My dolly - Lectora x Bokuto (Yandere)

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-"(T/n)-chaaaan~!"

Al oír la voz energética llamándote te asustaste un poco.

Estabas sola en el patio de la escuela comiendo, era receso.

Unos segundos después fuiste atrapada por unos brazos grandes.

-"Jeje como estás? No podía encontrarte por ningún lado!"

Dijo Bokuto con una sonrisa en sus labios, tu habías colocado tus manos en su pecho intentando apartarlo con tanta suavidad que él no se daba cuenta de tu intención y te miraba con una dulce sonrisa.

-"Qué haces aquí sola?"

-"Ah...me gusta estar aquí..."

Dijiste en una suave voz.

Él se sentó a tu lado sin romper el abrazo que te estaba dando ni la sonrisa que tenía en los labios.

-"Entonces me quedaré aquí contigo!"

-"La verdad es que prefiero estar sola..."

-"Por qué?" Preguntó ladeando la cabeza

-"Solo me gusta"

-"Y nunca has estado en compañía de alguien en los recesos?"

La curiosidad de ese muchacho era inmensa, al igual que su inocencia, ya que él solo actuaba por impulso, no notaba que eso te molestaba y te ponía más nerviosa, no lo hacia con malas intenciones.

-"Bueno...algunas veces he estado con Akaashi pero..."

-"Entonces vas a estar bien conmigo!"

Interrumpió con un tono alto y alegre.

-"Si... Supongo"

Respondiste con algo de incomodidad, no estabas acostumbrada tanto al contacto físico, no habías tenido demasiado en el pasado y era algo extraño que sucediera, y si sucedía era luego de que algo malo ocurriese.

Pero de alguna manera en estos brazos te sentías algo cálida, pero la falta de costumbre te hacía incapaz de poder disfrutarlo.

-"Bokuto-San"

La voz tranquila y familiar de Akaashi sonó cerca de ustedes, ambos voltearon a verlo.
Tu lo saludaste haciendo un pequeño movimiento con tu mano el cual el correspondió asintiendo.

-"Qué pasa Akaashi?"

-"El entrenador quiere hablar contigo un momento, te está esperando en la puerta del gimnasio, dice que es urgente"

-"Ah?? Pero ahora estoy-"

-"Dijo que era urgente"

Bokuto hizo unos pequeños quejidos como un niño pequeño y finalmente te soltó.

-"No tardaré!"

Dijo en una sonrisa y se levantó para irse corriendo.

-"Estas bien?"

Akaashi extendió su mano hacia ti para ayudarte a levantarte, aceptaste su mano y te pusiste de pie, sacudiste tu falda que estaba llena de césped ahora.

-"Me enteré lo que sucedió ayer, debiste haber estado bajo mucha presión"

Asentiste ante sus palabras, él suspiró pensando en lo que había hecho su compañero.

-"Si quieres puedo intentar hablar con él"

-"No se pondrá peor, verdad?"

-"No podría asegurarte nada..."

Miraste a un lado jugando con tus dedos, preferías no generar más problemas.

-"No te preocupes, yo le daré un alto cuando lo sienta necesario"

-"Estás segura? Sabes que no debes hacerte responsable de todo"

Ibas a responder ante eso pero justo en ese momento la voz llena de energía volvió a aparecer.

-"AGAASHEE!!!"

Gritó Bokuto mientras llegaba corriendo con una increíble alegría.

-"SOY CAPITÁN DEL EQUIPO!"

Tomó a Akaashi de los hombros y le dio un abrazo elevandolo un poco en el aire, dio un par de vueltas y luego lo volvió a dejar en el suelo para dirigir su mirada hacia ti.

-"(T/n)-chan ahora soy capitán de mi equipo, estas orgullosa de mi verdad? Verdad?"

Decía con gran emoción e intensidad, estaba realmente cerca de ti, y sus ojos estaban clavados en los tuyos, esperando ansioso por una respuesta.

-"F-felicitaciones!"

Fue lo único que pudiste soltar en ese momento pero parece haber sido suficiente para él ya que empezó a dar brincos a tu alrededor para luego darte un abrazo y varios besos en tus mejillas.

Akaashi miro la escena con cierta preocupación, y lo notaste, pero le hiciste una seña indicando que "no se preocupe".

Unos minutos después, cuando tocó la campana para regresar a los salones Bokuto finalmente te soltó, de muy mala gana, haciendo pucheros.

-"Vamos (T/n), debemos ir a clases"

Akaashi mencionó para tomar tu mano e ir a clases juntos, pero Bokuto se lo impidió.
Él sujetó la muñeca de Akaashi antes de que pudiese siquiera tocar tu mano.

-"No la toques"

Dijo el de ojos dorados con un tono de seriedad increíble, para luego reír y soltarlo, dejando ver una marca en la muñeca de el de cabellos oscuros.

Esa escena te había aterrado.

-"Nos vemos a la salida!"

Volvió a hablar con su tono infantil y alegre para marcharse.

Tus ojos se dirigieron a tu compañero que estaba viendo su muñeca con dolor.

-"Quieres ir a la enfermería? Puedo acompañarte"

-"No, no se necesario, solo vamos a la clase, si?"

Dicho eso él empezó a caminar a su salón y tu lo seguiste, al menos no le había lastimado su mano hábil, pero iba a ser un problema al momento de la práctica.