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Era sábado. Por la noche estábamos todos invitados a casa de Tomy. Se venía una fiesta de las buenas y era la primera con Tamara, aún no habíamos celebrado en condiciones su bienvenida a la familia. Por la tarde fui a su casa ya arreglada y maquillada para la fiesta, ya que íbamos a ir directamente a la de Tomy. La pava vivía en un ático de Malasaña. El edificio era antiguo pero estaba reformado, también lo estaba el piso. Pensé en que su familia tendría bastante pasta, o más que la mía al menos. Eso, o que su grupo era más famoso de lo que yo pensaba.

-¡Hola!

-Pasa. Siéntate, si quieres- Señaló al sofá.

-¿Puedo ir al baño primero?

-Claro -se rio- Al fondo a la izquierda.

En el baño había un puto jacuzzi. Definitivamente esta pava tiene dinero.

Volví del baño, estaba sentada en el sofá.

-Bueno, ¿y qué tal? -Me senté yo también.

-Bien, ¿y vos?

-Bien.

Nos quedamos mirándonos como dos gilipollas hasta que rompió el silencio.

-Ehh, ¿querés una cerve o algo?

-Sí, porfi.

Trajo dos cervezas e intenté darle conversación porque estaba siendo todo mazo raro. No entendía bien para qué coño había ido a su casa.

-¿Qué tal lo del disco? -Recordé que no había venido al rodaje el día anterior.

-Bien, un poco de estrés porque con la serie pues ahora todo es más lento. Pero nada. Los chicos y yo nos reunimos con la discográfica y tal. Aplazamos todo para después del rodaje. La gira pinta bastante guay.

-Pues suena bien...

-No te quiero aburrir. Vamos a ensayar, que para eso viniste, ¿no? ¿Tenés el guion?

-Ehhh, no.

-Bueno, no te va a hacer mucha falta.

-Bueno, en verdad me hace falta repasar, ehh.

-¿Para el episodio 5?

-Ehhh, ¿el qué exactamente?

-Esto.

Se levanta y coge y me empieza a comer la boca. Así, sin más. No me aparto, obviamente. Le agarro del pelo y me acerco aún más, buscando su lengua. En ese episodio nuestros personajes se daban su primer beso en una piscina, bajo el agua. Cada vez estoy más cachonda y le quito la camiseta, le doy un ligero mordisco en el cuello... Me había puesto a cien.

-No tengo piscina pero hay jacuzzi.-Dijo con la respiración agitada- ¿Qué te parece?

-Que me hagas lo que quieras, donde quieras.

Me empujó hacia el baño cogiéndome de la cintura mientras me besaba. Era la primera vez que lo iba a hacer en un jacuzzi. Empezó a llenarlo, se ve que iba a tardar un poco. Mientras se llenaba nos seguimos desnudando una a la otra mientras nos besábamos. Le mordí el labio.

-Joder, sí que tenés hambre... -se rio.- Espérame aquí.

Volvió con un altavoz y el móvil para poner música.

-No me digas que vas a poner tus canciones.

-¿No te pone escuchar mi voz?

-Qué flipada eres, ¿no?

-Puede, pero te encanto.

-Imbécil...- Volví a besarla.

Empezó a sonar una playlist en la que al final no había ninguna canción de ella.

-Si pongo mis canciones no me concentro y quiero hacértelo muy bien. -Me susurró al oído. Se metió dentro del jacuzzi. -Ven, ¿no?

Me metí yo también. El agua estaba calentísima y me acercó a ella y nos volvimos a besar. Nuestras lenguas se buscaban una a la otra. Era como hacerlo en la bañera, pero mucho mejor. Me empujó contra la pared del jacuzzi mientras su mano recorría mi cuerpo. Me besaba el cuello y yo ya estaba que no podía más.

-Tam...-Le cogí la mano y la puse en mi entrepierna.

-Che, ¿qué prisa tenés?

-Mucha. Joder...-Me empezó a tocar el clítoris mientras me mordía la oreja y con la otra mano me acariciaba un pecho. Yo me mordía el labio y empezaba a gemir.

ControlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora