sábado

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— ¡Minho! —exclamó el niño con lentes— eso no se vale...

— No llores, pareces niñita —bufeó para luego hacerle cariño al menor.

— Bueno, ¿y que tiene que me parezca a una niñita? —cruzó sus brazos con la nariz arrugada. Minho se le queda mirando, Jisung se da cuenta de su mirada y le copia— Ah... —suspiró.

— ¿Qué pasa? —minho se acerca más a él.

— Me está pasando lo mismo

— ¿De qué? —sonríe Minho.

— Mi corazón late muuucho más rápido —Jisung se empieza a sobar su pecho. Minho alza las cejas.

— ¡Oh! —Jisung lo mira confundido —eso es porque consumiste mucho azúcar —Apuntaba Minho con su dedo, como si estuviera dándole una lección. El menor se empieza a reír.

— No he comido mucha azúcar... —se acuesta en el suelo —Hablando de eso... —Tocan la puerta del cuarto.

— Hijo... Traje galletitas —habló la madre con un paquete de galletas— Minho, hijo... ¿a usted le gusta las galletas? —La mamá de jisung se pone a su altura. Minho asiente levemente. — Que bueno —Sonríe— Bueno... Me voy —se endereza—¿Quieren algo más? —Jisung niega con la cabeza— ¿Tú, Minho? —él niega— Bien, me voy... —se va del cuarto y cierra la puerta.

— Tu madre es muy amable —Habló minho llevándose una galleta a su boca.

— Sí, es amable y cariñosa... Minho, ¿cómo es tu madre? —Jisung le pregunta inocentemente. Minho se le queda mirando.

— No sé... Es... Uhm... —Minho empieza a bajar la mirada— Supongo que estricta

— Oh no...

— ¿Jisung? —Jisung alza su mirada hcia él— ¿Puedes besarme? —Jisung saca una pequeña risa nerviosa.

— ¿Q-que acabas de decir? —empieza a reír— Deja de bromear

Minho se le queda mirando, mostrando la mayor seriedad posible. Minho quiere un beso de él.

— Ah... ¿no lo estas? —Jisung se para de reír para enderezarse y mirarlo— ¿Quieres que te bese?— Minho asiente levemente.

El menor se empieza a sentir nervioso, si lo besa, sera su primer y último beso. No se niega que quiere besarlo, al contrario, quizás eso es lo que quiso desde hace días, y no un simple abrazo.

Jisung se acerca lentamente a él, apoyándose con sus manos en el suelo, inclinándose. Minho se queda quieto, esperando el piquito que le van a dar. Ya de cuestión de segundos, Jisung le da su piquito y se aleja.

Minho lo mira y se echa a reír.

— ¿D-de que te ríes? —Jisung frunce el ceño.

— Ah... Perdón, perdón —minho mueve su mano— es que, eres muy tierno

Jisung bufea

— Agradece que te di el beso —se cruza de brazos y le da la espalda.

— Perdón —Minho lo abraza— Sigamos jugando

diary - minsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora