KEIRE ~Entre Dos Mundos~

✏Capítulo 15✏

Doble actualización!! 🙌
Espero guste.

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_ ¿Qué hace ella aquí?_ oigo cómo habla entre dientes, claramente disgustado. Ah, discúlpeme, señor, por mi desagradable presencia.

_ Me pareció lógico traerla aquí en vez de dejarla a su merced en el bosque en medio de la noche_ contesta, con sorna, el hombre a cuyas espaldas me refugio de la enfurecida mirada de Gael. ¿Cuál es su problema conmigo?.

Los dos se miran a los ojos cómo si se odiasen, apretando puños y dientes, mientras el aire se carga de lo que parece ser una antigua rivalidad entre ambos.
Echo un vistazo detrás de mí y me encuentro con una escena inesperada; nadie está de lado de nadie, ninguna de las seis personas restantes se ha puesto de pié ni parece tener intención de intervenir, cómo si, a pesar de su clara diferencia de razas, no estuvieran a favor de ninguno de ellos. Y digo ninguno refiriéndome a Gael y a Declan, que claramente son quienes parecen desprender superioridad entre todos. Aademás de que ya he visto al castaño dando órdenes y ser obedecido instantáneamente, el otro es la viva imagen de la autoridad.

_ Pudiste haberla seguido hasta que consiguiese volver por sí misma y ya_ ruge el pelinegro, y veo su rostro endurecerse tanto que asusta. No entiendo por qué le molesta que me haya traído al campamento.

_ Así haces tú las cosas ¿no? Te quedas al margen de todo y luego crees que puedes reclamar algo cuando te place_ escupe Declan, cómo si pudiera apuñalarlo con sus propias verdades.

Mis ojos se abren y me quedo boquiabierta al escuchar eso, me doy vuelta otra vez y noto que todos tienen la misma expresión que yo.
Giro nuevamente sobre mis talones y me encuentro con los ojos de Gael mirándome con rabia y algo más ¿decepción? Parece dolido, cómo si lo hubiera traicionado. Quiero gritarle que no tiene derecho de verme así, que no soy yo la que hasta hace unos días hacía de cuenta que no existía, pero me contengo y trato de transmitírselo con una mirada lo más indiferente posible.

Él pasa de mí y vuelve a ver a Declan, pero esta vez sus ojos grises se vuelven tan negros que ni el fuego es capaz de reflejarse en ellos. Gael sonríe enajenado y el miedo se instala en mí, crispando mis nervios. Algo anda mal, muy mal.

_ ¿Qué has dicho, animal?_ pregunta despectivamente, entrecerrando los ojos al tiempo que ladea su cabeza hacia él.

Declan se ve realmente irritado al escuchar esa última palabra, siento cómo todo su cuerpo se tensa en sobremanera y me aparto de su espalda, dando un paso hacia atrás al no sentirme segura estando tan cerca. Siento cómo unos brazos rodean mi cintura y miro hacia arriba, Brice me sostiene y trata de ponerme a salvo contra su cuerpo. Algo en su rostro precavido me dice que debería de esperar que suceda algo malo.

Miro nuevamente a su hermano y este gruñe, al tiempo que enseña sus afilados caninos, y creo ver que sus ojos destellan en un verde luminoso, en el momento que se lanza contra Gael. Este último lo imita y ambos hombres se ensañan en una brutal y sobrenatural lucha cuerpo a cuerpo.
Los golpes resuenan tan fuerte que si cerrara los ojos podría jurar que alguien está golpeando troncos con un enorme martillo, aún así, observo atónita cómo parecen no hacerse daño.
Declan logra empujarlo lejos de sí, haciendo que resbale y rasguñe el suelo con ambas manos, y es cuándo me percato de algo; Gael a dejado un rastro ennegrecido dónde sus palmas han tocado la hierba. No puede ser.
Inmediatamente recuerdo cómo redujo a cenizas al traidor que quiso asesinarme en tierras invernales con sólo tocarlo. El temor se apodera de mí al pensar en que podría hacerle lo mismo a Declan. Acabo de conocerlo formalmente, pero mi resentimiento hacia quién finge que soy invisible hace que me ponga de su lado.