Jason Müller
-La pasé increíble -dijo Isabella al bajarse de la motocicleta. ¿Como diablos podría cambiarla a ella por Leyna o alguien más? Esta chica era increíble, era la persona más extraordinaria, era sencilla, amable, inteligente y mil cosas más, para mi era perfecta, pero mejor no decirlo frente a ella; se molestaría y me diría que eso no existe. Aparte de todo se preocupaba por los animales, le encantan debo decir, se preocupa por las personas que quiere, daría la vida por sus amigos y por su familia, mejor no pienso que haría, eso por no mencionar lo preciosa que es, su belleza puede dejar a las personas anonadadas, su cabello era largo, color café oscuro, sus ojos del mismo color, pero diablos, eran hermosos, no te revelaban nada, eran como un misterio, que debías resolver poco a poco, te invitaban a más, y una vez dentro te perdías, no había manera de escapar. Su piel morena clara, que en serio, te volvía loco, sus labios eran carnosos y uff, amaba como lucia el color rojo y sus variantes, siempre ha sido su color favorito, siempre lucia increíblemente sexy y bella con todo lo que usará, esta chica me volvió loco desde el primer segundo que la vi, pero cuando la conocí aun mas no pude evitar enamorarme y amarla con todo mi ser- Gracias por este día, tengo que admitir que hace mucho no me la pasaba así- admitió bajando la cabeza y poniéndose un poco roja, que linda se miraba.
-Conmigo siempre lo harás -dije guiñándole un ojo.
-Pensamos que te había raptado -dijo Adler saliendo de la casa con Valeska, Kaylee y Henry pisándole los talones. Isabella solo soltó una gran carcajada -no estamos bromeando- dijo en tono serio.
-Tranquilos -dijo Isabella con calma- ¿que podría pasarme? Se como defenderme y ¿creen que estando cerca de este chico podría pasarme algo malo?- finalizó levantando una ceja hacia mí, me encanta que haga esa expresión.
-Me ofenden -dije haciendo ademán de estar indignado- JAMÁS DEJARÍA QUE LE PASARA ALGO -y lo decía enserio, luego la acerque a mi y le di un tierno beso en una mejilla.
-Bueno, debemos dormir -interrumpió Kaylee- mañana debemos ir a la universidad- nos vemos allá Jason, un gusto que hayas pasado la tarde con nosotros Adler.
-Nos vemos mañana -dijo Isabella dándome un fuerte abrazo y luego un beso en la mejilla- Quizá nos veamos mañana, Adler -dijo volteando hacia mi hermano y dándole un abrazo.
-¿Me llevas?- pregunto Adler mirándome.
-Claro, pero antes quiero hacer algo -Isabella acababa de entrar a la casa y toque el timbre, abrió la puerta inmediatamente y no pude contenerme, me lancé hacia ella, tome su rostro entre mis manos y le di un beso apasionado, después de lo que parecieron mil años, me separé de ella y estaba con una sonrisa enorme en su rostro, contagiosa.
-Sigues siendo ridículamente cursi -dijo mirándome muy seria- hasta mañana, Müller -concluyó riendo.
Ya quería que fuera mañana, realmente la pase increíble al lado de Isabella, hace muchísimo tiempo que no disfrutaba de un día así, si no era porque Leyna estaba pisándome los talones siempre, era porque papá estaba exigiéndome ir a su empresa y aprender a hacer todo lo que el quería, ¿acaso no podía entender que yo simplemente no quería hacer lo que él? Pero estando con Isabella todo pasaba, no existía algo y mucho menos alguien a quien odiara.
-Sabes que papá hará todo para separarlos, ¿verdad? -me pregunto Adler sacándome de mis pensamientos mientras subíamos a la moto. Le lance una mirada fulminante y alzó las manos en su defensa- Yo solo digo que hagas todo lo posible para que esta vez no vuelva a pasar lo mismo, se ve que ella te quiere muchísimo y de verdad. Y tu... pues para que digo algo, tú estás enamoradisimo de ella desde que volviste de ese viaje.
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¿Hasta donde estás dispuesto a caer?
RomanceEn un mundo donde casi nadie es real, decides arriesgarte por tus seres queridos, por amor y amistad, ¿hasta donde estás dispuesto a caer?