Desenfreno.

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Flavio

Me levante sin ganas de nada, anoche le conté a Hugo todo,necesitaba desahogarme, necesitaba sentir el apoyo de alguien, sentir que podía soltar todo sin atragantarme, y eso hice, Hugo se quedó muy preocupado y me juro que hoy vendría sin falta cuando saliera de trabajar, yo me negué y le resté importancia pero tal y como es fue imposible convencerlo.

-Illo,¿como estas?-dijo el cordobés abrazando a su amigo.

-Bueno, estoy un poco mejor Hugo, gracias por venir pero no tendrías que haberte molestado- dijo Flavio con cierta pena sentándose en el sofá.

-Viste que nos vamos a cenar y luego de fiesta- dijo Hugo levantando a su amigo

-No Hugo, gracias, pero no tengo ganas- dijo Flavio cabizbajo y con los ojos rojos.

-Flavio no me importa lo que digas, nos vamos de fiesta, necesitas desconectar.- dijo Hugo firme

-Está bien, pero no sé cuánto duraré

Flavio abrió dos cervezas y se fue con su amigo a la sala del piano, quería enseñarle una composición y entre cervezas y música paso la tarde del murciano, haciéndose menos dolorosa y sacándose un poco a Samantha de la cabeza. Y eso fue más difícil porque siempre acababa acordándose de ella pero decidió hacer de tripas corazón, cuando supo donde iría esta noche le escribió un mensaje a Natalia. Sabía que lo correcto no era olvidar a Samantha poniendo un parche pero en ese momento no sabía que más hacer y al recibir la respuesta afirmativa de Natalia suspiro y pensó en todo el alcohol que iba a ingerir esta noche para que cierta Rubia no divagara por su mente.

Flavio subió un post con Hugo y las redes se incendiaron.

Flavio subió un post con Hugo y las redes se incendiaron

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Samantha

Samantha por otra parte no pudo más y a las 2 a.m aviso a Eva para que fuera a su casa, después de llevarse horas llorando abrazada a Eva cayó rendida. El día fue sin más, no se podía concentrar en nada y no tenía ganas de nada, una Eva sonriente entró en el salón de la rubia y ella  sonrió al verla, Eva la hacía feliz de verdad y verla sonreír era magia para ella.

-Vístete que hoy salimos- dijo la gallega haciéndole ojitos

-No Evi, sal tú, yo no tengo ganas- dijo Samantha en un suspiro.

Su amiga no estaba dispuesta a hablar y discutir con ella, así que directamente la arrastró a la ducha y la obligó a meterse ahí.

Samanta acaba de ver el post de Flavio y sonrió al verlo tan feliz, pero después decidió subir ella uno para que él viera que no estaba tan afectada como lo pudo ver ayer, y darle de su propia medicina

Samanta acaba de ver el post de Flavio y sonrió al verlo tan feliz, pero después decidió subir ella uno para que él viera que no estaba tan afectada como lo pudo ver ayer, y darle de su propia medicina

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En pocos minutos tenia miles de comentarios diciéndole lo guapa que estaba.

La noche pintaba bien, la música sonaba, las copas entraban por su garganta como si nada y por un momento consiguió olvidarse de esos ojos cafés que la tenían sin poder pegar ojo. Lo que Samanta no esperaba era ver a Hugo y flavio, cuando Hugo la vio miró a Eva con los ojos como platos y Eva giró a Samantha.

La rubia que no era tonta noto algo extraño y se volvió a girar a mirar a Hugo, y ahí vio a Flavio bailando con Natalia y riéndose como semanas atrás había echo con ella, y se sintió mal, muy mal, sintió los celos, la rabia, el odio, y todo el amor que sentía por el chico, sentía todo a la vez y nada, sentía que se iba a volver loca y que el mundo se iba a parar, y ella con el mundo a su vez lo haría.

Pero decidió hacer de tripas corazón y sonreír.Se acercó a Hugo y le dio un beso en la mejilla y a su vez le susurró que no pasaba nada, que no se sintiera culpable, para después acercarse a saludar a Flavio y Natalia como si nada y volver a bailar con Eva.

Flavio

El chico se quedó a cuadros y no pudo apartar la mirada de la espalda desnuda de la rubia, hasta que vio como un modelo se le acercaba y bailaba con ella y ahí desató su furia, no.

Eso se repitió una y otra vez, NO. El chico se repitió una y otra vez mentalmente que él estaba haciendo lo mismo, que no podía intervenir.Pero fue en vano. Cuando vio que el modelo de pacotilla acaricia la espalda de Samantha  mientras lo pegaba más a él se enfureció y después de decirle a natalia que no quería hacerle daño y confesarle que no sentía nada por ella fue echo una furia hacia el chico, que estaba a escasos centímetros de la boca de Samantha.

Flavio los apartó con sus manos y mirando al chico a los ojos le dijo que no se volviera a acercar a su novia o él mismo iba a encargarse de que no lo llamasen más para ningún desfile y el otro pálido pidió disculpas y salió de ahí sin mirar más a la rubia.

Samantha se puso echa una furia diciéndole que no tenía derecho a hacer eso, que no se metiera en su vida, y flavio cansado de escuchar grito la arrastró al baño.Samantha lo mira con furia, con deseo, con amor, con ira, con pasión y flavio lo hacía exactamente igual. El aire los asfixiaba sentían las respiraciones mezcladas y sin pensarlo del veces sus labios se unió a los de ella para empezar a gritarse sin palabras todo lo que sentían.

Se besaban con pasión, con rencor, pero sobre todo con mucho amor, y eso era lo más importante, el amor que derrochaban el uno por el otro.

-No puede estar sin ti Samantha, no quiero estar sin ti, no nos hagas esto por favor- dijo Flavio para después volverla a besar otra vez.

Samantha estaba sintiendo una oleada de emociones en ese momento y se permitió no pensar, se permitió no sentir dolor, no sentir odio, decidido sentirse bien,decidió hacer como si nada, y disfrutara de su hombre, porque así lo sentía, y no de una forma posesiva, si no de una forma sincera y emocional, lo sentía suyo, pero no para someterlo q ella si no para hacerlo feliz, sentía que ella era de él, pero era de él de corazón, no de una forma física, no. Los dos eran suyos, pero también del otro, porque sus corazones habían dejado de ser del ellos, para ser del otro, y los dos lo sabías.

La intensidad de los besos empezó a subir, la intensidad y los chicos sentían que todo sobraba ahí. Se miraron a los ojos y se sonrieron, Flavio quitó el botón del cuello de Samantha que le sujetaba el vestido y este callo, dejando q usa Samantha desnuda y dispuesta para el, y sintió como su corazón se aceleraba y como se volvía más loco por ella si cabía. La rubia empezó a desabrochar botón a botón la camisa de Flavio y callo rendida a sus pies, flavio se sentó en el retrete y la rubia lo vio como un rey en un trono, el la arrastró a sentarse a horcajadas sobre él y el roce hizo que los dos perdieran la cabeza, flavio se sentía vivo, como hacía mucho que no lo hacía, y Samantha sentía que el deseo iba a poder con ella.

Cuando porfin decidieron juntarse estallaron en mil pedazo, juntos, los vaivenes de la rubia sobre él hacían que flavio estuviera en otra dimensión sin pensar en nada, sin importar en nada, sintiendo que estaban haciendo algo inolvidable y que hacían lo correcto.

Inesperado / Flamantha Donde viven las historias. Descúbrelo ahora