|En otra vida te encontrare| Song Lan x Xiao Xingchen *PAUSADA*

Parte 3. Podrían quedarse conmigo esta noche

Cinco años atrás

La lluvia azotó la ciudad desde la madrugada y el pronóstico del clima aseguraba que la tormenta se extendería hasta el día siguiente.

"El cielo está llorando" murmuro Wei Ying mirando el cielo gris desde su ventana.

Toc, toc, toc

Wei Ying ¿Cómo te sientes?— la voz aterciopelada de la mujer interrumpió en la habitación del infante.

¡Mamá! ¡Papá! ¡¿Volvieron?!— Wei Ying no quiso ocultar la emoción en su vos, pero por el resfriado el sonido parecía un aullido adolorido. Se levantó de la cama y se apresuró hacia los mayores olvidando el malestar que sentía desde la mañana.

Si, lamentamos haberte dejado en este estado— el hombre dijo con pesar, ese día les fue imposible quedarse a cuidar de Wei Ying, de que les servía ser médicos si no podía sanar el dolor de quien aman.

El pequeño vio el conflicto interno en los ojos de sus progenitores y se apresuró a decir —No importa. El tío Xingchen me dio medicina. Ya me siento mejor solo...solo estoy un poco cansado.

La mujer coloco su mano sobre la frente del menor "Ah, la fiebre sigue alta"

Wei Ying vamos a la cama ahí nos sigues contando como te fue hoy, si.

Wei Ying hablo por mucho tiempo con una sonrisa en su rostro. Eran pocos los momentos que pasaban los tres juntos como familia debido al trabajo de sus padres que consumía la mayor parte de su día.

De repente todo se quedó en silencio, Xiao Xingchen fue a ver qué pasaba, al abrir la puerta se encontró con la imagen de su hermana, su cuñado y su sobrino todos juntos acurrucados en la pequeña cama, a pesar de eso el ambiente cálido contagio su corazón y abandono la habitación en silencio.

El sonido de un teléfono rompió la tranquilidad de la escena.

Bueno, habla el Doctor Wei— la voz al otro lado estaba ansiosa. Su paciente entro en riesgo y necesitaba una operación de emergencia, solicitaban la presencia de ambos.

¿Qué sucede? — pregunto la mujer.

Una operación de emergencia, es el paciente 315.

¡¿315?!— repitió sorprendida. Se supone que estaba estable ¿Cómo paso esto?

Se levantaron en silencio, la mujer beso la frente de Wei Ying, le dolía el corazón siempre que se iban sin despedirse del pequeño — Desearía poder quedarme con el hoy— su esposo la abrazo por la espalda para reconfortarla — Yo también.

El calor que envolvía a Wei Ying en su sueño ya no estaba, despertó cuando su padre estaba por cerrar la puerta.

¡Papá! Vas a volver a salir— trato de ponerse de pie pero colapso en el intento. Ante el cuadro lamentable de su hijo, los mayores preocupados se adelantaron hacia él —Wei Ying ¿estás bien?

No, no lo estoy— dijo tratando de detener un poco más a sus padres, un momento era suficiente, solo un momento —Podrian quedarse conmigo esta noche— la esperanza en sus ojos perecía lentamente perforando el corazón de los mayores — Esta vez no, lo sentimos Wei Ying.

Pero...pero estoy enfermo, deberían quedarse y cuidarme también— las lágrimas saladas amenazan con saltar del cristal de sus ojos.

La mujer se acercó a su rostro, beso su frente, después su nariz, después una mejilla luego la otra, lo miro a los ojos mientras decía con tono dulce —Regresaremos muy pronto nos esperaras.

Sí, es una promesa— extendió su dedo meñique hacia ellos.

Promesa— respondió el hombre tomando su dedo.

La mujer soltó una ligera carcajada al notar la mirada expectante de su hijo hacia ella.

Es una promesa, concluyó.

Cuídalo mucho si las cosas se complican llámanos— con un abrazo se despidio de su hermano en la puerta.
 No se preocupen y vuelvan pronto— dijo Xingchen en sus brazos.
 

En el hospital

La operación ha sido un éxito, estoy muy apenado por haberlos hecho venir de repente, en verdad lo siento— dijo el Doctor Jian director del Hospital Flor de Loto, donde los padres de Wei Ying trabajan.

No se preocupe Director. Esta ocasión fue una emergencia, pero acerca de mi propuesta ya tiene una respuesta — término con un tono autoritario la mujer, podía ser una mujer linda y alegre, pero en cuanto a firmeza se trataba le ganaba a su esposo.

Doctora Wei, si es el dienro puedo aumentar su sueldo con tal de no perderla—en esta situación perder a su mejor cirujana sería muy malo.

No se trata de dinero Director Jian, se trata de mi familia, de mi hijo, no se puede negociar.

En ese caso no te puedo persuadir para que no abandones, serás removida el próximo mes y todo tu trabajo será reconocido—dijo ya resignado con una cálida sonrisa.

Gracias Jian— dijo con una sonrisa que relajaba su rostro de flor y resaltaba sus delicados rasgos.

De regreso a casa los padres de Wei Ying decidieron tomar la autopista para llegar más rápido. El hombre aumento la velocidad casi al límite, el sonido del viento era afilado como un cuchillo.

¿El Director Jian acepto tu propuesta?— pregunto el hombre con la mirada fija en el camino.

Lo hizo no fue difícil convencerlo. Nos conocemos desde hace mucho tiempo, somos casi hermanos, aunque nunca nos hablamos de forma informal en el trabajo— dijo con una sonrisa burlona.

¿Vas a estar bien?— cuestino preocupado pero su preguntaparecia tener otro sentido se excuso rápidamente —digo es una nueva experiencia dejar el trabajo para estar en casa todo el tiempo.

Es difícil de responder, amo mi trabajo pero amo mucho más a Wei Ying, así que se puede decir que si— sus ojos se iluminaron con la idea de estar más tiempo con Wei Ying.

Lo hemos descuidado tanto tiempo. Es tiempo de cuidar de él y del pequeño Xingchen— dijo el hombre provocando que su esposa riera.

La última vez que le dije pequeño a Xingchen me dijo "tengo dieciocho soy todo un adulto"— ambos rieron mientras continuaron hablando de sus planes como familia ahora que pasarían más tiempo con su hijo.

En medio del trayecto el chirrido de los neumáticos patinando en la acera mojada, provoco un brote de ansiedad en su pecho.

Deberías reducir la velocidad— aconsejo la mujer preocupada.

Eso intento....el freno se atoro— respondió igual de ansioso el hombre, bajo este escenario podría pasar lo peor.  

¡¡¡CUIDADO!!!— un grito, un estruendo, luego silencio, todo se quedo en silencio.  

"El cielo está llorando" murmuro Wei Ying en la habitación.