cαρเ́ƭµℓσ 8

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El día de hoy se estaba tranquilo, hacia sol y no se consideraba como hacer frío. SooJin estaba tumbada debajo de un árbol con un libro sobre su cara. Jungkook, al lado de ella miraba a todos lados intentado encontrarse con algo entretenido.

-¿Entrenamos?-Inquirió Jungkook inquieto-Vaaaamos SooJin-Cogió el libro y lo dejo sobre el pasto. Ella le miró.

-Vamos-Se levantó de donde se encontraba y caminaron hasta una casa.

Las hadas les ofrecieron una pequeña casa con todo lo que querían-ya que con su magia podían hacerlo casi todo realidad-en la casa había una zona de deporte, obviamente.

Jungkook pasó las vendas por su mano derecha cuando finalizó hizo lo mismo con la izquierda. Se acercó hasta el saco de boxeo y comenzó.

Pasaban los segundos y su mente divagaba por aquellos recuerdos de su pasado.

-¡Hermanita!-Los ojos saltones de Jungkook la visualizaron, su hermana hablaba con otra niña, pero.. la otra niña no tenía pinta de querer hablar con ella. Si no todo lo contrario, agarraba de los pelos de su hermana sosteniendola de esa manera-¡Dejala en paz!

A pesar de Jungkook ser más pequeño que aquella grandulona le empujó con sus manitas. La niña le miró y se rió-Enano-De un empujón él retrocedió unos pasos.

-Kookie, déjala, no vale la pena.

Los golpes contra el saco cada vez eran más fuertes, SooJin le llamaba pero este se encontraba tan absorto en sus pensamientos que ni cuenta se dio de los llamados de la muchacha.

-¡Kookie ayúdame!-El cuerpo de su hermana se encontraba dentro de un pozo. Su rostro salía y entraba al agua, no podía nadar.

-Si le das la cuerda para que suba acabarás tú donde ella-Su "padre" le amenazó. Él se marchó un rato.

La niña seguía pidiéndole ayuda a su hermano. Asustado, tiró la cuerda al pozo.

-¡JODER JUNGKOOK!

De la fuerza consiguió romper el saco.

Las lágrimas caían de sus ojos con el destino de caer hasta el suelo

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Las lágrimas caían de sus ojos con el destino de caer hasta el suelo. SooJin corrió hasta donde el se encontraba, sin dudarlo dos veces le abrazó, Jungkook no reaccionó hasta que posó su cabeza en el cuello de SooJin.

Ella acariciaba su ancha espalda mientras que él sollozaba sobre su cuello.

-Tranquilo..relájate.. ya pasó.

[DREAM]

Los gritos de las hadas, duendes; el pueblo interrumpieron la conversación de SooJin y Jungkook. Miraron por la ventana, todos corrían asustados habían casas en llamas..y.. un montón de mosquitos.

Fueron hasta donde sus armas y ropa especial, agarraron todo y fueron a las afueras de la casa. Observaban por todos los lados, espalda contra espalda. SooJin sostenía su espada y Jungkook su arma de fuego.

Una gran multitud de muñecos con ojos rojos llegaron donde ellos se encontraban. SooJin daba patadas y Jungkook disparaba.

-¡Coño! ¿Que demonios es esto?-Chilló.

Aquellos muñecos se juntaron y una gran masa verde amorfa se asomó a la realidad.

-Joder-Dijeron a la vez.

Aquella masa abrió su boca y un gran viento hizo que ambos cayeran de espaldas al suelo. Aún así-doloridos-SooJin corrió hasta donde el, alzó su espada y de una raja le decapitó.

Por unos momentos creyeron que lo consiguieron pero el villano volvió a su forma original.

-Que..

-...Cojones.

La masa sacó-de quien sabe donde-un gran ejército de masa como el pero en un tamaño más pequeño. Uno de ellos se colgó de el cuello de Jungkook y el otro de el de SooJin, su respiración comenzaba a fallar hasta que al final consiguieron quitarselos de encima.

SooJin fue hasta la masa corriendo pero esta fue más rápida y con su mano atravesó el abdomen de el de SooJin. Atónita, miró para abajo, sus ojos se cerraban y se abrían todo se volvía negro, a pesar de tambalearse continuó luchando contra la masa.

Los golpes con el látigo cada vez eran más suaves su fuerza se iba perdieron, Jungkook-aún sin ver que pasó-le atacaba por detrás.

Aunque a SooJin le doliera decirlo tenía que acudir a la ayuda de aunque duende que les apareció de principio-¡Annum!

Cayó rendida al suelo, su espalda chocó contra el suelo. Jungkook la vió y no dudó en correr hasta donde ella se encontraba. La herida no era muy grave pero se podía desangrar y morir allí.

La masa comenzó a desparecer, el poder de aquel duende de mató completamente. El duende les dijo que si se veían en unos apuros muy peligrosos que dijeran la palabra: annum así el iría y les ayudaría, pero solo se podía hacer una vez.

Las tres hadas que más relación tenían con los personajes llegaron hasta ellos. El hada azul movió sus manos y una pequeña luz azul con brillos llegó hasta el abdomen de SooJin. El hada rosa hizo lo mismo que su compañera y la misma luz chocó contra el abdomen de SooJin. Lo mismo hizo la otra hada verde.

[EN EL SUEÑO DE SOOJIN]

La niña escuchaba como sus padres hablaban con los demás padres sobre sus hijos. Los hijos de estos estaban donde SooJin riéndose de ella, mejor dicho, las niñas.

-Pero mira.. a esta rata le gusta el boxeo-La niña de pelos cortos carcajeó con sus amigos-Anda vete de aquí niña con pene.

∂яєαм;; ʝʝҡ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora