Capítulo 18

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- ¿Cómo has estado cariño? - ante su cara de nerviosismo, note que era momento de soltarla.

- Muy bien, ¿y usted? - contesto con cortesía pero sin perder su forma ruda de ser.

- También muy bien - la voz de esta mujer tenía alegría, ternura entre otros sentimientos mezclados. Se acercó a Toni y la abrazo, después se acercó a mí y saludo con el típico beso en la mejilla.

- Marie Brockman - se presentó.

- Cheryl Blossom - hice lo mismo.

- Que linda que es tu novia Toni- dijo la ahora agradable mujer poniendo su mano en mi hombro

- Gracias - dije con una enorme sonrisa tratando de no reír por el tono rojo que se había apoderado de las mejillas de Toni.

- Ella no es... - no pudo terminar la frase porque el pequeño grito de Jeallybean la interrumpió.

- ¡Cher! - grito feliz mientras corría hacia mí.

-¡Hola!, ¿cómo te la pasaste?- le pregunte sonriente mientras la cargaba

- ¡Genial!.

- ¿Es Jellybean? - pregunto Marie y Toni asintió con la cabeza, - ¡pero qué grande estas!, seguro no me recuerdas - acaricio su mejilla, - pero yo te conozco desde que eras una bebe pequeñita, yo era...

- Amiga de mi mami - la interrumpió la pequeña como si nada, solo note la seria mirada de Toni.

- ¿Me acompañas por mi trozo de pastel Cher? - como negarle algo a esa dulzura.

La baje y de inmediato tomo mi mano para correr hacia donde estaba el pastel.

*

La luz roja hizo que Toni se detuviera, me recargue en el asiento y volteé hacia la izquierda para poder verla, la miraba fijamente esperando a que volteara. Finalmente lo hizo y le sonreí, nuevamente reprimía sus ganas de reír.

Pero qué mujer tan antipática eres Topaz.

Seguí mirándola fijamente y volvió a voltear, esta vez le guiñe un ojo y le mande un beso sin que la pequeña se diera cuenta, y ahora si dejo escapar una pequeña sonrisa, negó con la cabeza y volteo su mirada al frente.

Puse mi mirada al frente al ver una luz blanca que no era precisamente del semáforo, el cual seguía en rojo, esta luz blanca comenzó a hacerse mayor y con más velocidad y se acercaba directamente hacia nosotros.

- ¿Toni? - dije asustada volteando a verla, estaba con el ceño fruncido trato de mover la palanca de los cambios, pero no entraba.

No era solo una luz, era un auto que venía a toda velocidad en dirección a nosotras.

Cerré los ojos fuertemente preparándome para el impacto, pero Toni acelero a fondo haciendo chillar las llantas para quitarse del camino del deportivo blanco tan familiar para mi, el cual volvió a su carril. Parecía totalmente intencional.

Toni freno de golpe, alineándose en la acera y gracias al cinturón de seguridad no nos impactamos contra el vidrio. No tardo ni un segundo en desabrochar el cinturón y bajar para ir hacia la puerta trasera y asegurarse de que la pequeña estuviera bien, yo solo me gire en el asiento para poder ver a Jellybean quien parecía tranquila, de un momento a otro exploto en llanto.

- ¿Estás bien?, ¿qué te sucede? - preguntaba Toni con desespero ante el incesante llanto de la pequeña.

- Mi vestido - dijo entrecortadamente mientras volteaba hacia abajo mirando su vestido totalmente manchado de pastel y me fue imposible no reír.

- Pequeña no llores, se limpia - le informe.

- Pero...

- Mira - no la deje terminar y me baje del auto para subir al asiento trasero, - yo te ayudo - tome un par de servilletas que traía y la ayude a sacar el pastel de su ropa.

- ¿Están bien? - preguntó Toni y ambas asintimos con la cabeza.

- No todos - pensé, mataría a Heather por esto.

*

- Gracias - dije bajando del auto.

- Cher - me llamo Jeallybean.

- ¿Qué pasa? - le pregunte sonriente.

- ¿Mañana vendrás con nosotras?.

- Eso no lo decido yo­ - le conteste mirando a Toni.

- No, mañana descanso de ella, además tengo trabajo - le explico a Jeallybean seriamente quien la miraba con cara de cachorro abandonado en plena lluvia.

- Por favor, Cheryl es divertida - insistió.

-No, tienes colegio y que hacer tarea - se nego nuevamente.

- Mañana es viernes.­

- JB, obedece a tu hermana, te prometo que luego iré a visitarlas, Topaz abre la maletera - le dije para después caminar hacia atrás del auto.

- ¿Para qué? - pregunto bajando del auto.

- Deje unas cuantas bolsas ahí - abrió la cajuela y efectivamente había alrededor de diez bolsas.

- No es normal tu obsesión con las compras - dijo mientras yo me sacaba las botas cambiándolas por los tacones que anteriormente traía.

- Si, tú tampoco eres normal­ - me di la vuelta y lancé las botas a un basurero que estaba en la acera.

- ¿Por qué las tiras? - pregunto extrañada.

- Las detestaste, así que no me sirven de nada - le dije riendo y tome todas mis bolsas.

- Nos vemos luego - bese su mejilla para después caminar hacia mi casa.

- ¿En dónde estabas? - escuche la voz de mi madre cuando subía las escaleras.

- En casa de...

- Está bien, yo mando a alguien para que recoja el pedido - era su celular con el que hablaba.

- Perdón hija, ¿qué decías? - tapo la bocina del celular para que no se escuchara de lo que hablábamos.

- Nada, no decía nada.­

*

- Paso por ti mañana, ¿sí? - leí el mensaje de Vero que había llegado a mi celular.

- Dalo por hecho - le respondí.

Continúe cambiándome, estaba cansada, más bien fastidiada. Habíamos pasado todo el día contestando esa tediosa guía, lo único que quería es dormir.

- Muy bien, ¿qué tal te fue? - me deje caer en la cama con el celular en las manos y comencé a teclear.

- Excelente, tanto que puedo asegurar que has perdido la apuesta, no te sorprendas cuando Topaz admita que esta locamente enamorada de mi - termine de escribir para después enviarlos.

Deje mi celular en la mesa de noche y apague las luces, en menos de cinco minutos había caído en un profundo sueño.

Me, Myself and I // ChoniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora