KEIRE ~Entre Dos Mundos~

✏Capítulo 11✏

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Sus ojos negros no se despegan de mis labios, su boca entreabierta a punto de cerrarse con la mía, y yo no entiendo por qué me siento tan ansiosa. Pero entonces, su cuerpo se tensa, deja de tocarme y retrocede un poco, su expresión es difícil de descifrar, cómo si estuviera replanteándose la situación o se arrepintiera de algo.

Se separa aún más y me mira cómo si se disculpara, sus ojos han vuelto a ser grises.
La tormenta es cada vez más fuerte y el agua del lago comienza a mecer el barco. Él suspira pesadamente y vuelve a mirarme con una sonrisa.
_ No tenemos que quedarnos aquí_ dice de repente_ ¿Quieres abismar conmigo?_ propone ilusionado.

_ ¿Abismar? ¿A... Keire?_ él asiente_ ¿Cómo?_ pregunto nerviosa_ Suelo abismar por accidente, no sé cómo hacerlo ahora_ informo.

_ Tranquila, yo puedo hacerte abismar. Y ya no te preocupes por esos "accidentes", el hecho de que pases tiempo conmigo normaliza tus cambios erráticos, si no me equivoco, anoche no sucedió, pronto podrás abismar a voluntad_ explica. Luego toma mi mano, y la pata delantera de Hércules.

_ Espera ¿me llamaste errática?_ reclamo.

Gael sólo ríe y cierra los ojos. De inmediato, una corriente eléctrica atraviesa mi mano y se extiende por todo mi cuerpo. El interior del barco se desvanece frente a mí, y en su lugar aparece una verde y soleada pradera, un bosque detrás de ella y las montañas nevadas rodeándolo todo.
Parpadeo un par de veces para acostumbrarme a la luz del sol, las aves azules y negras revolotean a nuestro alrededor. Todo es tan hermoso que no puedo evitar sonreír.

_ Te dan la bienvenida_ dice él a mis espaldas, refiriéndose a las aves.

_ Ya estuve aquí... ¿Verdad?_ indago.

Él asiente y sonríe hacia mí.
_ Uno de tus primeros abismos. Cada noche que pasabas en el hospital, tu cuerpo reaccionaba a mi sangre, haciéndote abismar de forma inestable, estabas en ambos mundos a la vez, parpadeando cómo una luz, un movimiento invisible al ojo humano, por suerte_ recuerda, y la culpa vuelve a surcar sus ojos_ Pero yo puedo sentir cada vez que ocurre, y acudí a ti en cada ocasión. Tu cuerpo estaba inconsciente en esa cama, pero aquí eras libre de despertar_ dice sonriendo.

Me tomo un momento para repasar todo lo que ha dicho y sonrío yo también, aunque no sé exactamente por qué.
_ Estuviste aquí con Hércules cada vez, sus ladridos hacían que volviera_ recuerdo.

_ Al principio, cada sobresalto te devolvía a tu mundo, pero no fue así las ultimas veces, por eso tuve que intervenir_  dice, susurrando la última frase.

_ Aquél hombre con la daga... ¿Qué le ocurrió?_ indago cautelosamente, temiendo que diga lo que estoy pensando.

Gael mira mis ojos fijamente por un instante.
_ Aquél... Monstruo sanguinario, fui yo lo que le sucedió_ dice, su rostro transformándose por la ira, el tinte negro inundando sus ojos de nuevo. _ _ La destrucción corre por mis venas, Len, puedo destruir lo que sea y a quién sea con tan sólo tocarlo..._ acaba susurrando en mi oído, haciendo que me estremezca por su roce.

_ Si intentas asustarme, no está funcionando_ le informo con indiferencia.

Él se separa de mí y me mira dolido.
_ No eres divertida_ dice ofendido. Yo me río de su expresión y ambos continuamos caminando en dirección al bosque, seguidos de Hércules.

_ Keire es hermoso_ digo, mientras observo los árboles a mi alrededor. De repente recuerdo que la última vez había nieve y hacía frío, y ahora hace bastante calor.
_ ¿Por qué hace calor? Hace dos días me congelaba aquí..._ pregunto, extrañada.