𝔓𝔩𝔢𝔞𝔰𝔞𝔫𝔱 ℌ𝔢𝔩𝔩 [Thomas Shelby]

𝒷𝓊𝓇𝓃𝒾𝓃𝑔 𝓈𝑜𝓊𝓁𝓈

𝖈𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 𝖛𝖊𝖎𝖓𝖙𝖎𝖚𝖓𝖔

Mientras bajaba por las escaleras se iba acomodando el saco, había despertado bien por primera vez desde que llego de la guerra, aclaro su garganta antes de entrar al salón, sabiendo que sus hermanos no dudarían en molestarle.

-...¡el imbécil ni siquiera podía pararse después del primer golpe!- Arthur reía fuertemente, con la taza de té en una mano.

-buen día.

Saludo, con la voz aun adormilada, Polly sonrió al ver a su sobrino con la mirada baja, seguía siendo un niño en algunos aspectos, por ejemplo, ahora, avergonzado de lo que pasaría.

-¿Qué tal, Tommy? ¿Cómo dormiste?- John fue el primero en atacar con preguntas, mirándolo con una sonrisa burlesca.

-bien, no es nada fuera de lo normal- se sentó, cerca de Polly con un cigarrillo en la mano, dispuesto a encenderlo si es que sus hermanos comenzaban a molestarlo mas de lo que podía soportar- ¿Esme no se puede callar en la noche? Sus malditos gritos no me dejaron dormir.

-al menos el hacia gritar a una mujer- Arthur se mofo, ya sin poder aguantar la información que había recibido en la mañana- me entere que Scarlett llego a esta casa, y que no volvió a salir, revise la habitación de Ada y esta desocupada, así que, ¿follaste con la dulzura? ¿Por qué no escuche nada en la noche?

-¿perdiste el toque, Tommy? Si quieres te puedo enseñar, creo que a Esme le gustara tener público.

-por dios, Cállense, déjenme disfrutar de esto, después hablan de sus penes y toda esa mierda- Polly ayudo al líder, esperando que así los otros dos dejaran de alardear.

-pero Pol, que Tommy nos explique qué paso, tengo la jodida curiosidad desde que me dijeron que no salió de esta casa.

Thomas revolvió el té, sin revelar nada, no cedería ante la provocación de Arthur para explicar que es lo que sucedió con Scarlett, menos diría como se sintió con sus brazos abrazándolo entre besos.

-¡vamos, Thomas!- Finn se integro a la conversación, sin saber de que hablaban los mayores- ¿qué paso?

El cuerpo tenso, respiración calmada y la mirada que hacia estremecer a quien estuviera en frente.

-Arthur, vas a pasar tiempo con Curly, limpiando la mierda de los caballos, ve que estén listos para mañana. John, deja de estar todo el puto día follando y anda con los Lee a recoger las apuestas, Scarlett no te salvara de hacer las cuentas- Pol escondió una sonrisa cuando termino de hablar.

Los estaba castigando por haberlo molestado.

-¿yo qué hare, Tommy?- el menor sonrió, con la mirada incrédula del rubio y del bigotudo.

-¡pero esas cosas las hacen los otros! No iré a recoger mierda de caballo, Tom.

-Finn, ve a jugar con Isiah, Jeremiah estará desocupado- ignoro las quejas de los otros, mirándose incrédulos y buscando como liberarse de aquel aparente castigo.