XXV

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Ante ayer había sido infernal, pero de alguna manera logré sacarme de las agarras de mi atacante. Siempre le estaré bastante agradecida a Jamil y a Kalim por como me salvaron inconscientemente se ese posible atentado hacia mi dignidad y por si fuera poco, mi físico. Pero a decir verdad, me siento mal, como últimamente me sentía por todas estas cosas que pasaba.

Tal vez ocultarse con la fachada de estar bien frente a los que realmente me aprecian está consumiendome poco a poco, hoy realmente no siento fuerzas. Siento un desgane terrible, como si el suelo y las paradas estuvieran absorbiendo mis energías conforme avanzo.

Caminaba inconsciente hacia la enfermería, quizás por antidepresivos cosa que supongo no habrá ya que no permiten medicarnos a los estudiantes con cosas más fuertes, por otro lado solamente quería dormir. Riddle simplemente entendió mi problema y prefirió no tocar el tema, así también con Jade que solo se dedicó a darme palmadas en la espalda en forma de consuelo.

Quizás puedo soportar un poco más, solo queda un año después de todo.

-Tobías. -Paro mis pasos y volteo hacia la voz que me llamaba con seriedad.

-Hola. -Respondo rápido y me acerco al moreno, él estando cruzado de brazos.- ¿Pasa algo?

-Parece que no, pero realmente... Si.

Oh no.

-¿Y qué es lo que...?

-Bueno no es que sea un entrometido ni nada por el estilo, pero hay algo que no me deja pensar en otras cosas. -Aclara su garganta.- No lo tomes a mal, pero estoy un tanto consiente de que Floyd Leech estuvo molestandote a inicios del año.

-¿Ajá...?

-Y sabiendo que es una persona realmente bipolar, lleno de sorpresas y demás cosas, supondré que las cosas se arreglaron así como así. ¿Estoy en lo correcto?

No.

-Eh, si. -Escondo mis manos en los bolsillos de mi suéter.

-Cuando estuvimos en la cancha de baloncesto, ¿Que estaba pasando específicamente para que me rogaras con la mirada que me quede?

Toda la pigmentación de mi piel se fue a mis pies, incluso si ni siquiera tenía tanto color, lo poco se fue por un tubo y quedé transparente. Noté que empezó a hacer frío por el hecho de que el chico apretó más sus brazos contra él. Tampoco pretendía mandarle señales de auxilio por hoy, o que me comprenda indirectamente, solo que ya no sé como ocultar toda la verdad y delitos de mi abusador.

Trago saliva.

-Jamil, yo...

-¡Aquí estaban chicos! Estuve buscando a Jamil pero ahora que te encuentro, Tobi, ¡deberías venir a comer con nosotros!

-¡Seguro, por qué no! -Respondo al instante suspirando de por medio de alivio, claro que discretamente.

Comenzamos a caminar por los pasillos. Jamil iba más pensativo que nada mientras Kalim hacía plática.

-¿Y de que hablaban?

-Ah, nada importante. Apenas estaba encontrando a Jamil, o más bien creo que él me encontró, lol. -Alzo los hombros indiferente.

Este tipo de actitudes son las que me hacen entrar con esa máscara de "todo está bien", "estoy perfectamente normal", "no pasa nada."

Pero al final, la verdad está ahí metida. No puedo huir de ella, no puedo escapar de este horror llamado Floyd Leech, porque si lo hago quedaré bastante mal no solo con aquellos en quienes me confían su amistad, sino a mi familia. Se siente feo este sentimiento de mal, y más aún cuando lo vives cada día de tu vida. Al despertar sentir que algo podría pasar, que puede ser motivo para que de un momento a otro todos estén señalandome, o que el humor de ese chico esté tan mal como para volver a romperme en pedacitos.

Y así seguir construyendome a su manera, luego volver a lo mismo y repetir el proceso de comprar un pegamento barato para armarme. Por lo menos no pasó recientemente gracias a mi salvación.

¿Por qué no simplemente dejo que mis amigos me vean como soy? Que sepan lo que soy... No puedo. No puedo y no puedo. Tengo miedo. Tan solo pensarlo me llena de muchas sensaciones feas en el estómago y me dan ganas de vomitar. Tampoco quiero causar problemas al espejo, fui muy específica al poner todo mi empeño para salir adelante.

Ya a hecho mucho por mi al dejarme estar aquí...

...

Nos sentamos en una mesa de la cafetería y los demás chicos llegaron, se nos unieron Azul como Jade, también Riddle de milagro por supuesto. Era un ambiente bastante bueno y enérgico, las anécdotas estaban volando de lado a lado siendo detenidas por nuestros oídos y luego expresando emocionas por éstas.

Sin embargo...

Jamil Viper no ha parado de mirarme sospechosamente durante todo el transcurso del receso. Él no tarda en darse cuenta, yo sé que es demasiado inteligente como para descubrir mi secreto pero no lo dejaré. No lo permitiré.

Aún si tus ojos intentan cavar en lo más profundo de mi alma, así como tratas de averiguar cada punto secreto de mi, voy a impedirlo cueste lo que cueste.

Entonces, moví ligeramente mis ojos notando así que la mirada del chico ya se había apartado de mi. Quizás los nervios no los había perdido, pero aún así estoy decidida a mantenerme-

-¡Hey que malos son!~ Me dejaron solo todos ustedes. -Observo con los ojos mínimamente abiertos al chico y éste evita la mirada de mi. Sus pasos se dirigen hacia mi lado, comienzo a temblar un poco hasta que Floyd pasa de largo y se sienta junto a su hermano, abrazándolo por final.- En fin, ¿De que hablaban?~

No sé si fue Riddle respondiendo de mala gana, o Kalim respondiendo enérgicamente por el hecho de haberme sentido tan pero tan calmada como para dejarme en estado de reposo estando rodeada de todos mis amigos, y poder también disfrutar de mi sandwich de atún.

Todo está bien...






























por ahora.

...

Bully [Twisted Wonderland] Floyd Leech x Fem!OcDonde viven las historias. Descúbrelo ahora