Capítulo 26

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ㅤㅤLA MAÑANA del sábado Taehyung se despierta más tarde de lo usual; su cabello apuntando hacia cualquier parte, los lentes aún sobre el puente de su nariz. No tiene ánimos de hacer nada, pero cuando un ruido le hace girar la cabeza y ve a Sr. B recostado sobre su escritorio, lamiendo sus patas, saca energías de quién sabe dónde y se levanta. Tiene cosas que hacer.

Ese día no se preocupa del desastre que es su habitación, dejando la cama deshecha y los cientos de papeles y envolturas donde están. Se da cuenta de que la pizarra de corcho que clavó en una de las paredes se cayó, junto con todas las notitas que a lo largo de dos años había pegado y que no se preocupaba de ordenar, pero solo se alza de hombros y empuja los coloridos papeles con su pie descalzo y se mete al baño.

Quince minutos después ya está cerrando la puerta de su dormitorio.

Silbando, sujeta la bolsa deportiva donde duerme tranquilo el negro y (ahora) gordo gato —«debería darle menos comida»— y sale de la residencia, cuidando no ser visto por Soobin ni nadie que le guarde rencor, lo cual es difícil, porque la cantidad de gente a la que ha importunado una o más veces asciende a... un número considerable. Pero no se cruza con nadie, para su suerte, y se relaja, abriéndose paso por el barrio universitario.

Se detiene unos minutos en el minimarket en el que atiende Baekhyun y compra unas gominolas. Intercambian un saludo amistoso y luego Taehyung vuelve a emprender su camino. Ha avisado que ese día no se presentaría a su turno en la biblioteca porque, desgraciadamente, tuvo una severa reacción alérgica por culpa de un gato. Moon Byulyi no le creyó nada, pero le dijo que estaría bien no verlo de vez en cuando y que lo esperaba la próxima semana. Sin faltas. «Sí, sí», le había dicho, «solo tengo que deshacerme del gato».

Aunque dijo la verdad, o parte de ella, por lo menos. Porque después de la latosa escena con Soobin, cuando amenazó con delatarlo, llegó a la conclusión de que, por más que la compañía de Señor B no fuera tan molesta como su primera impresión le hizo creer, esa de "odio los gatos", tenía que sacarlo de su dormitorio. No está en sus planes tirarlo a la calle, sin embargo.

Por eso se dirige hacia el departamento del profesor Jeon.

Necesita un sitio donde esconder a su gato, y Yoongi no es una opción. Primero, el gato lo odia; segundo, Jimin no dejaría por nada del mundo que metiera un gato a su departamento. Usualmente eso no le importaría; sin embargo, si quiere seguir aprovechándose de que tiene un auto, no debería presionar. En cambio Jeon... Oh, Jeon. Llevarlo donde él es el plan perfecto. Taehyung lleva pululando a su alrededor desde inicios de septiembre, así que ya tiene más que una vaga idea de su personalidad, y está seguro de que lo convencerá de quedarse con Señor B: el profesor Jeon no es ni la mitad de impenetrable de lo que aparenta ser. O no con él, en todo caso.

Usará eso a su favor. Lo pensó días atrás, por ello es que, luego de cuarenta minutos de apasionados besos en su despacho el jueves por la tarde, Taehyung anunció que se iba, solo para esperar sentado en una banca solitaria y oculta a las afueras de la facultad a que Jeon saliera. Se tardó unos treinta minutos en aparecer por las viejas puertas de madera, y luego, tras verlo acomodar su largo abrigo gris —«Jeon usa abrigos, cómo no»— y respirar hondo el venidero aire invernal, sin reparar en su presencia, lo vio irse.

Y él lo siguió.

Fue una actividad mucho más productiva de lo que pensó sería, porque aprendió más de Jeon que solo su dirección; a saber, que camina hasta su departamento, a unas cuadras de la universidad —viven demasiado cerca, para la mala suerte del profesor—, aun cuando puede tomar autobús, ¿o es que ese día decidió caminar?; y que le gusta ver la arquitectura del barrio, las calles y edificios. Se toma su tiempo: a veces levantaba la vista al oscuro cielo y luego seguía. Y siempre parece estar pensando demasiado. Taehyung ya notó que es un sobrepensador, pero no hasta qué punto.

LA FILOSOFÍA DEL DESEO © vkookvDonde viven las historias. Descúbrelo ahora