CAPITULO XXXVII: CONTACTO

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Nunca había tenido amigas, no sabía cómo relacionarme mucho.

Deméter: Yo sé que he sido muy dura contigo, pero quiero decirte que tendrás una amiga de suma confianza.

Perséfone: ¿Enserió?

Deméter: Es una de las hijas del gobernador, las más astutas.

Mi mama me llevo al salón y ahí estaba una chica rubia y alta.

Deméter: Perséfone te presento a Atenea, Atenea ella es mi hija Perséfone.

Atenea: Mucho gusto.

Perséfone: Igualmente.

Deméter: Bueno las dejare solas.

Atenea: ¿Tienes un jardín muy hermoso?

Perséfone: Si, mi mama me lo deje encargada.

Atenea: Eres una buena jardinera, deberías ir a olimpo a poder arreglarlas.

Perséfone: Esa es una buena idea, espero que mi madre me deje ir, nunca he salido de aquí.

Atenea: Mmmmm...veremos la forma.

Perséfone: Gracias, ¿entonces de que diosa eres?

Atenea: Soy diosa de la guerra y la estrategia.

Perséfone: Lo contrario de ares.

Atenea: Mi hermano es más temperamental

Perséfone: Ya veo.

Atenea: ¿Tienes 17 cierto?

Perséfone: Así es.

Atenea: Eres muy joven.

Perséfone: Mis poderes siguen creciendo.

Atenea: Los míos ya están desarrollados 19 años.

Perséfone: Que bien.

Hestia: Atenea despídete.

Atenea: Adiós.

Perséfone: Adiós.

Deméter: Las acompaño a la puerta.

Ella fue mi primera amiga, mi primer contacto.

Perséfone (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora