Demasiado bueno para ser verdad.

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Si me pongo a pensar ahora en como sucedieron las cosas entre nosotros  tal vez me de cuenta de que debí  haber  notado las señales de que si me quedaba junto a él sólo habrían  problemas.

Pero a su lado era como tener éxtasis en las venas,  a su lado no existía el peligro  y en realidad  no importaba nada por que el era Joshua Ruvalcaba  , y tanto para el como su familia, no había nada que se les negara.

Todo sucedió  como en los libros , nunca he sido muy aficionada a la lectura pero aquellos en los que el amor imposible era el tema principal  eran mis favoritos.  Tal vez no debería sorprenderme tanto de  haber llegado hasta donde estoy.

- Actúa  normal - me dijo al tiempo  en que metía una bolsa de papas fritas en mi chaqueta.

Mi respiración  se detuvo por un segundo hasta que recordé que no era la primera vez y mis músculos se relajaron.

La primera vez había estado realmente asustada pero después de ver que eso se repetía  deje de darle importancia  y comencé a tomármelo con calma.

Como ya lo dije,  No Se como he llegado hasta aquí. 

Cuando lo conocí me volví loca por él,  sus ojos  y sus manos eran como una droga para mi. 

Cabe aclarar que en mi defensa el se aprovechó de eso y yo No Se lo impedi.  Debí haberme  alejado cuando supe de que iba todo.  Debí haberlo dejado cuando supe en que estaba involucrado, pero lo amaba  y esto era como aquellas historias  que me encantaban. ¿ Acaso el amor no lo vencía  todo?

Pero me olvide de mi y de aquellos quienes me amaban. 

Y ahora caminaba hacia una camioneta con el siguiéndome a mis espaldas,  por costumbre miré hacia ambos lados antes de subir al asiento del copiloto y vi como joshua  hizo lo mismo antes de subir el.  Miré  hacia atrás y el hacia adelante mientras ponía el pie sobre el acelerador. "Adiós Monterrey " dije entre susurros. "Adiós mamá " pensé para mis adentros conteniendo el nudo en mi garganta.  La camioneta arrancó  y supe que no había marcha atrás.  Si me quedaba moriría y pondría en peligro a quienes amo.  

Me agarre fuerte al asiento conteniendo mi impulso de salir corriendo  de regreso a mi hogar.

Odiaba a joshua  ruvalcaba.  Odiaba haberlo conocido.

Hojas de marihuanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora