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Habían pasado varios días desde esa tarde

No había visto a Neji en esos días y extrañamente algo por dentro le decía que él se estaba escondiendo a propósito de ella pero ¿por qué? Había hablado al día siguiente del ataque con Tsunade y sabía cuál había sido el efecto del veneno, sabía que el Hyūga había sido el responsable de cuidarla, entonces ¿qué había pasado? ¿Qué pudo haber hecho ella en ese estado para que él la evitara? O tal vez solo era su imaginación, alguna vez pasó más de un mes sin verlo... el mes más largo de su vida, pero eso fue culpa de una misión, pero justo en ese momento se supone que todos tenían un tiempo de descanso por la duración de la última misión y haberla realizado con éxito. Estaba pensando qué ponerse a hacer ese día cuando escuchó que tocaban a la puerta y dirigió su mirada allí incrédula ¿acaso la telepatía funcionaba? Negó para sí misma con la cabeza pues era inútil darse falsas esperanzas, Neji nunca la visitaba, lo máximo que se acercaba a su casa era para deslizar una nota por debajo de la puerta con las indicaciones de la hora para ir a entrenar al día siguiente.

- ¡Hola Tenten! — la saludó Lee con emoción tan pronto abrió — estás cada día más radiante, es bueno ver que ese veneno no causó ningún daño importante — ella solo sonrió, dudaba lo de estar radiante pues estaba en su ropa de estar en casa

- Hola Rock Lee, muchas gracias ¿quieres pasar? — no tenía sentido preguntarle, él ya había ingresado y estaba sentándose en uno de los muebles de la sala — ¿puedo ofrecerte un poco de té?

- Ummm, no gracias — le rechazó la oferta, por lo que optó por sentarse — de hecho mi bella flor, vine a preguntarte si has sabido algo de Neji, desde que regresamos de la misión no sé nada de él — era bueno ver que él no la estaba evitando solamente a ella, los estaba evitando a todos ¿por qué? ¿Algún problema interno en el Clan? Aunque eso le indicaba que era su imaginación jugándole una mala pasada con lo de creer que la evadía

- No, no lo he visto desde el día que me cuidó por los efectos del veneno, precisamente desde la última misión que tuvimos todos — se mordió el labio — y hasta dónde sé todos estamos en días libres ¿crees que le haya pasado algo?

- No lo creo, las malas noticias siempre son las primeras en saberse. Además Gai-sensei me dijo que nuestros días de descanso terminaron ayer así que en cualquier momento tendremos misiones de nuevo ¿sabes qué es lo que creo? — se veía completamente serio, ella negó pues no se le ocurría que podía estar pasando por esa cabeza — ¡Seguro tiene pereza de salir! ¡Está dejando que su llama de la juventud se apague! ¿Qué te parece si vamos a visitarlo y le recordamos la importancia de mantenerse activo?

- Claro — contestó de forma automática — deja me cambio de ropa y salimos

- ¿Pero qué dices? ¡Así estás más que perfecta!

- Ajá — dijo rodando los ojos — no tardaré mucho

Se dirigió a la habitación, analizando de nuevo todas las posibles cosas que hubieran podido pasar mientras él la vigilaba ese día ¿será que había hecho algo indebido o grosero? Sabía que a veces podía pecar por imprudente o tenía que morderse la lengua para no decir nada impertinente en situaciones serias ¿sería eso? ¿O solo había dormido y ya? Neji le dijo que no había sido mayor molestia en esa tarde, pero empezaba a creer que no había sido así y él en su eterna actitud de hombre correcto no le decía la verdad, pero es que ella sencillamente no recordaba nada aunque algo en su interior le estaba diciendo que había olvidado algo de suma importancia.

Abrió su guardarropa y observó el contenido intentando decidir que ponerse, tal vez podría arreglarse un poco más de lo usual ¿para qué? Conoces a Neji hace 10 años, te ha visto muchas veces desde arreglada hasta completamente indecente ¿de verdad crees que se fijará en ti de la noche a la mañana porque cambies tu atuendo un día? Vaya comentario más cruel de su voz interna, y lamentablemente como siempre, tenía que darle la razón. Musitó una maldición en voz baja antes de tomar sus ropas normales, el único cambio que hizo fue dejar su cabello suelto solo por variar un poco. Rock Lee seguía sentado esperando pacientemente en la sala

- Te ves preciosa Tenten

- Gra... gracias Lee, vámonos — sabía que el cumplido era sincero, pero a los ojos de su compañero todas las mujeres eran preciosas hasta recién levantadas, igual no pudo evitar desear que el Hyūga pensara lo mismo. Caminaron por la aldea riéndose de la última competencia entre Kakashi y Gai y ella solo evadió cuando le preguntó si había ido a entrenar, lo cierto es que esos días se la había pasado en la casa sin hacer mayor cosa que refunfuñar. Al llegar a la residencia de los Hyūga él golpeó la puerta y justo en ese momento apareció un shinobi para avisarle que la Hokage lo llamaba de forma prioritaria para una misión

- Lo siento Tenten, tendrás que visitar a Neji sola — estaba empezando a alejarse — nos vemos a mi regreso y me cuentas como te fue ¡dile de mi parte que no deje apagar la llama de su juventud! — gritó justo antes de desaparecer de su vista

- Nos vemos — susurró ella al aire y por un momento pensó en dar media vuelta e irse pero la puerta principal fue abierta, y allí estaba Neji, vestido solamente con su pantalón y una camiseta de red que se ajustaba como una segunda piel a su muy trabajado torso... se te va a caer la baba... cierto, rápidamente se puso lo más seria que podía y lo vio a los ojos, esos ojos blancos que rara vez dejaban traslucir lo que pensaba su portador

- Hola Tenten — la saludó mucho más serio de lo que solía ser, y ella que conocía tan bien su voz podía jurar que muy en el fondo había algo más, algo similar a estar ¿nervioso? ¿asustado? — ¿qué haces aquí? — quería volver a maldecir, ni siquiera parecía haberse percatado del cambio en su apariencia ¿Por qué tenían que llamar solo a Lee y no a ella también?

- Pues... es que no te habíamos visto en estos días y por eso decidimos venir a visitarte — respondió fingiendo una sonrisa que no se veía natural en ella

- ¿Decidimos? ¿Quiénes? ¿Creaste un ejército invisible o es que volviste a tener amigos imaginarios? — no pudo evitar sentirse contrariada por la respuesta casi violenta de Neji, estaba acostumbrada a su seriedad, pero no a que le hablara así y menos que se burlara de ella. Maldita minibestia verde por dejarla sola y maldita ella por hablar en plural

- Lee venía conmigo — admitió finalmente intentando excusarse — pero lo llamaron para una misión y acaba de irse

- Entiendo — el silencio incómodo se hizo presente — ¿quieres pasar? — ¡NO! Quiso gritarle, se sentía como una completa estúpida ¿por qué había pensado que esta vez por fin la notaría? ¿Por qué seguía torturándose a sí misma detrás de ese imposible? ¿Por qué no maduraba de una buena vez y seguía su vida? Quería salir corriendo de allí, pero no, si hacía eso solo conseguiría quedar en ridículo y se sentiría aún más absurda de lo que ya se sentía en ese momento, porque sí, siempre era posible sentirse más tonta

- Seguro, no creo que me pase nada malo por quedarme a solas contigo — empezó a reírse intentando relajar el ambiente

Pero a él no le causó ninguna gracia el comentario.

Consecuencias (NejiTen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora