❪Farfanini❫↷¿Un bebé?🍼ˎˊ˗

↷❛HospitAaAl»🏥

∘ ───────Embarazo;─────── ∘
┊❝¡Parto inminente!❞┊
🍼˚ ༘ ♡ ⋆｡˚ 🌱

La chica había estado teníando mucho dolor durante todo el camino a la residencia de Carlos. Era acompañada por todo el Imperio.

Tenia mucho miedo.

;; ⭟❛🏥❜

Esto era malo, estoy era muy malo. Nunca se había preparado para un nacimiento prematuro.

Nunca se había preparado para atender un nacimiento ahora que lo había pensado...
Había investigado, obviamente, pero eso no quitaba la sensación de que podría arruinar todo, osea, tendría la vida del bebé literalmente en sus manos.

Pero no había tiempo para lamentos, tendría que arreglarselas de alguna forma, por lo que se encaminó hacia la habitación donde estaba la rubia.

;; ⭟❛🏥❜

La chica estaba con todo el Imperio, más los demás teams detrás de la puerta, pero no por la República, lo cual dolía, bastante.

Pero no tanto como aquel bebé que estaba a punto de traer al mundo, todo el camino fue un caos.

—¿PODES DEJAR DE APRETARME TANTO LA MANO? LA CONCHA DE LA LORA.

—ESTOY PARIENDO A UN CRIÓ, MALDITA SEA.

No va a ser muy fácil...

Pensó para sus adentros Carlos en lo que se acercaba a la pareja.

—No voy a preguntar si estas bien porque claramente no lo estas, pero ¿qué es lo que sientes ahora?—pregunto mientras preparaba todo apresuradamente.

—Dios, me duele, me duele, me duele

—¡Cristi! Ya estamos aquí por suerte ¿Cuánto falta para que de a luz?—pregunto Lyna con el castaño por detrás, estos habían ido a buscar la mochila con cosas para recién nacidos.

—Poco...—Dijo en lo que era ayudada por el oji-negro y castaño a por fin sentarse en la camilla... Poniéndose a pensar ahora, ninguna chica de La. República la había ido a ver, lo cual dolía, bastante. Y al ver a Lyna, la cual no eran tan cercanas, pero aún así ella estuvo ayudándole en todo esto, y verla ahí, junto a ella... Simplemente la hizo llorar más de lo que ya había estado haciendo por el dolor de las contracciones.

—Quiero ver a Mery... o a Mayichi—Intento decir sin que se le quebrara la voz en el intento, el miedo y la angustia se apoderaban de ella en lo que veía al Dr. Nitrus correr de un lado a otro... El no estaba preparado para esto, pero era lo que se tenía.

La de buzo de pato se acercó rápidamente a ella, sintiendo unas inmensas ganas de abrazarla y consolarla.

—Se que no podré ser un reemplazo de ninguna de ellas, pero te veo como una gran amiga y-

—¡Listo! El parto empieza ahora Cris, necesito que seas fuerte—Hablo decidido Carlos.

La chica podía ser fuerte, si, pero eso no quería decir que en este caso sería así. Le Dirigió su mirada al farfano, con ya sus lágrimas secas.

Este la miró con una expresión de apoyo, casi diciendo "No me iré de aquí", cosa que la calmó un poco.

—Bien, ahora necesito que cada que diga, pujes.