Había comenzado a amanecer y mire a Isabella a mi lado, estaba aún dormida y se miraba encantadora, no nos dimos cuenta cuando nos quedamos dormidos, solo lo hicimos, así que la desperté para que apreciáramos esto juntos, no hay nada más seguro que Isabella el resto de su vida, junto a mi, unidos por amor, deseo, felicidad y algo más... oscuro.
-Ey -dije meneándola un poco- despierta, pequeña... "dulce asesina" -le susurré al oído- aprecia un buen amanecer y relájate... que hoy conocerás a mi madre.
-Mmm -dijo con los ojos cerrados- déjame 5 minutos más.
-No -dije en tono firme y ella abrió los ojos de golpe, para ofrecerme una sonrisa enorme- ¿Sabes? Podría despertar todos los días del resto de nuestras vidas de este modo.
-Cierra la boca, Müller -dijo poniéndome un dedo en la boca. Se acomodó cerca de mi y observamos los increíbles colores mezclados, el cómo la luz iluminaba todos los edificios, toda la ciudad poco a poco, era un amanecer precioso. A mi lado Isabella comenzaba a bostezar y quedándose dormida otra vez, me dijo- Müller, has hecho que pase uno de los días más inefables de mi vida, te quiero -comenzó a decir y su voz se fue apagando poco a poco hasta quedar dormida- Te quiero como no imaginas... un poco demasiado.
-Te quiero más de lo que deseas y siempre, siempre caeré por ti -dije sonriendo, aunque creí que ya no me había escuchado, en un leve susurro me contesto.
-La pregunta, Müller es... - dijo casi inaudible- ¿hasta donde estás dispuesto a caer? -la mire, tan tranquila, tan vulnerable, tan inverosímil, tan efímera, tan mía... caería hasta donde fuese necesario, pequeña, pero no dije nada, solo la pegue más a mí.
Conducí hasta su casa, ella aun iba dormida así que la tome en brazos y la subí a su habitación, Zeus salió a encontrarnos alegremente, subí a su habitación y la dejé ahí, le di un beso en la mejilla y baje en el elevador.
-Nos vemos más tarde, chicos -anuncié mientras salía del elevador- Isabella esta aun dormida. Y, gracias por ayudarme con todo, no saben lo especial que fue para ambos.
-Sabes que haríamos todo por la felicidad de ambos -dijo Henry a un lado mío.
-Ella es nuestra hermana -dijo Kaylee al lado de Valeska y ella asintió- hemos estado juntas durante algunos años, sin embargo eso ha sido suficiente para que se ganara nuestro corazón...
-Y tú -dijo Valeska- tú la haces feliz, y eso nos hace felices a todos.
-Generalmente -comenzó a decir Cheryl- todos aquí nos hacemos bien los unos a los otros, nos une nuestro cariño, que seríamos capaz de todo por el otro.
-Sin sentimentalismos -dijo Adler entrando a la cocina- aunque si se han convertido en mi familia -dijo acercándose a Valeska y besándola, sonreí y solo insinúe:
-Solo faltan ustedes Henry-Kaylee -y salí corriendo antes de que pudieran golpearme, solo escuche el estallar algunas carcajadas detrás de mi.
Estaba muy ansioso de que llegara la hora de ir a casa de Isabella, me recosté en la cama y cuando menos lo esperé me quede dormido, cuando desperté faltaba 1 hora para la comida, me levante rápido y me subí al coche, ni siquiera me di cuenta que no me había duchado, así que decidí ir por Isabella, luego regresaríamos y me ducharía rápido, para luego irnos a casa de mamá. Baje del auto deprisa y toque el timbre, enseguida abrió Adler.
-¿Dormido? -dijo alzando una ceja.
-Solo una vez -dije riendo.
-Ahora baja Isabella -anunció mientras entraba a la sala- realmente se ve muy preciosa, he de admitir que nunca te equivocas -me miro y yo solo alce una ceja y lo mire de manera seria- ¡Vamos! Estoy bromeando, estoy con Valeska. Créeme que ahora se que sientes por Isabella, que sentiste y porque no la dejas, porque no puedes alejarte de ella, es que... es como si fueran una droga, realmente especiales, nuestros mundos, caeríamos por ellas, estamos enamorados.
ESTÁS LEYENDO
¿Hasta donde estás dispuesto a caer?
RomanceEn un mundo donde casi nadie es real, decides arriesgarte por tus seres queridos, por amor y amistad, ¿hasta donde estás dispuesto a caer?