{ E }

507 78 32
                                    

El timbre sonó, Jimin llegó con un plato de aperitivo y vino en la otra mano.

— ¿Cuándo comenzaras a pintar el muro? — Jimin se sentó en uno de los dos sillones de la sala.

— Mañana hablare con los responsables del permiso, después tendré que limpiar el lugar donde se pintara, se deberá lijar si no hay muchos inconvenientes — yo me encontraba en el otro sillón.

— Cuenta conmigo — elevó su copa, iguale su acción.

— Gracias, necesitare de mucha ayuda, dependiendo de qué tan grande sea el lugar — la bebida me encantaba, Jimin tenía buenos gustos.

— ¿y qué sucedió con mi retrato? ¿aun sigues indeciso? — me entretuve mirando el fuego. Sentía que estaba alejándome de la habitación, pero estaba seguro que seguía sentado. La fogata era hipnotizante, veía el color amarillo pelear contra el rojo que se convertía en naranja al decaer en llama. Estaba convencido que el amarillo ganaría pero grande fue mi sorpresa cuando un color azul nació en medio de aquella batalla.

— Aún estoy en los preparativos — pude hablar, gracias a eso regrese a la realidad.

— Tienes mucha fuerza de voluntad... — Jimin susurro.

— ¿Por qué lo dices? — no entendí de que hablaba.

— Por nada — comenzó a reír, yo solo lo acompañe sonriendo.

— ¿sigues peleado con tus hermanos? — cambie de tema.

— Ah... estamos en paz, Namjoon suele ser estricto, piensa que somos unos niños aun — siempre quise saber porque ellos eran tan unidos — pero al fin pude convencerle, lo soborne — fijó su vista al fuego.

Pude observar su perfil. La luz de la fogata iluminaba los rasgos fuertes de Jimin, nunca había notado que en verdad era atractivo...

Me sentía atontado por la bebida, "¿Qué raro?"

Según mi historial, yo puedo resistir bien el alcohol o bueno, eso pensaba.

Volví mi vista a Jimin y él también me miró.

— ¿con que lo sobornaste? — Jimin alegre contesto que era un secreto.

Hablamos acerca de pasar navidad juntos. Hoseok y Taehuyng llegarían pasado año nuevo, solo dios sabe lo traumado que estuve cuando en año nuevo, esa pareja se emborracho y gritaba a todo pulmón su relación.

Acepte la invitación de Park.

Poco a poco, el olor a canela se escabullo por toda la habitación, "¿era Jimin quien olía así?"

Cerré los ojos por el cansancio, "jimin".

Me acomode en el sillón, sin darle mucha importancia a lo que mi invitado haría.

Confió en Jimin.

El piano fue tocado de manera descendente de grave a agudo. Puede llegar a provocar escalofríos si te encuentras en un lugar como el mío.

Abrí los ojos, parpadee un par de veces. Fije mi vista en la chimenea o eso intente. Solo sentía las colchas que estaban mezcladas por el olor a manzana y canela.

"ese olor no es mío"

Pero era tan dulce, que me lleve las sabanas a mi nariz, respire profundo su aroma, me acomode de lado, me parecía que estaba en mi cama.

Así era, pero había alguien más en ella. Abrí mis ojos, al ver a Jimin acostado a mi lado. Parecía estar en un sueño muy placentero. No me quise mover demasiado para no despertarlo.

"¿Cómo llegamos aquí?"

Gire hacia el estante de mi cama, desbloquee mi celular para ver la hora.

"3:20" la luz me cegó un momento.

La apague de inmediato cuando el brillo me dio en la cara. Pude imaginarme que Jimin me llevo hasta la cama y el cansado se acostó al otro lado.

Era lógico, a ambos nos ganó el sueño. Ambos estábamos borrachos.

Me volví a acostar. En la universidad solía compartir cama como mis compañeros al terminar alguna tarea y estar muy cansados. En una cama podían caber cuatro personas. Incomodas, pero cabían.

Los pájaros me despertaron, me sorprendí de despertarme solo.

"Jimin ¿se habrá ido?"

Me estire, fije mi mirada en la ventana y en lo dulce que se sentía la mañana. Pero...

"algo no cuadraba"

"algo falta"

— Qué raro — quería recordar que era, algo faltaba en la mesita de noche que se encontraba cerca de la ventana.

Estuve esperando a que mi mente hiciera clic y lo supiera, sentía que pronto lo comprendería.

— Buenos días, suga — Jimin entró al cuarto.

— Oh... hola Jimin — despeje mis ideas. "si es importante lo recordare".

— ¿te sientes mejor? — se sentó a mi lado.

— Supongo... no recuerdo mucho... pero mi cuerpo me duele, como si un camión me hubiera atropellado — moví mis brazos y cuello para relajarme.

— Sin duda, ayer cuando te traía, te caíste un par de veces, no pensé que no soportaras el alcohol — se paró de la cama, caminando hacia la puerta — me tengo que ir, debo trabajar, llamame cuando necesites un par de manos extras — lo perdí de vista y fue cuando pude levantarme.

— Espero no haber hecho algo vergonzoso — "a veces hablo borracho".

Ese día no hubo problema; Paul apareció en la tarde, comí acompañado de mi mascota.

Después me reuní con el comité para dar los detalles de mi obra.

Aceptaron la pintura, me dieron pase libre para conseguir lo que necesitaba, todo sería dado por parte de los vecinos y la misma iglesia.

Este día fue gratificante, tenía que contárselo a alguien, así que me dirigí hacia Kendall.

Muy pronto su restaurante estaría cerrado.

— ¡Kendall! — grité desde su porche.

Toque un par de veces, pero ella no salía, mire por la ventana para saber si había alguien adentro.

Las cortinas me impedían ver alguna silueta, pero la casa está a oscuras.

"tal vez salió"

— Que mala suerte —

Me fui a mi casa y marque a Mark, pero pronto cuelgo. Que tonto, Mark a estas horas estará estudiando, solo los fines de semana le podía contactar.

Mire los contactos que guardaba en mi celular, apareciendo Hoseok. Decidí mandarle un mensaje, puede que esté en junta o con Taehyung y no quería interrumpir si estaba ocupado.

Sólo caminaba por la acera, a lo lejos ya distinguía mi casa, del otro lado del camino una persona figuro.

Era Jimin. Me alegre, por fin a alguien le podría contar las buenas noticias.

Cuando Jimin cruzo la calle, corrí hacia su dirección. Él se encontraba de espaldas y fue momento para jugarle una broma.

Mientras corría, grite su nombre.

El volteo y me miro asustado. 




>> gracias por leer ~~~

Vudu Doll - jimsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora