Capitulo 13

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Capitulo 13

-Hola señorita de los lentes oscuros –se burlaba Santana cuando miraba a Brittany llegar a la sala de maestros aquella mañana.

-No te burles –la rubia se sentaba sin ganas a su lado –¿Cómo estas hoy? ¿Por qué no eres un desastre como yo?

-porque le recuerdo señorita "yo no sufro de resaca" que te bebiste lo que quedaba de vino y yo solo tuve dos copas y comí algo.

-La próxima comeré. –reía un poco –la cabeza aun me da vueltas.

-Toma un poco de café. –la latina iba hacia la cafetera de la sala y le servía un poco - ¿Sabes? Aunque pareces una muerta viviente –se reía –aun así, estas hermosa ¿Cómo haces?

-Es temprano para poner mis mejillas como tomates Sanny –la rubia le recibía el café –gracias.

-Mira tengo una idea.

- ¿Cuál? ¿Darme un beso de buenos días? –tomaba la mano de la latina y le sonreia –tenemos que hablar de lo que sucedió ayer.

-Lo sé, tenemos que hablar y ya tendremos tiempo para eso –le brindaba una sonrisa –tenía miedo que hoy amanecieras con amnesia alcohólica.

- ¿Eso existe? –reía la rubia y sus ojos se achinaban bajo sus lentes oscuros.

-No lo sé, pero sé que la gente se olvida de las cosas con unos tragos de mas –la latina se encogía de hombros.

-Yo me acuerdo de todo, y cuando digo todo es de mi pidiendo que firmes mi pecho –susurraba aquello porque había profesores en el lugar –y tu cantándome una canción. –sonreia y sus mejillas se notaban un poco rojas.

-Vale, ahora la que me quiere ver como un tomate eres tú. –la latina apretaba un poco el agarre –mira, puedes irte a nuestra oficina y dormir un poco.

-Tenemos la reunión con el Director. –la rubia se lamentaba

-Yo me las arreglo, solo dame tus propuestas y las junto con las mías –le animaba –vamos, con el café que te tomaste ahora y una pequeña siesta reconfortante a la hora de la práctica de las porristas estarás como nueva, si el Director pregunta que porqué no estabas simplemente le diré que una de nosotras tenía que quedarse a organizar algo para las próximas clases.

-Eres mi salva vidas, de verdad. Prometo no volver a tomar de esa forma, pero es tu culpa.

- ¿Ahora es mi culpa? –reía mientras recogía todas las cosas de la mesa y salía de la sala con la rubia a su lado –yo dije que ya era suficiente y tu decías que una mas no haría daño.

La mañana había pasado un poco rápida y lenta al mismo tiempo, cuando la rubia y la latina compartían clases sentían que la hora no era suficiente pero cuando por cualquier motivo tenían que separarse, sentían que pasaban días en una sola hora.

La hora del almuerzo había llegado y eso quería decir que solo le faltaban 3 horas para poder terminar con el día laboral, Brittany revisaba alguna de las cosas que tenían planeado para los próximos días mientras que Santana buscaba el almuerzo que habían pedido.

Spencer miraba como sus dos amigas tenían un semblante diferente, y sonreía al imaginar porque era eso.

-Hola Britt –le saludaba la castaña con dejando su almuerzo en la mesa

-Hola tú. –le miraba con una sonrisa - ¿Cómo estás?

-Bien, pero creo que no tan bien como tu ¿Qué te sucede?

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