Tócame

1.5K 117 92
                                    

- dices... ¿Que duerma aquí contigo? - pregunté atónita.

Un fuego vivaz me recorrió el cuerpo como si fuera una ola, imaginar todas las cosas que podrían pasar si me quedara, si el fuera...

Dios...

- si, eso mismo... - dicho esto, comenzó a darme suaves besos mojados en la boca, eran pequeños pero lo suficientemente precisos para que perdiera la razón.

- Pero... - intente justificar para escapar.

- Mikasa, deja de negarlo - me miró con sus cejas hundidas - a ti te pasan cosas conmigo, no se hasta que punto, pero están ahí. Eres horrible para las mentiras y sobre todo para intentar ocultarlo.

- no - me negué abruptamente sin separarme de él - no es así... Tu tienes muchas amigas con derecho, juegas a quizás que cosa y yo...

- que... ¿Te molesta que tenga ese tipo de amigas? - pregunto con voz pícara y burlesca - ¿celosa Mikasa?

Lo golpee en el hombro.

- Claro que no, idiota - mentí, obvio que me molestaba, pero me molestaba más el hecho de que quería que hiciera conmigo todo eso que hacía con ellas. Excepto esa parte en la que de un día para otro deja de hablarles, como si ya no hubiera nada interesante que ver ahí. Y eso pasaba siempre que tenían sexo. Lo sé porque todas dicen lo mismo. Y a muchas no parece importarles eso con tal de estar un rato con el, quedan satisfechas... Que coraje.

- No voy a ser una de esas amigas tuyas Levi, tengo una dignidad que proteger - dije, dispuesta a no caer y ponerme de pie para marcharme.

Pero otra ves no me lo permitió, me tomo de los hombros y me arrastró junto a él. Sentándose en la cama conmigo delante de él. Invitándome.

- No quiero que seas una de ellas - asegura - solo te estoy pidiendo que te quedes, no haré nada que tu no me permitas.

No dije nada, estaba tan perdida en el y por el que me quede sin argumentos para huir, porque no quería hacerlo, quería quedarme y acurrucarme a su lado, queria que me besara todo lo que quiera, quería que me hiciera todo lo que quiera. Y me sentí inmensamente estúpida por querer eso.

Levi tomó mi mano y me atrajo hacia el, por inercia quedé sentada con mis piernas a cada lado, rodeandolo, mientras el quitaba mi corbata con lentitud incitando a que lo detuviera.

No lo hice, solo me agite, mi respiración se descontrolo y mis manos temblaban, levi para darme calma tomo mi nuca y me acerco a él para volver a besarme, con ternura. Con cuidado.

Tomó una camiseta que estaba en el borde de la cama y me la entregó.

- puedes dormir con esto, si es que quieres quedarte.

- pero yo nunca e dormido con nadie - confesé con la mirada baja. Levi me miró con ternura y me puso el pelo detrás de la oreja.

- Tampoco yo... Y menos en mi cuarto.

- ¿a que te refieres?

- nunca e dormido con ninguna chica que me haya acostado. - me miró a los ojos - y tampoco nunca me e acostado con ninguna en mi cuarto.

Entrecerre los ojos intentando encontrar un índice de mentira, pero no encontré nada.

Mire hacia abajo, ya no podía soportar esta sensación que se estaba acumulando entre mis piernas, así que:

- debo llamar a mamá para avisarle - susurre, tan bajito rogando que no me escuchara, lo sé, es estúpido.

Pero si me escuchó, por que vi su sonrisa de suficiencia.

Solo para ti Donde viven las historias. Descúbrelo ahora