POV. Grayson.
La vi desmayarse y caer a cámara lenta.
Por un momento creí que mi corazón se había paralizado. Actúe rápido y la sostuve antes de tocar el suelo.
-Abigail, pequeña despierta. - Empecé a desesperarme por no notar ningún cambio. Miraba a todas partes en busca de algo y fijé mi vista en mamá. Ella, que me miraba preocupada se acercó.
-Hijo llévala a su cama, yo le prepararé algo. Es normal que la noticia le haya afectado así, ha pasado por muchas cosas. -Respondió ella.
La llevé y tumbé. Su rostro desprendía serenidad, algo que antes no parecía tener. Estaba preocupado. ¿Y si no nos aceptaba? ¿Y si ahora mismo me odia?
-Por favor no me odies. - Susurré.
Mamá entró y dejó la taza en la mesilla. De repente se asustó y tocó las marcas de Abi, aquellas que tanto odiaba.
-Pero cómo pudo hacerse eso. -La miraba con los ojos apunto de llorar-Todo lo que ha tenido que sufrir mi niña, que satán la cuide.
-Mamá. - debía de decírselo - suele tener pesadillas.-Solté. -Nosotros tuvimos que acompañarla hasta clase porque tiene un trauma, en el instituto la trataron muy mal. Ahora está con nosotros y te prometo mamá que la voy a ayudar.- Prometí.
-Tus ojos. -Sonrío.
-¿Qué pasa con ellos?.- Mis cejas se fruncieron, pues no sabía de qué me estaba hablando.
-Brillan, muy pronto te darás cuenta de lo que significa hijo mío, eso nos dará felicidad y maravillas, ya lo verás. - Ahora estaba feliz, se dobló el pañuelo que había usado para limpiarse las lágrimas y lo guardó.
-No sé de qué hablas mamá.- ¿Estaba insinuando que me gustaba? Hacía tiempo que no quería nada con nadie, pero debo de admitir que desde que está con nosotros esa idea se está esfumando.
-Paciencia hijo, paciencia.- Tenía la vista puesta en ella.
***
Al final todo el mundo se fue a casa. Mamá y yo decidimos dejarla descansar y con su ayuda le cambié el vestido por el pijama.
Ahora mismo estoy sentado observando a Abi dormir. Hubo un tiempo en el que me obsesioné con ella.
Siempre le contaba a mis amigos de ella y siempre soñaba con volver a verla, por eso cuando mi madre me contó que debía de viajar no dude ni un segundo.-Te gusta - Oigo decir a Aiden en voz baja.
-Qué?- Por favor que no siga hablando, otro diciendo lo mismo no.
-Que te gusta y a ella también.- ¿Cómo? ¿Yo le gustaba? ¿Se sentía atraída por mi? Eso no podía ser cierto.
-¿Qué dices Aiden?- Él se mofó.
-Es lo que veo. Siempre va contigo si tiene una pesadilla, siempre te busca con la mirada. Se nota y tú haces lo mismo, siempre estás pendiente de ella como si te fuera la vida en ello y todavía no me has dejado llevarla ni al instituto.- Pues es verdad, pero me es imposible apartar la vista de ella.
-No puede pasar nada. -Bajo la mirada.
-Si puede, solo tienes que dejarte llevar, baja la barrera que pusiste con Rachel.
-¿Crees que podré ayudarla? ¿Que podremos ayudarla a superarlo todo?- Sonaba un poco desesperado, pero la verdad es que lo estaba.
-Claro que sí hermanito, nada se nos resiste. Anda vete a dormir que es tarde y deja de quedarte embobado con ella.- Se burla antes de salir de la habitación.
¿Cómo no quedarse embobado con ella?
Me levanto de la cama y cierro la luz.-Gracias por volver a mi vida.- susurro besando su frente.
Y ahora si, vuelvo a mi cuarto.Este es más cortito pero alomejor esta tarde subo otro. ¿Queréis que suba más con la perspectiva de Grayson o Aiden? ¡Espero que os guste!
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Ayúdame a descubrir
RandomDespués de todo me he convertido en lo que decían... ¿Pero quién es el chico que está sentado? ¿Y qué hago yo aquí? CORRIGIENDO