Capítulo 2; Jorge.

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Bueno pues, después de un viaje eterno, aquí estamos. Es bajar del tren y ver la estación llena de gente. Gente con prisas, gente leyendo en sus tabletas, adolescentes escuchando música... Se me hará díficil vivir aquí. Creo que a la semana de estar aquí ya tendré ansiedad; con lo bien que se esta en el pueblo. Y es que Granada no es una ciudad fácil por lo que parece. Eso si, es precioso todo.

Solo al salir de la estación, hay muchísima gente, edificios muy altos, tiendas mires donde mires...

Nos dirigimos a nuestro nuevo hogar en taxi, ya que el coche aún no había llegado; y cuando llegamos... Dios mio, esta casa es preciosa. Viviremos en un buen barrio repleto de casas blancas; es precioso.

Quizá no se me haga tan díficil vivir aquí. Además, estamos cerca de la universidad donde estudiaré filología clásica.

***

Una vez he desempaquetado toda mi ropa y mis libros me siento en el borde de la que sera mi nueva cama.Que paredes más feas. Son naranja. Habrá que pintar y arreglar un poco esto. Y me suena el móvil.

Hola amor, ¿que tal el viaje? Deseo poder verte ya para poder besarte y abrazarte de nuevo. Te quiero, no lo olvides.

¿Le respondo? Después de todo no se si se lo merece. Me ha dolido que no viniera a despedirse. De todas formas, si le respondo no pierdo nada.

Todo muy bien. Llámame cuando puedas. Te echo de menos.

Envio el mensaje y a los cinco minutos ya estamos hablando.

-Jajaja, ¿en serio? No me lo puedo creer.

- De verdad, no he venido a la estación porque me he caído por las escaleras de casa un rato antes y me dolía mucho. - se notaba a una legua que mentía.

-No te preocupes, ya vendré a verte cuando pueda.

-Vale amor, tengo que colgar, te quiero.

- Yo más.

¡Dios santo! Ya son las doce de la noche. Debería dormir. Mañana voy a la facultad para una reunión con el rector. Pero antes de dormir, cojo Cumbres Borrascosas de Emily Bronte y leo un rato. A los diez minutos me quedo dormida sobre la incómoda cama. Se nota que no es la mía.

Unos cuantos kilómetros de más.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora