Bloopers [AU]

Cap. 25 - Oblivio

Marinette llegó al set con Tikki a su lado, ambas caminaban alegres y practicando algunas de sus líneas en el camerino de la azabache.

— Oye, ¿y tú crees que debo decir "¿Se supone que nos conocemos?" o "¿Crees que te conozco?"

— Suena algo rudo el segundo por como lo dijiste, mejor menciona el primero. — contestó la pelirroja.

— De acuerdo, gracias. — le sonrió.

— Un placer, amiga.

Tikki le devolvió la sonrisa.

— Por cierto, ¿cómo te va con Adrien?

— Bien, ayer salí con él. — respondió Marinette algo sonriente. — Ay, Tikki, creo que me equivoqué.

— ¿Con qué? — cuestionó viendo los papeles del guión.

— Hace casi un año, en mi cumpleaños. Me pidió ser su novia.

— ¡¿Qué?! — exclamó la ojiazul sacando su vista de los papeles. — ¿Hace casi un año? Nunca me lo has dicho.

— No se lo dije a nadie. Es que... en ese momento no estaba segura ni lista. — miró al otro lado. — Pero ahora, lo conozco aún más y... lo amo.

La azabache sonrió mirando una foto enmarcada del rubio y ella. Observaba como en ese momento el ojiverde pasaba el brazo por los hombros de la chica, mientras ella sostenía la cámara con una sonrisa; y de fondo, estaban un par de montañas rusas.

— ¿Y eso cuando fue? — señaló la foto Tikki.

— Pasó el día de Disneyland Paris. — contestó Marinette.

— Salieron muy lindos los dos.

Marinette se sonrojó y rió nerviosa.

— Gra-gracias. — murmuró y sacudió su cabeza. — Bueno, e-ehh... ¿vamos al set? Creo que si no vamos ahora Scarlett va a...

— ¡VENGAN AHORA PARA GRABAR! ¡ADRIEN! ¡MARINETTE! ¡AHORA YA!

Las dos actrices rieron al escuchar el grito.

— A gritar. — terminó Tikki entre risas.

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En el edificio donde se transmiten programas de televisión, en la entrada hay cosas que la tapan.

— La salida está bloqueada. — mencionó Adrien.

— Tendremos que buscar otra salida. — comentó Marinette, y ambos oyeron unos ruidos. — ¡Y rápido!

Adrien tomó de la mano a su compañera y entraron a un baño.

— Ok, estamos atrapados con amnesia. Y nos está siguiendo algo que obviamente está en contra nuestra. — concluyó Marinette.

— Sin mencionar las criaturas que aparecieron, cuando nuestros trajes desaparecieron. — dijo Adrien.

El kwami negro se acercó más al rubio.

— Disculpa, pero las criaturas tienen hambre. ¿Puedes abrir tu camisa para ver que huele tan bien? — cuestionó Plagg.

— Pues yo, ¿qué más? — respondió Adrien.

— ¡Corte! — exclamó Scarlett. — Adrien, sigue el libreto por favor.

— Perdón, tenía que decirlo. — comentó divertido.