Parte 21. Un tonto o un grupo de tontos

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Dentro de la cafetería el aire parecía más ligero y el aroma de tartas dulces inundaba el ambiente, Song Lan en la mesa de enfrente miraba constantemente al mesón donde se movía Xiao XingChen mientras preparaba su orden.

De vez en cuando XingChen lo miraba y le obsequiaba una pequeña sonrisa pensando que el cliente deseaba acelerar el servicio.

¡Que sorpresa, no espera verlo por aquí hoy!— entró la gerente al mesón.

¿Lo conoces?— cuestionó XingChen era la primera vez que notaba a este cliente.

Si, en el último mes se ha convertido en un cliente habitual, pero suele venir solo los días de semana cuando no trabajas, es la primera vez que viene durante el fin de semana— contestó risueña, "interesante".

¡Disculpe la tardanza!— sonrió apenado al cliente que estaba aún más apenado.

¡Uhm! ¡No, no na-nada! ¡No ha sido nada!— estipuló con dificultad, tomo aire antes de continuar —Gracias.

El contrario le sonrió extrañado — Si necesita algo solo llámeme, soy Xiao XingChen.

El corazón de Song Lan se detuvo en ese preciso instante, para después chillar como una bomba en la cuenta final antes de hacer explosión. Estallando sonoramente en su interior derrochando arcoíris, gotas lluvia de colores brillantes y corazones.

Las dudas se habían disipado, esta persona frente a él es la persona de sus sueños, quien a estado esperando irracionalmente, aunque eso no explica el incesante palpitar en su pecho y el calor sobre sus mejillas. Estaba muy confundido.


Unas mesas más adelante ubicadas estratégicamente para pasar desapercibidos cinco jóvenes vigilaban sigilosamente los sucesos recientes.

Si necesita algo solo llámeme, soy Xiao XingCheng.

Si una cosa tu número— contesto bajo Wei Ying.

¡¿Por qué no le dice nada?!, parece un tonto— se quejó amargo Jiang Cheng.

Si tiene la misma cara que pones cuando ves a.... — Wei Ying no pudo terminar porque dos palmas ajenas cubrieron violentamente su boca ante otros pares de ojos atentos.

Se supone que fue la persona que más aprecio en su vida pasada, pero solo Song Lan parece haber sido afectado por este encuentro— expuso el joven Nie.

Sin embargo, míralo no se ha movido, sigue mirando hipnóticamente a la tarta. ¡Que esperas! ¡Allí está el amor de tu vida! ¡Dile algo! ¿no es el tu ser amado?— exclamaba Wei Ying sin elevar su tono de voz demasiado.

Si estas tan exaltado por qué no le diste el número de tu tío— cuestionó Wen Ning.

Imposible, debo proteger mi dignidad— replico.

¿Cuál dignidad?— expuso sarcástico Jiang Cheng.

¡Lan Zhan, me están difamando!— con los años buscar socorro en Lan Wangji se convirtió en una costumbre.

"..."— en esta ocasión Lan Wangji no tenía comentarios, ni argumentos para defenderlo.

¡Niños! ¡¿Qué están haciendo aquí?!— la voz alegre de su lindo tío llamo su atención.

¡¿Por qué todos nos llaman niños, son conscientes de que estamos por experimentar la última fase de la pubertad?!, protesto mentalmente Wei Ying.

Nada, solo queríamos reunirnos en un lugar tranquilo— respondió el joven Nie sin dudar.

Si, así es— corroboró Wen Ning.

Entonces, les traeré un poco de tarta y unas bebidas, yo invito— sugirió el mayor.

No es necesario— a Lan Wangji no le parecía justo que después de interrumpir en el trabajo del mayor se aprovechen de su amabilidad.

No es nada, quiero hacerlo. Wei Ying toma sus pedidos y me los pasas— finalizo con una sonrisa antes de continuar con su trabajo.

Si— respondió afirmativamente.

Tu tío es muy lindo Wei Ying— expuso Nie Huaisang sin pena alguna.

Eso es evidente— el pequeño desvergonzado contesto con menos pena todavía.

Los pequeños comieron hasta reventar y se marcharon felices. No sin antes percatarse que el café de Song Lan estaba frio, pero intacto, mientras su dueño divagaba en una dimensión desconocida.

Como el pastel de chocolate había desaparecido Xiao XingChen se dispuso a preparar uno, así que fue a la cocina.

Song Lan decidió que era el momento perfecto para huir, había estado esperando cualquier oportunidad para pasar desapercibido, no podría irse si Xiao XingChen lo despedía en la entrada con una sonrisa, porque su corazón saltaría fuera y le confesaría su total fascinación por él, a pesar que se conocen por primera vez. Esta última opción asustaría a cualquier persona y XIngChen no sería la excepción.

Se dirigió a la caja para pagar y se encontró con un rostro familiar.

¡Que inusual visita!— exclamo la gerente con una sonrisa.

¿Por qué no me lo habías dicho?— dijo seco.

¿Por qué debería? Debo proteger la integridad de mis empelados— fingió inocencia.

Incluso fuiste tú quien reviso el borrador de la novela— replico.

No te enojes, debes seguir el ritmo de la naturaleza, no te reuniste hoy con él, ¿por qué no le hablaste?— estaba muy intrigada.

¿Cómo podría?— confeso timido, la gerente le regalo una poker face.

Antes de salir la gerente lo interrumpió —Vas a volver.

Si— parecía pensarlo un poco, pero al final su respuesta fue firme.

.....

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|En otra vida te encontrare| Song Lan x Xiao Xingchen *PAUSADA* Donde viven las historias. Descúbrelo ahora