Unos cuantos kilómetros de más.

Capítulo 4; ¿Que me está pasando?

*Narra Marcos*

Iba perdido buscando el despacho del rector por todo ese campus sin fin. ¡Que agobio, por Dios! Suerte que la conocí. Olivia se llama; hasta su nombre es bonito. Se acercó con paso acelerado mientras yo hacía que no la había visto. Me preguntó algo, no recuerdo muy bien el que. No podía dejar de mirarla. Escucharla hablar me hipnotizaba completamente. Como cuando escuchas una canción que te gusta mucho y te pone los pelos de punta. Fuimos hasta el despacho del rector rozando hombros y hablando. Esos ojos me penetraban en la piel hasta tocarme el corazón y conseguir entrar en él. Que sensación tan increíblemente impresionante. Hacía tiempo que no sentía una sensación como esa. No desde que falleció mi madre; en ese accidente de coche; hace ya cinco años. Desde que ella nos dejó a mi padre y a mi, se me había echo un vacío en el pecho enorme. Ese vacío que Olivia había conseguido llenar; aunque aún era pronto para decirlo.

*Narra Olivia*

Me levanté de la cama y llovía. << Genial >> pensé. Me dirigí a ver mi teléfono móvil y tenia muchísimos mensajes de Jorge. Me daba pereza llamarle o escribirle, así que borré todos los mensajes y llame a Marcos.

*Narra Marcos*

Olivia me llamaba.

-¡Hola Olivia! -Digo casi chillando.

- Hola feo, ¿Salimos a dar un paseo? Me apetece salir de casa un rato.

- Pero esta lloviendo...

-Soso. No te preocupes, es solo agua.

- Bueno, esta bien, en una hora estoy en tu casa.

- Perfecto, hasta después.

***

Hacía cinco minutos que me esperaba en su porche, en eso que se abre la puerta y sa asoma un hombre de unos cuarenta años y me dice que Olivia ya baja. Supongo que es su padre.

Diez minutos después sale ella. Llevaba un precioso vestido blanco por encima de la rodilla, una chaqueta de cuero negro y un bolso negro. Iba preciosa.

-Que guapo te has puesto para mi. - Me suelta.

- Hago lo que puedo. - Y empiezo a sonrojarme.

- ¿Vamos o que?

- Hay un buen trozo desde aquí hasta el centro, eh.

- Da igual.

*Narra Olivia*

Ha pasado todo muy rápido. Nos conocimos hace apenas 24 horas y es como siu nos conociésemos de toda la vida.

Cuando ví a Marcos en mi porche... Esos hoyuelos son adorables, por favor. Le solté que estaba muy guapo, como para ocultarlo... Este chico me va a volver loca algún día de estos.

*Narra Marcos*

Íbamos andando por la calle cuando el viento de me llevo el paraguas, el único que llevábamos. Así que nos pusimos a correr por esas calles, cogidos de la mano, esa mano tan fina y cálida... Nos detuvimos por un momento, le cogí la otra mano en un acto impulsivo, nos miramos a los ojos y....

*Narra Olivia*

Me cogió las dos manos, me latía el corazón demasiado rápido.Cada vez estábamos mas cerca. La lluvia me empapaba el pelo; y ocurrió.