Sonríe | Tsukishima Kei |

Capítulo 17

Suki:

— Creo que ya es hora de irme...

Me aparte un poco y me posicione en el pasillo.

— Te acompaño, no te dejare sola con Akiteru —hizo una mueca de disgusto.

— Akiteru-san es divertido —Reí—. Serán hermanos pero sus personalidades son muy distintas

— Perdón por ser así entonces Chibi-chan —Sonrió burlesco tratando de provocarme.

— No te preocupes por eso Poste-kun, me gusta como eres —Contraataqué con una sonrisa para luego bajar las escaleras.

No obtuve respuestas de su parte así que deducí que había ganado esta "discusión"

Al llegar abajo, Tsukishima me guió hasta la sala para poder despedirme de su hermano.

— ¿Akiteru-san? —Llamé cuando entramos a la sala, el venía saliendo de la cocina al parecer con una bandeja con vasos de jugo arriba de esta.

— ¡Chicos! Justo los iba a ir a ver —Sonrió—, me demore por qué no quería interrumpir pero ¿Te quedas a cenar? Todo amigo de Kei es bienvenido

— Akiteru... —Murmuró Tsukishima.

— Muchas gracias Akiteru-san —Hice una reverencia—. Pero me están esperando en el auto

— No hay problema, para la otra no recibo un no como respuesta —Dijo Akiteru.

Él fue a dejar la bandeja de vuelta a la cocina y luego regresó acercándose hacia mi y pasando su brazo por mi hombro y guiandome hacia la puerta de entrada.

— ¿No tienes que estudiar Akiteru? —Tsukishima pregunto a lo bajo.

— Tengo todo listo Kei, no te preocupes —Respondió sin soltarme.

Primero me despedí de Akiteru cuando llegamos a la entrada, le agradecí el buen recibimiento, sonrió y volvió a entrar a su casa.

Mientras tanto, Tsukishima me acompaño hasta la puerta de su jardín.

— Haru debe de estar impaciente sentado allá —Reí a lo bajo mirando a la vereda del frente dónde estaba el auto estacionado.

— ¿Haru? —Preguntó.

— Es mi hermano mayor, de seguro lo has visto, también estudia en Karasuno —Comenté—. Solo que el va en tercer año.

El negó.

— Es molesto. Ojalá no lo conozcas —Reí.

— Creo que nadie superaría a Akiteru.

— Supongo que los hermanos mayores son así —Sonreí—. Son molestos pero siempre quieren lo mejor para nosotros.

Se quedó en silencio unos segundos.

— Supongo...

Se escuchó la bocina de un auto y ambos miramos en dirección hacia donde estaba Haru.

— Maldito impaciente —Susurré causando una pequeña risa por parte de Tsukishima.

Me fue inevitable no sonreír al escucharlo, me siento privilegiada al ser una de las pocas personas que puede verlo de esta manera.

Y no es por ser egoísta pero... Así quiero que sea por un largo tiempo.

— Gracias... De nuevo, por todo lo que pasó en el campamento —Murmuró evitando el contacto visual conmigo.

Sigue siendo un orgulloso, pero adoro verlo avergonzado de esa manera cuando agradece por algo.

En ese momento no tenía control de mi cuerpo y agarre del brazo a Tsukishima para que bajara un poco tomándolo desprevenido. Me puse de puntillas y deposite un corto beso en su mejilla.