¡DAME CHOCOLATE ! - (Luciale)

CAPITULO 29

Pov Lucía

📲 ¡Sam está aquí esperándote! Y se ve muy enojada ☠️🤯🙊- ¿Que debo hacer le digo o no a Ale? Creo que mejor la enfrentare yo sola es hora que le dé la cara.

📲 Mar ¡Porfavor! Dile que me espere en el parque que esta de camino a la empresa, yo llegaré para aclarar las cosas.

📲 ¿Irás con Ale?

📲 No Mariana, esto es asunto de mujer a mujer, no le debo nada así que la enfrentare de una vez por todas.

📲 Lu, ¡Ten cuidado! ¡Esa Perra está loca! Y no quiero que te haga nada.

📲 ¡No te preocupes Mar! Yo sé defenderme.

📲 Está bien, pero te estaré mandando mensajes.- Bloqueé mi celular al ver que Ale se estaba acercando a la mesa y suspiré pesadamente.

- ¿Pasa algo amor? ¿Porque tienes esa carita?- Ale tomó su lugar en la mesa.

- No pasa nada amor, es solo que te tengo que pedir permiso para faltar una o dos horas a la oficina.

- ¿Por qué?- me preguntó Ale frunciendo el ceño, ¡Mierda! ¿Y ahora que le digo?

- Amor, lo que pasa es que tengo que ir a depositarle un dinero a mi papá.

- ¡Está bien princesa! ¿Quieres que te lleve?-

- No es necesario amor, ve a la oficina tienes muchos pendientes hoy- le dije terminando mi comida.

- Bueno princesa, nos vemos en la oficina entonces ¡Te amo!- Ale pagó la cuenta, se levanto de su lugar y se acercó a mí para depositar un beso en mis labios. - Amor ten las llaves de mi auto, no quiero que andes en taxi- me dijo dándome las llaves de su auto.

- ¡No amor! Yo puedo irme en Uber no es necesario-. Negué al recibir las llaves.

- Princesa ten, yo me iré en Uber y ya cuando llegues a la oficina, yo te llevo a tu casa ¿Si?-. Acepté las llaves a regañadientes. Ale salió del restaurante, vi como se subía al Uber y se alejaba ¡Ella es tan caballerosa! Pensé viendo las llaves y sonreí.

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Estaba en el parque moviendo mi pierna nerviosamente esperando a Sam, cuando vi que una camioneta se estacionaba en el parque y pude reconocer que era ella. Se bajo de su camioneta y negó la cabeza muy seria cuando me vio.

- ¡Bravo! ¡Bravo! Pero que ¡Gran actriz eres Lucía!- me dijo Sam acercándose a mi y apluaudiendo.

- Sam yo...

- Shh... Te Callas- Se acercó más a mi, tenía la cara roja de la ira y los puños cerrados. Debo admitir que eso me asustaba porque Sam es mucho más grande que yo, pero no debía tenerle yo soy ¡Pequeña pero peligrosa! Y no me dejare de ella. - ¿Cómo pudiste quitarme al amor de mi vida? Yo me abrí a ti, te conté desde ese día en el avión cuanto amaba a Ale, cuanto anhelaba tener una relación con ella y tú... ¿Tú qué hiciste? Me la robaste, ¡ERES UNA PERRA LUCÍA!- toque mi mejilla debido al impacto de la mano de Sam con mi rostro.

- ¡No me vuelvas a tocar Sam! ¿Acaso no entiendes que el amor no sé manda? No tuve la culpa de que Ale se enamorara de mi y yo de ella- le dije poniendome frente a ella, pero ella me empujó al suelo y se subió encima de mi.

- ¡Te enseñare a no meterte con lo mío!-. Me golpeó con su puño en mi rostro, sentí el sabor de la sangre en mi boca pero esto no se quedaría así.

- ¡Ale no es tuya Sam! Nunca lo fue, ella es mía, ¿Entiendes? ¡MÍA!-. La volteé y le pegué con mi puño en su ojo, ella me tomo del pelo y me tiró, mientras ella se paraba.

- ¡Vamos levántate! ¡Maldita Zorra!- La sangre me hirvio, me levanté del piso ya muy molesta y le di una patada nada mas y nada menos que en su Vagina.

- ¡Que perra eres Lucía!- colocó sus manos en sus partes y me escupió. Se volvió a levantar, me tomo del cabello, yo también tome el de ella. Nos estábamos golpeando, aruñando, y jalandonos del pelo como unas animales salvajes. Escuché el sonido de una patrulla y unos policías corrienron a separarnos.

- ¡Quedan detenidas por causar escándalo en la vía pública señoritas!- nos dijo el policía que me tomaba los brazos poniéndolos hacia atrás.

- ¡Mierda! lo que me faltaba.-

Pov Ale

Lucía estaba muy nerviosa hoy cuando regrese del baño, así que decidí preguntarle qué le pasaba, ella me dijo que "nada" y me pidio unas horas para ir a depositarle un dinero a su papá. Decidí creerle y darle mi auto.

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Estaba en mi oficina hablando por teléfono con uno de mis socios, que hizo una cita conmigo para mañana, porque tenía algo muy importante que decirme así que acepte.
Camine hacia el escritorio de Lucía y anoté en la agenda la reunión con mi socio para mañana, de repente empecé a sentir que mi corazón se contraía era como un mal presentimiento. No podía estar tranquila, llamé a Mariana para preguntarle si ya había venido Lucía y ella me dijo que aún no había llegado. Trate de tranquilizarme y le mandé un mensaje.

📲 Princesa, ¿Ya vienes? ¡Te extraño! ☹️😞

Le escribí dejando mi teléfono a un lado esperando su respuesta, pero ¡Nada! Ya estaba empezando a preocuparme. Recibí una llamada, tomé mi teléfono y fruncí el ceño al ver que se trataba de un número desconocido. No decidí perder más el tiempo así que conteste.

📞 ¡Hola!

📞 ¿Hablo con la señorita Alejandra Rivera?

📞 Si, habla con ella ¿Que pasa?

📞 Le informamos que la señorita Lucía Sandoval y la señorita Sam León están detenidas.- ¡Mierda! Yo no entendía nada ¿Que hacía Lucía con Sam en la cárcel?

📞 ¿Porque están detenidas?

📞 Por causar desorden en la vía pública y para poder salir libres deberá pagar una fianza.

📞 ¡Gracias, en un momento estaré allá!

Colgué la llamada muy molesta por la situación y además estaba confundida porque no entendía que pudieron estar haciendo ellas para terminar en la delegación.
Tomé mi cartera y apague la computadora. Le encargué la empresa a Isabell y le conté la situación a Mariana, ella estaba muy preocupada pero solo le dije que la llamaría ya que no tenía tiempo que perder dando explicaciones.

Tome un taxi y le pedí que me dejara en la delegación lo más antes posible.