Capítulo 24

100 15 0
                                    

Muy bien – éste es un capítulo bastante intenso, como podéis imaginar, y, bueno... ya veréis...

Éste debería daros mucho alimento para el pensamiento. Estoy un poco temerosa de vuestra reacción. X

*********

En lugar de los sentimientos de emoción y gran expectación que Hermione experimentaba habitualmente al entrar en el aula de su Maestro de Pociones, estaba llena de temor. Sentía el corazón como un trozo de plomo en su interior, y vaciló antes de girar la manilla de la puerta y entrar.

Él estaba en pie en un extremo de la sala, sin hacer nada en particular. Claramente había estado esperándola. Cuando entró corrió hacia ella de inmediato y la atrajo hacia sí en un estrecho abrazo, inclinando su cabeza hacia la suya para darle un beso profundo. Ella no pudo ignorarlo y se encontró respondiendo como solía hacerlo.

Su boca viajó por su cuello y ella frunció el ceño en un intento de concentrarse en lo que debía hacer. Necesitaba terminar de una vez. No podía tenerlo colgando sobre ella.

"Tan bueno... tan bueno tenerte ahora... pensaba que tendría que esperar. ¿Por qué estabas disgustada antes? ¿Alguien te ha lastimado? Dímelo. Debes decírmelo. ¿Fue Weasley?" Su voz era dura e insistente, casi amenazante.

Ella bajó las manos y le levantó la cabeza para mirarlo a los ojos.

"Estoy bien. Estoy bien ahora. Fue sólo una pequeña pelea tonta. No es nada."

"¿Quién? ¿Con quién discutiste? ¿Potter? ¿De qué se trataba?"

"¡No! No fue Harry. Él ha sido... ha sido agradable. Por favor, Severus, deja de hacer todas estas preguntas. Tengo que... tengo que decirte algo."

El rostro de él se quedó de repente sin color y pareció un niño pequeño aterrorizado. No podía hablar.

"Vamos a sentarnos."

Ella lo hizo. Él no. Ni siquiera la miró. Estaba arraigado al lugar.

"Puedes sentarte también, Severus."

Por fin sus ojos se lanzaron a los de ella. "Lo que sea que tengas que decirme, lo escucharé ahora desde aquí." Su voz fue absolutamente plana y vacía.

De repente ella se dio cuenta de que pensaba que podría estar a punto de abandonarlo. Extendió la mano hacia la suya y la tomó suavemente. "Severus. Severus, mírame." Aun así, él no lo hizo. "No es tan malo." Habló lo más tranquilizadoramente que pudo.

Finalmente él movió los ojos hacia los suyos. Nunca había visto un terror tan abierto en ellos, a pesar de todo lo que él había soportado en su vida. Ella casi lloró. En cierto modo, se alegraba de poder tranquilizarlo, pero igualmente temía su reacción a lo que tenía que decir.

"Por favor, siéntate."

Lenta y vacilantemente, él lo hizo.

Ella suspiró hondo, pero continuó tomando su mano. "¿Sabes de este baile?"

Él no respondió.

"Bueno... este baile. Esencialmente, soy una estudiante aquí, y se espera que vaya al baile. En realidad quiero ir al baile. Pero también, no hay ninguna razón en las mentes de la gente por la que no debería ir con pareja. En general, se acepta que desde que Ron y yo nos separamos, no he tenido novio, y básicamente, necesitas una pareja para un baile. Así que la gente ha asumido que iré con alguien de aquí." Hizo una breve pausa y luego soltó el resto. "De todos modos, este chico me lo pidió y no sabía qué hacer, pero luego Harry y Ron estaban allí, y todos pensaban que era lo más obvio que hacer y había mucha presión y estaba confundida y de todos modos dije que sí."

Fuera de las ProfundidadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora