En la profundidad

1.2K 130 24
                                    

Ben caminaba sin rumbo por el hotel donde se celebraba la boda, cansado, aturdido, casi pareciendo un muerto viviente. Alejado de todos se dio cuenta de que, mientras más lejos, empezaba a perder noción de todo a su alrededor, entonces se detuvo, miró a todos lados, estaba en un gran patio que se extendía a medida que sus ojos se fijaban en el horizonte.

En completa soledad cayó de rodillas rompiendo en llanto. En completa soledad, deseo con toda su alma ser parte de otro plano, uno donde no era héroe, donde no habían plomeros, ni villanos en busca del arma más poderosa del mundo, en ese mundo era un chico normal, con amigos... con Kevin a su lado.

— Ben. — Rook lo llamaba preocupado. Al alzar la mirada se dio cuenta de que el rey de Rennovah lo miraba con preocupación y pena.

— Por favor, déjame solo. — pidió en un susurro. Intentó levantarse, más su cuerpo flaqueó y cayó al suelo.

— No estás bien, deberías ir a descansar. — ordenó Blonko usando su voz de alfa. Él quiso tomarlo, pero su mano fue apartada con agresión.

— ¿Quién te crees que eres para ordenarme? — gritó empujándolo, sin embargo no logró apartar al rey. — Por favor, vete.

— No Ben, no lo haré — cuestionó el rey, tomándolo del brazo para levantarlo. — Soy tu alfa, mi deber es protegerte aunque estés en contra.

Y fue ahí cuando explotó.

— ¿Alfa? — soltó con ironía. — Tú no eres mi alfa, no eres mi destinado. — escupió con lágrimas en los ojos. — Mi alfa está allá, celebrando su boda. — su voz se rompió, bajó la mirada y empezó a llorar. — ¿Qué buscas de mí? ¿No ves lo miserable que soy? Soy un...

Rook no lo dejó terminar la frase, pues lo había abrazado por la espalda, casi mandandolo al suelo por el impacto. Con su gran cuerpo, cubrió al omega y soltó su aroma.

— Déjame llevarte a un lugar seguro, por favor. — pidió rozando sus labios cerca de la nuca del castaño.

Como si fuera una droga, Ben quedó sentado en el suelo con la mirada perdida, casi vacía. Rook lo cargó estilo nupcial hasta su cuarto del hotel. Una vez entraron, El quitó todas sus ropas, a excepción de sus ropas menores. El omega cual muñeco, dejo que Rook lo tocara sin importarle que le haría, se mantenía en un silencio sepulcral incomodando hasta al alfa, pese a esto, sus lágrimas jamás dejaron de caer.

— Ahora estás seguro. — susurró Rook dándole un beso en la frente, se levantó dispuesto a dejarlo en paz, pero...

— Quédate. — pidió con su voz débil y rota, tomándolo de la muñeca, no alzaba la cabeza, solo apretaba el agarre firmemente. — por favor.

Sin pensarlo mucho, Rook se sentó y luego tomó a Ben para sentarlo entre sus piernas, estando en esa posición empezó un fuerte abrazo sumando a un tierno ataque de besos en su cuello.

— Estoy harto. — decía el omega, la ira se podía sentir en cada una de sus palabras. — No quiero verlos, si sigo así moriré, alfa, no quiero morir. — entre sollozos ponían sus temblorosas manos en el pecho, a su vez que se iba encorvando por el dolor. — No entiendo !¿Qué hice mal?! — Gritó una y otra vez esa misma frase, hasta casi perder la voz. — Yo estoy mal, tal vez... yo sea defect...

— ¡SUFICIENTE! — ordenó el rennohagander tapando los ojos del contrario, Ben paró en seco, apenas se podía escuchar sus sollozos.

El joven rey tenía entre sus labios el cuello del omega, dejando una muy leve mordida que lo tranquilizó, suavemente lo fue acostando en su pecho acariciando sus cabellos hasta dejarlo dormido.

Amor no correspondido (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora