29.

34 4 0
                                    

Desperté, abriendo lentamente mis ojos, deseando estar en mi habitación, y no aquí, en el hospital, pero al terminar de abrirlos, mis esperanzas se desvanecieron, encontrándome con que seguía aquí. Esto se estaba volviendo realmente agotador, quería irme ya.

Hoy era el quinto día que pasaba aquí, aunque para mi buena suerte, sería el último, puesto que al rato de despertarme, la doctora vino a decirnos que después de muchas pruebas y análisis, decidieron darme de alta por fin, con alguna que otra recomendación para mi salud, en caso de que pudiese volver la anemia.

Al momento de irse la doctora, mi madre me avisó de que iba a salir para ir a por un café y algo para desayunar, mientras que yo empezaba a tomar el desayuno que me había traído la enfermera. Aproveché para coger mientras mi móvil y revisar las cosas que tenía por ver, y lo primero que vi fue un mensaje de Jungkook, haciéndome sonreír.

Kookie :
"Amor, acabo de llegar a casa. No te preocupes por nada, todo ha ido estupendamente, menos por un pequeño detalle, y es que te he extrañado como no te haces una idea. Mañana iré a verte a medio día y te llenaré de besos. Te amo."

Un detalle que llamó mi atención fue que ese mensaje fue enviado casi a las 5 de la mañana, aunque no tenía por qué preocuparme, ¿no?

~~~~~~~

La mañana pasó rápidamente. Tomé una ducha en el baño que había en mi habitación, y me arreglé un poco. Entre mi madre y yo empezamos a recoger nuestras cosas, y pudimos irnos de aquí después de que la doctora me volviese a ver por última vez.

Mientras que bajábamos por el ascensor, Jungkook me mandó un mensaje, diciéndome que nos esperaba en la entrada del hospital, haciendo que mi corazón empezase a latir con fuerza, debido a la emoción. Realmente le había extrañado, pese a que sólo había pasado un día desde que nos vimos por última vez.

Una vez que estábamos llegando a la entrada del hospital, pude distinguir su imagen de entre toda la gente. Estaba realmente guapo hoy, aunque siempre lo estaba.

- ¡Kookie! - grité, corriendo hacia él.
- ¡___! Ten cuidado, cariño. - dijo mi madre, intentando seguir mis pasos.

Este, al escucharnos, se giró en dirección donde estábamos, con una gran sonrisa, abriendo sus brazos para corresponder mi abrazo.

- Te he extrañado, Kookie. - dije, abrazándome a él con fuerza.
- Y yo a ti, amor. ¿Cómo te encuentras? - dijo, besando la sien de mi cabeza.
- Estoy estupenda... - empecé a decir, separándome de él un poco. Estaba dispuesta a seguir hablando, hasta que vi algo en él que me hizo preocuparme de sobremanera. - ¿Kookie? ¿Y esa herida? - dije, cogiendo su rostro entre mis manos, observando bien la herida que tenía.
- Jungkook, cariño, ¿cómo te has hecho esto? - preguntó mi madre, a nuestro lado.

- Jungkook, cariño, ¿cómo te has hecho esto? - preguntó mi madre, a nuestro lado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


~~~~~~~

Por nada en el mundo les iba a contar la verdad, no quería que se preocupasen de esa manera, y menos aún por culpa de un capullo como lo es ese tal Lucas.

Sabía que me iban a preguntar, por más que intentase que no se viera la herida, seguía ahí, por lo que ya venía con un plan preparado para cuando me preguntasen, o al menos, con algo creíble.

- Oh, ¿esto? - dije, señalando la herida que había en mi cara. - No os preocupéis, ayer me di un golpe con la puerta del armario mientras buscaba mi pijama, y como estaba oscuro no vi bien por dónde iba. - dije, soltando levemente una risa forzada. Quería quitarle importancia al asunto sea como fuere.

- Jungkook, cariño, ten más cuidado la próxima vez. - dijo la madre de ___, pasando su mano por encima de mi chaqueta, dando una suave caricia en mi brazo. Parecía que a ella si la había intentado convencer, pero por otra parte, ___ no estaba muy convencida del todo.

Después de unos cortos minutos hablando, decidimos poner rumbo hacia mi coche. Su madre iba por delante nuestra, mientras que nosotros íbamos detrás, dejándonos así algo de privacidad para nosotros, mientras íbamos agarrados de la mano.

- ¿Seguro que eso te lo hiciste con la puerta del armario, Kookie? - cuestionó ___, volviendo a mirar mi herida.
- Si, amor, de verdad. No te preocupes. - dije, sonriéndole, para acto seguido coger su cara con mis dos manos y juntar nuestros labios.

En el trayecto, quise parar en un restaurante para invitarlas a comer, a pesar de que no estaban muy de acuerdo, sobre todo la madre de ___, puesto que no querían que me gastase ese dinero, pero aún así, logré convencerlas. De algún modo quería agradecerle a su madre que se portase tan bien conmigo.

Una vez terminamos de comer, fuimos directamente hasta su casa, y he de decir que el trayecto fue relativamente rápido y ameno, puesto que mi chica no paró de contar cómo de aburrido pasaron sus días en el hospital, mientras que no estaba yo, claramente.

Al llegar, las ayudé a organizar un poco las cosas que traían consigo, y una vez todo estuvo en orden, ___ y yo subimos hasta su habitación para pasar la tarde juntos.

- ¿Te apetece ver una peli, Kookie? - preguntó desde el baño de su habitación.
- Lo que tú quieras, amor. - dije, acomodándome en su cama.

Al salir del baño, pude ver que se cambió de ropa, ahora solamente se encontraba con una de mis sudaderas.

- Al final voy a tener que guardar bajo llave todas mis sudaderas, amor. - dije, riendo. - Me vas a dejar sin ninguna.
- ¡Oye! Ya te dije que no es mi culpa que me queden mucho mejor que a ti. - dijo, acostándose a mi lado, haciendo un puchero, lo cual me pareció adorable, haciéndome sonreír.
- En eso tienes toda la razón. - dije, para a continuación posicionarme rápidamente encima de ella, sin dejar caer todo mi peso.

Después de varios besos, y más de una caricia, decidimos ver una película juntos. No tenía intención de ir más allá con ella hoy, debe estar cansada después de tantos días en el hospital, además de que su madre se encontraba en casa.

La película prosiguió, tenía a ___ abrazada a mí, apoyada en mi pecho, mientras que acariciaba suavemente su pelo, mientras que solamente se escuchaba el sonido de la televisión.

- Kookie. - me llamó, pudiendo notar así su voz adormilada.
- Dime, amor.
- ¿Sabes lo que pasará dentro de unos días, no? - preguntó, acariciando mi pecho. Ante esa pregunta no pude evitar sonreír como un idiota enamorado, el cual era. Sabía perfectamente a lo que se refería.
- Claro que lo sé, amor, y créeme que será inolvidable.

Alone. [Jungkook & ___] Editando.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora