Sueños de una Bailarina de Seventeen {Temporada 2} [Seventeen y Tú] +18

2 ~ My Sickness

Era principios de abril y yo seguía con mi rutina agotadora. Ensayo tras ensayo.

Era una noche luego de cenar, me encontraba tirada en el sillón con mi cabeza apoyada en el regazo de Hye, Young Mi y Sook estaban sentadas en el piso con Suni, y U estaba sentada en el sillón pequeño que estaba en diagonal. Mirábamos una comedia romántica, estaba tan inmersa en ello hasta que sentí como mi celular vibraba.

*Chat de Vernon*

¿Duermes?

No, aquí estoy

¿Puedes subir? Quiero mostrarte algo.

Si, ahí subo.

No llames a la puerta, mándame un mensaje, duermen todos.

Oki

♪~~~~~~~~~~~♪

Les dije a las chicas, me calcé, me puse una campera grande y fui en pijama hasta el depto. de Vernon.

*Chat de Vernon*

Vernon, ya estoy afuera

Voy

♪~~~~~~~~~~~♪

Vernon abrió la puerta y me saludo con una sonrisa. Él estaba también en pijama, o eso creo, llevaba un jogging negro, estaba en pantuflas, una remera lisa y una campera parecida a la mía. Al entrar agarro mi mano, y susurrando me pregunto:

Vernon: ¿Quieres algo para tomar?

T/n: Esta bien – le sonreí

El agarro refresco de la heladera y abrió la alacena para agarrar unos snacks. Me hizo seña con la mano para la agarrara y me llevo a su habitación.

Vernon: Mira – mientras abría la bolsa de snacks - ¿Te acuerdas que estaba haciendo una canción?

T/n: Sisi, ¿la que le hice el estribillo?

Vernon: Exacto – comenzaba a aparecerle una sonrisa que quería ocultar, pero de la emoción no podía – Se me ocurrió...que tal vez... podríamos cantarla juntos – Dijo rápido esta última frase

T/n: ¿Qué? Ósea, sí, pero ¿qué? – Exclamé

Vernon: Me puse a imaginarla, y creo que el estribillo sería perfecto para vos, mientras yo rapeo las estrofas y al final mientras yo rapeo unas líneas vos cantas el estribillo arriba. ¿Qué te parece?

T/n: Me parece una idea FAN TAS TI CA – Dije mientras chasqueaba los dedos

Vernon se rio y aplaudió con felicidad.

Vernon: Okay, pero tenemos que mejorar toda la letra, para que tenga una buena coherencia. – Mientras se acomodaba

T/n: Y eso... ¿Queres hacerlo ahora?

Vernon: Si – me dijo emocionado

T/n: Okay Okay, mientras me sentaba más cerca de él.

Habíamos pasado casi toda la noche escribiendo, había papeles tirados en todo el suelo. Eran eso de las 3 am, y fue en ese momento que comencé a caer lentamente hacia el hombro de Vernon, él estaba apoyado sobre el escritorio con sus manos en la cabeza.

♪~~~~~~~~~~~♪

*Narra Vernon*

T/n estaba en diagonal a mí y fue entonces cuando sentí como se apoyó en mi hombro, la miré de reojo y vi que estaba dormida

[*Que rápido se duerme esta chica*]

La acomode en su silla para poder levantarme, pase una mano sobre debajo de sus rodillas y sobre su espalda, y la levante muy despacio para evitar que se despertara.

[*Es tan hermosa*]

Sonreí al pensar esto. La acosté sobre la cama, dejándome un poco de lugar para, luego de sacarle sus zapatillas, poder recostarme con ella. La acomode sobre mi pecho, supongo que por inercia se acomodó aún más, abrazándome, y haciéndome sentir el hombre más afortunado. Comencé a acariciar su cabello anaranjado mientras la miraba dormir.

[*Me estoy enamorando, definitivamente*]

Me quede dormido mientras sonreía.

