Bully [Twisted Wonderland] Floyd Leech x Fem!Oc

XXI

Miré la hora en mi teléfono, a escondidas por cierto, con ansias y comenzaba a mover mi pierna desesperada. Quería salir cuánto antes, y en realidad estaba por hacerlo con anticipo ya que no quería ver a Floyd. No pude esperar más y le dije a Jade en un susurro que tenía un asunto pendiente que atender, así que sin más tomé mis cosas y me levanté para pedir permiso para salir. Cuando se me fue concedido salí sin más hacia la enfermería evitando a toda costa el salón del gemelo Leech más fastidioso y odioso de mi vida.

Dejé escapar un suspiro cansado, apresuré mi paso hasta mi destino esperando que sea así y no haya inoportunos. Deseaba con todas mis fuerzas a qué no hubiera nadie también, necesito un descanso ya, tanto mental como físico y de todo. Últimamente me sentía demasiado exhausta, dormir me era difícil y de por sí ya tenía insomnio. Constantemente soñaba con ese monstruo, torturandome y yo pidiendo auxilio, no es metáfora, habló enserio. Mis pasos se volvían cada vez más rápidos hasta que casi choco con alguien y ahí me detuve.

-Andate con cuidado, chico. -Aquel rubio expresó con fastidio mirándome tal cual y se fue a paso elegante.

Definitivamente no quería toparme con él tampoco de ahora en más, me dio un tic de nervios cuando me habló de forma superior. Pero como sea, objetivo: enfermería. Ahora con mi paso regulado por fin llego y al entrar, huelo al aroma de alcohol, jarabes y demás cosas que no tolero mucho pero que por hoy haré una excepción. En fin, me adentré al cuarto blancuzco y me dirigí hacia el enfermero quien sonrió al verme.

-¿Te sientes mal, Tobias?

-Ah, es solo que quería preguntar si puedo almorzar aquí hoy. Le prometo que no seré un estorbo. -Hice una media reverencia con mi expresión neutra y solo escuché una risita amistosa. Me reincorporé al instante y él solo asentía.

-Claro, puedes hacerlo. De hecho me vendría bien que cuides un momento el lugar ya que tengo que llevar unos papeles. ¿Puedo encargartelo? -Preguntó y asentí de inmediato.- Entonces muchas gracias, Tobias. Sabía que podrías ayudarme. Vuelvo en unos veinte minutos, suerte.

-Con su permiso, y gracias. -Sonreí aliviada y vi como se marchó con los papeles que había mencionado. Era una pila que me asombró.

Rasqué mi nuca, busqué por todas partes y preferí mejor sentarme en el escritorio del enfermero donde acomodé mi mochila a un lado. Luego organicé un poco sus cosas para evitar ensuciar y así acomodé mi topper con comida, algo simple pero que me llenará supongo. No le di más vueltas, solo comencé a comer cuidando no ensuciar nada y me sentí en paz por una vez en mi vida.

Seguro que Jade le explicó a Riddle que tenía cosas que hacer, por ahora no quiero preocuparme porque todos sepan que estoy ocupado disfrutando un tiempo a solas para mí. Y espero nadie venga, realmente estoy tan tranquila que creo que podría ponerme a bailar si no fuera por el dolor en mi cuerpo. Tantos moretones acumulados ya me hicieron mal, Ortho me recomendó usar unos ungüentos que por supuesto estoy usando y disminuyen el dolor, pero la marca ahí sigue. Claro que me tocó mentir, de nuevo.

Mi vida de por sí ya es un engaño.

...

Luego de un corto rato miré a la entrada, un chico entró corriendo y cerrando con velocidad la puerta sin generar tanto ruido para esconderse después en algún lugar. Escuché risas, murmullos y pasos acercarse y luego alejarse detrás de la puerta por lo cual luego dirigí mis ojos hacia a aquel tipo.

Ah, es mi líder.

-¿Líder? ¿Qué hace aquí?

-¡Ah! ¡E-eh, n-nada! -Gritó en un susurro y me miró asustado.- Porfavor n-no hagas ruido.