La Asesina de Antifaz

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"Los personajes y hechos relatados en esta historia son completamente ficticios. Cualquier parecido con personas verdaderas, vivas o muertas, o con hechos reales es pura coincidencia".

¡Que disfrutes la lectura!

Sinopsis

Harta de ser menospreciada y humillada por la alta sociedad debido a mi pobreza, me casé con un viejo millonario del que heredé toda su fortuna luego de que él falleciera.

Sola y con todo el dinero y poder del mundo, decidí finalmente llevar a cabo mi plan de venganza contra todos aquellos que me habían humillado y lastimado en el pasado. Convirtiéndome, desde entonces, en la asesina de antifaz.

La Asesina De Antifaz está registrada en Safe Creative con el código: 2010255711055.

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***

Tomo mi taza de té y le doy un pequeño sorbo mientras el atractivo oficial Ambrose Crane anota algunas cosas en su libreta.

­—¿Cuánto tiempo llevaban casados usted y Adriel Fernsby? —Observo la castaña y profunda mirada del oficial Crane y me contengo de no suspirar. Es muy apuesto.

—Seis años —le respondo mientras dejo mi taza sobre la elegante mesita de té. Él me mira con sospecha. Piensa que lo maté, lo cual es lógico. Cualquiera pensaría eso si un viejo se casa con una mujer joven.

—Adriel Fernsby tenía sesenta y siete años —dice él, revisando apuntes en su libreta—. Y usted solo tiene veintiocho años. Es muy joven para haberse casado con un hombre tan mayor. —Yo sonrío.

—Para el amor no hay edad, oficial Crane. —Él enarca una ceja. No me cree. Yo suspiro y asiento—. Adriel fue mi salvador —le cuento—. Mis padres murieron cuando yo tenía tres años y, sin más familia para acudir, fui enviada al orfanato. La vida ahí fue terrible y deplorable. Nos trataban como basura. Muy parecido a como la alta sociedad trata a los demás —murmuro con desprecio—. Adriel hacía donativos para el orfanato cada año. El dinero se lo gastaba la directora del orfanato, obviamente, pero... Gracias a eso, lo conocí. Poco a poco nos fuimos haciendo amigos e incluso comenzó a visitarme más seguido. Todos pensaban que quería adoptarme, pero, en realidad, yo le gustaba.

—¿Y él a usted no? —me pregunta el oficial. Yo sonrío.

—Me gustaba, pero como amigo. —Guardo silencio unos segundos para encontrar las palabras correctas y continúo hablando—. Yo solo tenía diecisiete años cuando él me ofreció sacarme del orfanato, regalarme un departamento y cuidar de mí. No me pedía nada a cambio y yo estaba desesperada por salir de ese lugar, así que acepté. —Sonrío con un poco de rabia mientras recuerdo cómo me trataban las amistades y conocidos de Adriel durante los siguientes años que él cuidó de mí. Fui humillada y menospreciada todo el tiempo y él nunca hizo nada para detenerlos. No lo maté, pero ojalá se esté revolcando en el infierno—. Durante los siguientes cuatro años, él cuidó de mí. Siempre fue un buen amigo. Después de ese tiempo, me pidió matrimonio.

—¿Por qué aceptó si solo lo quería como amigo? —Me encojo de hombros.

—Él hizo mucho por mí y yo sabía que él se sentía solo, así que acepté. Mi vida no empeoraría por eso.

—¿Eran una pareja normal o solo dos amigos que se acompañaban?

—Bueno, para mí éramos amigos, pero para él sí éramos esposos. Dormíamos en la misma cama, teníamos sexo cuando él quería y yo siempre lo acompañaba a donde me pidiera. Para él eso era lo que una esposa debía hacer. Traté de hacerlo feliz y agradecerle todo lo que había hecho por mí. —Él sopesa mis palabras y finalmente asiente.

Temporada De Halloween ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora