Caballero escarlata (Marigami AU)

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AU medieval

"¿Me recuerdas? Nos conocimos en otra vida"

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"¿Me recuerdas? Nos conocimos en otra vida"

Si de algo era consciente la princesa Marinette del reino Dupain, es que su corazón le pertenecía a una sola persona y ¡Vamos! Estaba demasiado perdida. Lo había observado durante todo el festival, quizás demás, y aún así no lograba quitarle los ojos al caballero escarlata.

Quizás era su forma de moverse que expresaba seguridad sin resultar como un petulante, quizás era que no parecía tener una figura demasiado robusta y ostentosa, quizá su peculiar traje que le otorgaba distinción, esa manera ágil de manejar la espalda que simplemente le resultaba un delirio o el misticismo que se cargaba al negarse revelar su identidad.

Sea cual sea la identidad caballero escarlata, ella no dudaría ni un segundo entregarle por completo su corazón.

—¿Así es él por quien tanto suspira, princesa?— cuestionó Alya, su dama de compañía, al notar la mirada de la azabache distraída observando a hurtadillas una de las prácticas del caballero escarlata. Marinette regresó a ver a la castaña con un ligero rubor, apretó sus labios y después sólo soltó un suspiro delatando la verdad.— Usted ya está comprometida con el príncipe Adrien, recuérdelo. — la princesa regresó su mirada una vez más sobre el caballero escarlata.

—Lo sé.— pronunció con tristeza. Vio como una joven de la casa Bourgeois de cabellos rubios y ojos celeste se acercó a conversar con él, pero desde donde estaba no alcanzaba a escuchar su voz, aunque se imaginaba que era preciosa . En ese momento envidio ser ella, poder hablar con él como si fuera algo de todos los días, poseer su confianza.

¿Y si era ella la dueña de su corazón? Su pecho ardía pero no veía la pena en esto. Tenía ese compromiso político que, aunque no le resultaba desagradable en realidad, no era lo que ella anhelaba.

La princesa se retiró finalmente. Chloe, quien había notado su presencia, tomó el hombro del "caballero" para captar su atención por completo.

—Sabes que esto no está bien, "Ryukko".— comentó Chloe con el nombre de pila que le había dado a Kagami para que no descubrieran su identidad.— Ella te ve, creo que le gustas ¿Por qué haces esto?— Kagami sólo hizo un movimiento de hombros para zafarse del agarre de Chloe y seguir haciendo su entrenamiento.— ¿Qué pretendes? ¿Enamorarla? En el hipotético caso de que ella te ame por quien eres ¿Qué pasará después? Huirán en un mágico atardecer. Sabes que eso no pasará, ella no es cualquier plebeya.

Kagami se detuvo y se paró en recto, viendo cómo aquella espada reflejaba su armadura.

Ser el caballero escarlata era todo un sueño, al menos así podía conseguir la atención de la princesa escarlata, sacarle suspiros, obtener su mirada enamorada ¿Qué pensaría de ella? No era más que una sucia plebeya, una criada de la casa Bourgeois que de alguna manera había conseguido hacerse amiga de la damisela Bourgeois y que había caído perdidamente enamorada de la princesa desde la primera vez que la vio.

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