Capítulo 22

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En cuanto Jin Young entró a su casa Hyungwon me quitó las llaves de las manos para abrir la puerta de mi casa

— Bueno, hay que entrar.

Dijo quitándose de enfrente para que yo pasara antes .

Hyungwon fue a sacar algunas botanas de la alacena mientras yo buscaba una película para ver.

— Entonces...ese chico es el que te trajo café el otro día? —preguntó rompiendo el silencio que había

— Si, el mismo —reí

Me miró serio  por un segundo

— Parece que te agrada mucho

Asentí

— Es una muy buena persona, Ye Rim y yo estamos casi todo el tiempo con él, ya que también está en nuestro salón en la universidad

— Ah  —respondió cortante

Fui a ayudar a Hyungwon a traer los vasos de limonada y las botanas y ambos nos sentamos en el sillón

— ¿Una película romántica? —dijo mirando la portada de la película en la televisión

— ¡Si! A ti también te gustan aún, ¿no? —alcé una ceja

Asintió

— Sí, pero creí que ibas a poner una de terror, como siempre fueron tus favoritas

— Ah, olvidé apagar la luz —me levanté rápidamente a apagarla y volví a sentarme junto a Hyungwon

Después de unos 30 minutos recargué mi cabeza sobre  el hombro derecho de Hyungwon, pues estaba dándome un poco de sueño. 


—Quieres recostarte sobre mis piernas? —dijo notando que mis ojos estaban a punto de cerrarse

Asentí y recargué mi cabeza sobre sus piernas mientras el me daba palmadas en la espalda. De pronto caí en un profundo sueño, del cual desperté justo en el momento que acabó la película, que duraba dos horas y 20 minutos.

Sin moverme volví a cerrar los ojos por unos minutos y Hyungwon acariciaba delicadamente mi cabello. 

— No puedo creer que haya estado tanto tiempo lejos de ti —dijo en voz baja— Si me hubiera quedado yo te habría....

En ese momento comenzó a sonar el timbre de la casa y entonces me levanté lentamente, fingiendo recién despertar.

— ¿Ya acabó la película? —pregunté en seguida de un bostezo

Me sonrió y asintió

— Están tocando, ¿quieres que abra?

— Por favor —pedí con una sonrisa

¿Si se hubiera quedado él habría qué? Será que le debo preguntar qué era lo que iba a decir?

— ¡Hola Hyungwon! —saludó mi madre mientras se quitaba los zapatos para entrar  junto con Wonho y con su padre.

Wonho nos echó una extraña mirada a Hyungwon y a mí

— Hey chicos, ¿Qué hacían? —preguntó curioso

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