Capítulo 43

10 8 0
                                    


Me giro y veo a Kai mirándome aún boca abajo, con los ojos entrecerrados y las ojeras pronunciadas.

Aún con lo que he hecho no abandona el mote cariñoso con el que siempre me llama...

Sin poder controlar mi boca, hago un puchero y las lágrimas vuelven a mis ojos, nublándome un poco la vista. Él enseguida se alarma, abre los ojos de golpe y se levanta un poco más rápido de lo que debería, teniendo en cuenta su situación actual.

- ¡Ey! ¿Qué te pasa? ¿Estás bien? ¿Ha pasado algo?- Habla con preocupación y eso solo me hace sentir peor.

No le respondo, simplemente lo abrazo y lloro en su pecho. Kai parece confuso, pero me rodea los hombros con sus brazos y posa una mano en mi cabeza, acariciándome el pelo despacio.

- Lo siento tanto... - Logro decir entre sollozos.

Él suspira y no dice nada por unos minutos, mientras yo sigo llorando y pidiendo perdón una y otra vez. Kai se queda ahí de pie acariciando el cabello de la chica que le ha dejado plantado y soportando que le llore en el torso sin camiseta cuando no ha dormido prácticamente nada y tiene resaca... De verdad que no puedo parar de llorar por mucho que quiera.

Kai me separa de su pecho con cuidado, me seca las mejillas con sus grandes manos y me pide que nos sentemos mientras tira de mí suavemente hacia la cama. Cuando nuestros culos se posan en el colchón, él se estira para coger una camiseta y se la pone.

- ¿Qué pasa, Hoon?

Me mira a los ojos cuando habla y parece preocupado. No me merezco que se preocupe.

- Kai, lo siento mucho, de verdad...- logro hablar aunque no dejan de brotar lágrimas de mis ojos-. Me siento muy mal por cómo se ha dado toda la situación.- él no dice nada y tan solo me mira con una ceja levantada, esperando que siga con mi explicación-. Ya te había dicho que en una fiesta me besé con un amigo... Ese amigo es Yoongi.

- Wow, ¿en serio? No me jodas, no me había dado cuenta.- Dice en un tono tan irónico como lo haría su hermana.

A pesar de su comentario, sigo hablando.

- El caso es que... Llevaba negándome a mí misma y a los demás que él en realidad me gusta desde hace meses y... Realmente jamás pensé que algo entre tú y yo iba a pasar, mucho menos que llegarías a fijarte en mí de cualquier manera y... Lo siento, de verdad. No quiero que pienses que he estado jugando contigo ni nada por el estilo, tú eres una persona muy importante para mí, pero...

- Hoon, tengo que pararte aquí.- me dice poniéndome una mano en la boca-. Te conozco desde que eras una niña, tiempo suficiente para saber que no querías jugar conmigo ni con nadie. Es más que obvio que ese chico te gusta y está bien. Al fin y al cabo yo no vivo aquí, pronto me iré y no sé cuando volveremos a vernos. Él vive en tu ciudad y yo ni siquiera lo hago en Corea, con él puedes tener una relación o lo que sea... Conmigo no.

- Pero... Me han dicho que anoche bebiste mucho, pensé que no querrías ni mirarme a la cara y... También estabas apretando ese collar con rabia mientras dormías... No sé.

- Hoonmin...- suspira-. Ya deberías saber que soy igual de orgulloso que mi hermana, pero eso no significa que vaya a odiarte. Yo nunca podría odiarte.

- ¿En serio?- él asiente-. Pues no lo entiendo, yo en tu situación me odiaría por hacerme ilusiones para... Esto.

Sin poder evitarlo, al pronunciar mis pensamientos en voz alta, vuelvo a llorar. Kai chasquea la lengua y me abraza como haría una persona a la que de verdad le importas y me besa en la coronilla.

EL ARTE DE AMARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora