Los primeros días que Serjay estuvo ausente en el cuartel, Horacio no pudo evitar sentirse solo a causa de que no se encontrase cerca de él la persona que consideraba su pilar emocional. Sin embargo, Horacio era sociable por naturaleza y no era alguien desconocido para el resto de personal de la base, con lo cual terminó juntándose con facilidad a tomar el café con otros militares. Fue así cómo empezó a tener una relación más cercana con Armando, pues era un hombre amigable con el que era fácil tener una buena conversación.
Aunque le avergonzara admitirlo, Horacio sabía a que hora solían hacer el descanso las diferentes unidades, así que era fácil "coincidir" en cafetería con los demás por ese motivo. Probablemente, Armando a estas alturas ya se había percatado, pero nunca lo había mencionado directamente ni habría realizado ningún tipo de comentario que hiciera entender a Horacio que no era bienvenido.
Mientras que el resto de unidades seguían cumpliendo con funciones de mantenimiento o de maniobras, Horacio se había quedado básicamente sin nada que hacer. En un mundo de paz, donde ya no había indice de actividad Kaiju, los Jaegers que seguían de una pieza eran expuestos en museos, y sus pilotos, por muy aclamados héroes de guerra que fueran, no eran necesarios.
—No quiero que la noticia te tome desprevenido, pero Jack está pensando en relevarte a la condición de reservista.
Horacio suspiró pesadamente al escuchar las palabras de Armando; pasar de ser un militar en activo a ser reservista significaba que no era necesario y solo le llamarían en caso de que el país se encontrase en situación de guerra o catástrofe. No le agradaba escuchar que aquella era la decisión que se había tomado sobre él; había permanecido en dicha institución porque quería de alguna manera sentir que Volkov estaría orgulloso si servía a los demás. ¿Pero cómo iba a hacerlo si le dejaban sin tarea alguna? Se sentía incluso mal al saber que recibiría una pensión por parte del ejército sin estar haciendo nada.
En aquel punto, probablemente Horacio tendría que haberse cuestionado por qué Armando tenía acceso a ese tipo de información, pero estaba demasiado molesto como para pensar de manera lógica. Al permanecer en el ejército había renunciado a otro tipo de vida, como por ejemplo, irse a vivir aventuras con Gustabo y aunque no se arrepentía de su decisión, le molestaba que el ejército pudiera desecharlo con esa facilidad.
—P-pero... ¿Por qué? No estoy trabajando, pero es que no me están dando tareas. ¡Si me las dieran las cumpliría!
No estaba bien que Horacio dirigiese su enfado contra Armando, quien probablemente no tenía nada que ver con la decisión que se iba a adoptar y solo querría avisarle de antemano para que no se llevara una sorpresa agridulce, pero no podía evitarlo.
—Jack no cree que estés pasando por tu mejor momento y me imagino que no te querrá someter al chequeo médico obligatorio hasta que esté seguro que eres capaz de superarlo. Acertada o no la decisión, pensará que te hará bien alejarte de la milicia por un tiempo.
Llegados a ese punto, no importaba las explicaciones que Armando pudiera aportar sobre las circunstancias que habían propiciado aquella decisión. El propio Horacio era capaz de aceptar que no superaría un test psicológico, pues ni siquiera era capaz de descansar tranquilo por las noches a causa de las pesadillas de la guerra. Sin embargo, no quería alejarse del ejército; le daba miedo quedarse solo, pero no tener nada que hacer era un factor que complicaba más su nula estabilidad mental.
Horacio volvió a suspirar, no queriendo pelear con Armando. Cambió de tema porque era a Conway a quien le tendría que pedir las verdaderas explicaciones, dudando que sirviese para algo. Después de tomar el café, Horacio pasó el resto del día a solas ya que no estaba de humor para compartir sus pensamientos con nadie.
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Черный ✬ дельта
Science FictionPacific Rim AU. Tras dos arduas guerras que enfrentaron a los Kaijus contra la humanidad y en la que estos últimos vencieron, nos encontramos en una sociedad que tiene que aprender a volver a vivir sin el miedo constante a ser atacados. En especial...