¡DAME CHOCOLATE ! - (Luciale)

CAPITULO 38

Pov Lucía

Hoy era un día de mucho movimiento, ya que hoy llegaba el nuevo socio de Ale. Tomé la agenda y revise que todo estuviera perfectamente en órden. La sala de juntas estaba lista, todos los ejecutivos importantes estaba al tanto del día de hoy.
Yo sabía que hoy era un día importante porque el hecho de un nuevo socio de la empresa es importante. Aunque un socio no sea literalmente dueño, es como un mini dueño, bueno ¡No sé ni que digo! También estoy me estresa ver a Ale estresada.

Camine al escritorio donde estaba Ale y me coloque detrás de ella, haciendo un masaje en sus hombros para que se tranquilizara.

- Tus manos son mágicas princesa- ella movió su cabeza de un lado a otro.

- ¿Lo crees amor?

- Estoy segura-. tomó mi mano y me puso delante de ella, empezó a besarla y siguió el camino hasta que se levantó de su silla. Se colocó enfrente de mi, para poder besar mis labios. Puse mis manos alrededor de su cuello y ella colocó sus manos en mi cintura. Continuamos con el beso lento y lleno de amor.

Nos separamos porque escuchamos que tocaban la puerta ya como era de costumbre ¡Siempre nos interrumpían!

- ¡Adelante!- dijo mi novia sentándose de nuevo en la silla y yo permanecí a la par de ella.

- Ale, es solo para decirte que ya están todos los ejecutivos en la sala de juntas, esperando a que de inicio la reunión.

- ¿Y el nuevo socio?

- El aún no, pero todos los demás ya se encuentran en la sala de juntas.

- ¡Gracias Mariana! Ahora vamos.- asintió y salió de la oficina. Ale soltó un suspiro pesado ¿No entendía porque se sentía así? Ella decía que tenía un presentimiento con respecto al nuevo socio. Pero yo no le veo nada de malo, además que Rubén dijo que su llegada iba a ser beneficiosa  para la empresa. Pero estaba muy inquieta ¿Raro no?

- Lu trae las carpetas ¡por favor!- Ale salió de la oficina. Yo tomé rápidamente las carpetas con todos los documentos importantes y salí detrás de ella.

- ¡Buen día a todos!- Ale saludo a todos los ejecutivos al igual que yo los saludé.

- ¡Buenos días señora Rivera!- respondieron todos y Ale tomo asiento en la silla principal de la mesa. Yo me senté a su lado derecho y de lado izquierdo estaba Isabell, a mí lado estaba Mariana y los demás ejecutivos en las otras sillas.

- ¡Buenos días!- Saludo Rubén. Isabell se levantó de dónde estaba y dejó la silla vacía para que se sentará Rubén.

- Creí que el nuevo socio vendría contigo- Ale le dijo a Rubén y el negó con su cabeza.

- Tuvo un atraso, pero no tarda- se limitó a responder Rubén.

Todos estábamos revisando las carpetas, que contenía PODIC de la empresa. En la parte de atrás estaba la pantalla con las diapositivas listas para la explicación que daría Isabell sobre la empresa al nuevo socio. Todos estábamos entretenidos hasta que se escuchó como la puerta se abría.

Pude ver a una mujer realmente hermosa que había entrado. Estaba vestida muy elegantemente. Tenía pelo castaño y ojos de un color café un poco claro. Tenía un muy buen cuerpo y se le notaba la alegancia que tenía. Sin duda alguna era una mujer ¡Muy fina!

- ¡Buen día a todos! Y disculpen la tardanza- la mujer nos dijo a todos y vi que Ale se había puesto pálida. Ella había quedado en shock y no entendía el porqué.

- Ale amor, ¿Te sientes mal? ¿Que te pasa?- La sacudi un poco.

Rubén se levanto rápidamente de la silla y se dirigió a la mujer castaña, que no le quitaba la vista a Ale y viceversa. ¿Que estaba pasando? Me pregunté a mi misma y Rubén hablo.

- ¡Señores y señoras! Quiero presentarles a la persona que ocupará mi lugar en la empresa. A la nueva socia de donne moi du chocolat, les presento a Tania Lozano.

¡Esperen! ¿Ese es el nombre de la ex de Ale? ¡Ay no Dios mío! La nueva socia es la ¡EX DE MI NOVIA!

Pov Ale

Hoy era un día muy estresante para mí. Mi novia tan ¡Linda como siempre! Me había hecho un delicioso masaje relajante en mis hombros. Por alguna razón extraña tenía un presentimiento del nuevo socio, ¡No podría explicar que siento! Pero es algo raro en el pecho.

Estábamos sentados en la  sala de juntas, revisando la carpeta que nos había dado Lucía con el PODIC, mientras se dignaba a llegar a la empresa, ¡Sobre todo impuntual! Pensé negando con la cabeza. Cuando escuché que la puerta se abría y ¡No podía creer lo que estaba viendo!
Mi corazón se contrajo y se aceleró demasiado. Sentí que me había quedado estática al verla allí. Escuchaba que Lucía me hablaba.

-Ale amor, ¿Te sientes mal? ¿Que te pasa?- me decía sacudiendome . Pero no podía reaccionar. Mi cuerpo ¡No podía reaccionar! Sentí que la presión se me había bajado al verla allí enfrente de mi. Tania ¿Que hacia aquí? ¿Con que necesidad había vuelto? Vi que Rubén se levantaba de su silla y se dirigió donde estaba Tania. Ella me miraba analizandome y yo seguía observándola. Para mí esto no podía ¡Ser real! ¡No puede ser real!

¡Mierda! ¡No puede ser! ¡Esto no puede pasarme a mi que pasa! Me sentía muy débil, mi cuerpo se paralizó al escuchar que Tania sería ahora mi socia. Que alguien me diga que este es un ¡Puto chiste!
Cerré mis ojos tratando de controlar la batalla de sentimientos que tenía por dentro. ¡Ni yo sabía que sentía en este momento! ¿Rabia? ¿Tristeza? ¿Quizás ambos? No sé.

Todos comenzaron aplaudir a la nueva socia y yo no podía reaccionar. Lucía me miraba angustiada. Podría jurar que a ella también le impresionó que mi ex sea la nueva socia.

- ¡Perdón! Necesito tomar aire.- Me levanté torpemente de mi lugar. Salí sin querer hacer contacto visual con Tania.

- Ale, ¿Estás bien?- me dijo Tania tomando mi brazo, yo asentí y quité bruscamente su agarre de mi brazo.- Caminé rápidamente hacia mi oficina y no pude evitar derramar lágrimas. Todos los recuerdos con Tania se hicieron presentes de nuevo en mi mente, los buenos y los malos. Pero sobre todo el día que descubrí su engaño. Me sentía ¡Estúpida! Y débil por llorar aún por aquel recuerdo amargo. ¿Será que aún sentía algo por ella?

- ¡Amor! ¿Te sientes bien?- Lucía se acercó a mi y me tomó entre sus brazos. Me quebré al sentir a mi novia, ella es mi ¡Refugió! Con ella me siento a salvó.

- ¿Por qué volvió? ¿Por qué tiene que ser la nueva socia? ¿Por qué...-lloré en su pecho mientras ella permanecía en silencio solo escuchandome y acariciando mi cabello.

- Yo... Yo solo sé que ¡Te amo! Que lucharé por nuestro amor y que no dejaré que nadie te robe de mi lado- Lucía levantó mi cabeza y me miró a los ojos. Limpió mis lágrimas y depósito un beso en mis labios.

Algunos ya se lo esperaban. Pero díganme, ¿Pueden imaginar que viene?