Capítulo 3.

9.7K 916 619
                                    

Madeleine Hannover.

29 de agosto, 2015.

Entonces hoy debía ir a la universidad, también volver a Chicago para hablar con mamá porque había decidido que oficialmente el primero de septiembre me mudaría oficialmente a Londres, ya que después de conocer un poco la ciudad con papá y Maggie me había gustado todo lo que había visto además de que mi departamento estaba terminado ya que luego de verlo decidí que no necesitaba de un diseñador de interiores, me gustaba tal cual estaba.

Me gustaba estar alrededor de personas a las que no les interesaba conocerme, me gustaba que nadie me conociera.

Podía sentir paz en este lugar tan desconocido.

Eran las seis de la mañana aquí en Londres y aunque aun no me encuentre acostumbrada a la diferencia horaria, el tener que hablar con mamá me mantenía nerviosa, por lo que decidí que seria buena idea salir a trotar un poco para gastar energías y no ir tan ansiosa a la reunión que tendría con el director en unas horas.

Me coloco ropa deportiva para así poder salir antes de que se me haga más tarde. Elijo un short deportivo negro, un top ajustado gris y encima me coloco una sudadera con cierre del mismo color que mi top, las zapatillas que ocupo para correr. Hago una cola en mi cabello, tomo mi celular y los audífonos, tomo un poco de dinero y salgo de mi habitación de hotel mientras le escribo un mensaje a papá informándole que salí a trotar y que luego iré con Josh a la universidad.

Troto por al menos uno hora, antes de dirigirme a una tienda para poder compararme un agua.

–Hola, buenos días ¿Qué se le ofrece? – me pregunta una señora amablemente.

Hay algo que me hace amar este acento que tienen los londinenses.

–Hola... necesito un agua mineral –le digo sonriendo.

Ella asiente y me indica en donde están para ir a buscarlas.

–¿Necesita algo más? – pregunta sonriendo.

Niego con mi cabeza y le entregó el dinero para pagar la botella de agua.

La señora suelta un suspiro cuando lee una revista y yo solo me volteo con una sonrisa divertida y salgo de la tienda para dirigirme al hotel y así arreglarme para ir a la universidad.

Llego al departamento alrededor de la 8 de la mañana, y corro a la ducha para tomar una ducha tibia de unos quince minutos ya que sude demasiado. Cuando salgo del baño me visto, me arreglo el cabello y me maquillo un poco, ya que me siento un poco cansada después de trotar, apenas termino de arreglarme tomo mi bolso y reviso que no me falte nada.

Saco mi celular de mi bolso para pedirle la dirección de la universidad a Josh, para evitar perderme. Intento saber como llegar a la universidad sin necesitar de nadie, ya que no me gustaría molestar a Josh.

¿Madeleine? – pregunta adormilado.

–Si, soy yo... Solo necesito la dirección de la universidad –digo asiendo un gesto de despedida hacia el portero del hotel.

–¿Por qué iras? – su voz esta ronca.

Ruedo los ojos.

–¿me la darás o no? – digo deteniéndome con la mano en mi cintura.

Lo escucho suspirar y hay un extraño sonido debido a que se está moviendo. Frunzo el ceño.

Iré por ti, yo iré a dejarte – dice.

Mi ceño se frunce aún más.

–No... quiero ir yo sola –digo e inconscientemente hago un puchero.

Los dibujos del príncipe [#1] NUEVA VERSIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora