Human-Doll; frerard.

Parte Diez: Final.

Advertencia: Contiene escenas subidas de tono, si no te gusta sólo no leas, Gracias.

*

Y para cuando Frank llegó, yo ya estaba preparado para lo que se aproximaba.

Antes de que llegara, la soledad del local junto con el silencio y el continuo ruido de la ciudad en el exterior, me ayudó a ordenar mis pensamientos y mis ideas, logrando llegar a un acuerdo conmigo mismo en equilibrio con mis revoltosas emociones y mis alterados pensamientos.

Aunque la sensación de querer terminar con el hechizo seguía persistente en el interior de mis entrañas, la razón de mi amor prefería mil veces continuar junto a mi amado castaño a pesar de que la muerte nos acompañaría hasta el final, personificada con la figura de mi hermano menor. Pero sólo bastó tomarme unos cuantos segundos para cerrar los ojos e imaginarme una vida o una historia sin Frank, para que mi decisión estuviera completamente tomada.

¿Un Gerard sin su Frank?

¿Un Frank sin su Gerard?

No, de ninguna manera.

Son dos nombres que deben estar juntos, unidos por un lazo de amor que en éste caso se podría identificar como una letra; 'y'.

Frank y Gerard.

Así debe ser ¿De acuerdo?

Y es que ya no había marcha atrás para nosotros, yo estaba muerto, Frank también y mi hermano menor lo estaba de igual manera, estábamos muertos los tres, condenados a un hechizo que conduce a un final desastroso, una y otra vez, e imaginarme algo más allá de esto que vivimos tiempo con tiempo, parecía prácticamente imposible y fantasioso.

La presencia de mi castaño se hizo eco en la creciente oscuridad cuando escuché varios llamados con mi nombre siendo pronunciados por su única voz, con esa voz ronca y masculina que tanto me hacía delirar al sólo recuerdo.

Literalmente corrí hacia el laboratorio de mi ex-dueño para recibirlo. Tenía demasiadas ganas de estrecharlo contra mi cuerpo y llenar de besos todo su bonito rostro, que no esperé mucho cuando lo vi aparecer saliendo de la pequeña entrada secreta que se escondía en el fondo del laboratorio, ya que me lancé a sus brazos, robándole un fugaz beso en los labios, envolviendo mis brazos en su cuello y atrayéndolo a mi cuerpo que tanto ansiaba el calor contrario. Y dios, ahora es cuando la presión de mi necesidad por estar junto a él se hace presente y me doy cuenta de ella. Sus brazos me rodearon dubitativos mientras yo me limitaba a soltar un profundo suspiro enamorado, que surgió espontaneo desde el interior de mi corazón.

Me separé de Frank sólo un poco, dejando mis brazos posados sutilmente en sus hombros, para observar que sus ojos avellanas estaban detonando sorpresa y confusión, pero una sonrisa llena de alivio se extendía en sus labios rosados.

      -     Así que no estás enojado conmigo ¿Cierto?

      -     No, nunca podría enojarme contigo, Frankie.

Susurré suavemente contra sus labios mientras conectaba mi mirada esmeralda en la suya avellanada. Y entonces todas las dudas desaparecieron y el 'Yo optimista enamorado' salió a flote con miles de frases que me motivaban a sólo pensar en continuar con el sufrimiento con tal de estar junto a él.

      -     He recordado todo, Frank.

      -     Yo también.

      -     ¿Enserio?

Mis ojos verdes se abrieron con asombro y mis labios se entreabrieron sólo un poco, porque realmente pensé que mi amado castaño se vería confundido por mis palabras anteriores, pero sin embargo su respuesta me había dejado en claro que él estaba en la misma situación que yo, ambos ya sabíamos lo que habíamos vivido y como habíamos acabado en esta extraña situación de nuevo.