❥ Vuelve A Mí.²°

♡09

—Felix abajo, —dijo Seungmin tomando a Felix de la camisa para empujarlo hacia abajo, los omegas están entre el fuego del bosque, no podían gritar o alertaría a los soldados que vagaban por los lugares con menos fuego.

Aun no encontraban a Taehyun, Seungmin cuidaba de Felix que apenas y podía sostener su revolver.

Se movía con sigilo y rapidez, sabía que su pequeño cachorro inteligente se ocultaba en árboles grandes, por lo que se movía entre las llamas buscando los árboles de mayor tamaño.

No sabe cuánto tiempo llevan allí, pero deben ser más rápidos o podrían capturarlos.

Seungmin está seguro de que soportaría la tortura hasta la muerte, pero no cree lo mismo de Felix, no es que no confíe en el omega rubio, es solo que Felix no ha pasado la crueldad que él sí.

Apresuran su paso y evitan las furiosas llamas, el oxígeno parece agotarse y sus fuerzas también, pero no se detendrá, su pequeño cachorro tendrá una buena vida, se lo prometió, no importa si la suya va en su lugar, ese cachorro vivirá.

Escucha el sollozo de un pequeño y gira a mirar a todos lados, se fija en un árbol de tamaño medio y corre con Felix detrás.

El pequeño Tae está atrapado en una red, seguramente una trampa de los soldados, están acorralados, Seungmin tiene buen ojo y ha notado a dos soldados que esperan la orden para disparar, se apresura a sacar a su pequeño de la red Tae se aferró a su mami para buscar consuelo y Seungmin abraza al pequeño con fuerza para después entregarlo a Felix.

Levanta su rifle y revisa que tenga balas suficientes, aunque ninguna bala será suficiente para cubrir el escape de los tres.

—Felix, cuando yo diga, correrás con Tae y no te detendrás hasta que llegues al rio con los demás.

—Seungmin, no voy a dejarte, —replica el rubio con un sollozo.

—No te traje para que me cuides no puedes hacerlo, te traje para que salves a mi hijo, —palabras duras, pero Seungmin necesita a un Felix decidido a salvarse junto al cachorro, no a un Felix que sienta miedo por lo que pueda ocurrir a su espalda si él huye, —corre, Felix y no mires atrás.

Felix quiso negar, pero debía pensar en el cachorro, Seungmin dará su vida por el futuro de su hijo.

Felix asintió y corrió a todo lo que sus piernas daban.

Los soldados quisieron disparar, pero Seungmin disparó primero. Logró derribar a los dos que estaban escondidos, pero sabía que ellos solo eran la carnada.

Defendió el escape de Felix y su hijo tanto como pudo y retrocedía a velocidad media, el momento definitivo llegó cuando se quedó sin balas para el rifle, sus dos cajetillas están agotadas, soltó el arma inservible y se escondió detrás de un árbol grande, igual que su cachorro.

Sacó su revolver y miró a sus enemigos, una tropa de unos diez, tal vez menos, miró a todos lados asegurándose de que Felix ya estaba muy lejos. Suspiró con miedo, no tenía oportunidad de escapar. Salió de su escondite y descargó su revolver contra los soldados, le dio a unos dos o tres, y cuando las balas se terminaron corrió tanto como pudo, creía que le dispararían, pero no paso.

Tenía escasas esperanzas de salir del bosque y llegar al rio, a sus piernas les falta fuerza, pero se forzó a correr más rápido, sintió una cuerda en el cuello jalando con fuerza, el aire abandonó sus pulmones.

Ahora entendía, esta tropa solo pretendía capturar a algún rebelde y llevárselo, y Seungmin era justo lo que más odiaría ser, un prisionero.

No está seguro de lo que ocurrió después, no lo recuerda, apenas y logra divisar imágenes de soldados riendo ante sus ojos, atando su cuerpo como si fuera un animal salvaje y arrastrándolo entre las calientes llamas hasta una carreta.