♪~~~~~~~~~~~♪

*Narra T/n*

Me desperté abrazando a alguien, quien tenía una mano en mi cabeza y la otra mano sobre la mía que yacía en su pecho. Abrí los ojos lentamente y allí estaba, el rubio más hermoso del mundo.

[*Es tan hermoso... espera un segundo... ¿QUE HAGO ACA?... POR UN DEMONIO T/N, OTRA VEZ NO*]

Cerré los ojos, porque golpearme en la frente no era una opción si no quería despertarlo. Me moví lentamente y salí de la cama de Vernon, lo volví a tapar para que siguiera durmiendo, y me le quede mirando unos segundos, notando lo hermoso que es, notando que su presencia me hace feliz, y aunque no pasara nada, y aunque nuestros besos nunca se den y quedasen en suspiros, nunca me dejaría de hacer feliz. Acaricie su flequillo, y le dedique un beso en su frente. Él se movió lentamente mientras se acurrucaba. Agarre mis zapatillas y mi campera, y salí en puntitas de la habitación, evitando el menor sonido que pudiera generar. Al salir me encontré con Mingyu, que me miraba sorprendido, ya que no sabía que me encontraba ahí.

[*Menos mal que estaba vestido*]

Mingyu: T/n, ¿qué haces acá?... para, ¿pasaste la noche acá? – me pregunto sonreído

T/n: Buen día ¿no? – lo mire haciéndome la mala pero una sonrisa se me escapo – Vernon me pidió que viniera anoche para mostrarme una canción que quiere hacer conmigo, estuvimos hasta tarde reescribiéndola y modificándola, y en algún momento me quede dormida claramente, me acabo de despertar, no se mas nada.

Mingyu se rio y puso sus ojos en blanco.

Mingyu: Okay – mientras se reía

T/n: Voy a irme a desayunar, hoy tenemos que seguir ensayando

Mingyu: ¿Desayunas conmigo?

T/n: Okay

Nos pusimos a desayunar mientras hablábamos tonterías y nos reíamos, era hora de irme a cambiar, me dirigí a mi depto. y me cambié. Ese día paso normalmente, salvo que esa noche Vernon me volvió a pedir que fuera para terminar de ver la canción.

Estuvimos juntos hasta terminarla, y fue ahí cuando Vernon dijo.

Vernon: ¿Quieres que vayamos al estudio a practicarla?

Asentí y bajamos al estudio.

Estábamos cantándola, sonaba tan linda, tan triste y el final, woah, el final era tan intenso. Nos encontrábamos solos, cantando una canción tan hermosa, tan perfecta, el rapeaba y yo respondía con el estribillo melodioso. Nuestros ojos se encontraron, y nos regalamos sonrisas. Sonrisas que comenzaron a desaparecer cuando nuestras respiraciones comenzaron a agitarse por la adrenalina que corría por nuestros cuerpos. Nuestros ojos alternaban en los ojos y en la boca del otro. Yo me encontraba apoyada en el escritorio y él estaba sentado frente mío, se paró y comenzó a acercarse lentamente, puso sus manos una de cada lado, acorralándome, luego apoyo una mano sobre mi cintura y otra en mi nuca. Se acercó aún más, podía sentir el calor de su cuerpo, mis manos se apoyaron en su pecho, y sentía como su respiración era aún más agitada. Él se acercó a mi boca y nos consumimos en un beso dulce y tierno, de forma lenta, un beso que era anhelado desde hacía tiempo, que nos hacía derretir por el otro. Me apretó más contra él. Su lengua abrió paso para jugar con la mía, sentí como mi pecho se estremecía, como un hormigueo comenzaba a aparecer por mi cuerpo, comencé a jugar con su pelo, a entrelazar mis dedos con cada mechón, mientras seguíamos sumergidos en ese beso apasionado, no fue hasta que necesitábamos del oxígeno para respirar, que nos separamos. El volvió a cerrar sus ojos y apoyo su frente sobre la mía, sentí como sonreía, sonreí yo también, y mientras su mano me acariciaba lentamente la mejilla, yo pasaba la mía por su cuello hasta volver al pecho, sumergiéndonos en una noche dulce llena de suspiros.