uno.

No me sirve.- solté devolviendo la carpeta a uno por uno.- esta idea ya la planteamos.- devolví otra.- es un hotel de cinco estrellas, no uno chumi y esas ideas pareciera que si.- solté dando otro y al fin termine.- necesitó ideas originales, necesito actualidad en todo.- solté enojado.- somos una empresa súper reconocida por nuestros grandes hoteles, debemos avanzar, no retroceder, necesitamos estar un paso adelante siempre.- dije mirándola.- quiero nuevas ideas para mañana a las 18 hs en mi escritorio, hasta mañana.- solté y sali de allí.

Entre a mi oficina y saqué mi corbata tirándola, desabroché el primer boten de la camisa y me senté frente al computador. Tenía unas ideas, pero querían que salga de ellos, quería que ellos avancen con su profesión.

Mañana quiero todas las ideas a las 18 acá.- apunte mi escritorio y mi secretaria me miraba atenta.- el que no llego, lo siento.- Levante mis brazos.

Entendido señor.- soltó.

Ah y el que piensa que su idea no va a funcionar, qué no se gaste el tiempo en traérmelo.- dije y asistio para luego retirarse.- estoy cansado de leer cosas sin sentido.- murmure solo.

Ahora hablas solo.- escuché a mi chica y levante la mirada.- hola o chau.- rio.- no sé si es buena idea quedarme.- soltó mirándome.- llego en un mal momento.-pregunto y se acercó a mi.

No amor.- solté y se sentó en mis piernas mirándome.- no hay problemas, solo estoy cansado que me presenten ideas absurdas.- dije enojado.- y yo quiero que todo funcione perfecto.

Tranquilo.- acaricio mi cara.- te van a salir arrugas si te sigues enojado.- soltó riendo, solo a ella se le ocurría eso en este momento.- debes aprender que la perfección no existe, siempre va a ver algún error.- soltó.

En mi empresa existe y el que no está al alcance de la empresa se va.- dije mirándola y ella reboleo sus ojos.

Si yo fuera uno de tus empleados ya te hubiera mandado a la mierda y renunciado.- solté una risita.

Te re imagino de secretaria, no quieres serlo.- jodi.

Secretaria hot dices.- solté una carcajada.- no tienes secretaria hot no.- ahora pregunto y reí de nuevo para agarrar su cara y besarla.- el silencio dice mas que mil palabras.- jodio.

No contesto boludeces.- dije y ella se rio.

Ahh buenoo.- rio.- lo siento señor.- dijo.

Deja de boludeces y bésame un poco, sácame este stress.- solté y ella rio para juntar nuestras bocas. Acaricie su espalda y intente sacar su campera pero me freno.

No Hugo, puede venir alguien.- rio mirándome.

No se porque pero recuerdo que la otra vez te divertiste bastante.- ella rio y sus cachetes tomaron color.- y no recuerdo que te hayas acordado de las personas de esta empresa.- jodi.

Bueno pero hoy no.- rio.- aparte traigo mucha ropa.- solto, hacia demasiado frío afuera.

Yyy.- pregunte.- mi amorr, deja de decir boludeces.- solté y volví a besarla.

Ella intentó separarme pero no funcionó. Saqué su campera de cuero y la deje en el escritorio, si se la tiraba me mataba. Nos levantamos y caminamos sin separar nuestras bocas a aquel sillón que había. Me senté y ella lo hizo mientras pasaba su piernas a cada lado. Sus manos recorrían mi nuca y luego tiraban mi pelo. Su cuerpo se movía un poco y mis manos recorrían su espalda hasta llegar hasta el final y allí mis manos apretaban. Tiro de mi labio y mientras que sus manos iban directo al botón de mi pantalón y tocaron la puerta. Ella se separó de mi y me miro diciendo te lo dije. Se sentó al lado mío y nos acomodamos un poco, di el pase y era Flavio, lo maldije.

Lo siento, interrumpí.- soltó levantando sus cejas.

No para nada.- solté irónico y rio.

No interrumpiste nada.- dijo Eva.- voy al baño y vuelvo, te falta mucho.- me miro cuando se paró y negué sonriendo.

Te odio.- solté mirando a mi amigo cuando salió y el rio.

Lo siento.- soltó riendo.- yo que iba a saber amigo, tú me dijiste que venga cuando pueda.- tenia razón en eso.

Pero te apareces junto ahora.- dije enojado.

Al rato apareció Eva y le propusimos a Flavio salir a comer, así que llamo a sam y nos fuimos a un restaurante. Ya al llegar a casa iba a resolver aquello pendiente.

Coincidencia conquista. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora