Final

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Si los ángeles y los demonios no deben estar juntos... ¿entonces por que Dios creo la humanidad?

No tenía sentido, ya que en algún momento de la historia fueron ángeles... Claro, hasta la batalla por él gobierno de los cielos donde fueron desterrados a una eternidad en las catacumbas del infierno.

Sin dudas eran malos, creaban él conflicto y promovían las desgracias mientras se alimentaban de nuestros miedos y desolaciones. Eran lideres de lo siete pecados capitales y rompían sin remordimiento alguno la caja de cristal donde guardaban su fe, pureza y castidad. Él había roto esa reliquia.

Entonces ... ¿el también era un demonio?

Fue débil, cayo en las garras de la tentación ignorando las consecuencias fatales y determinantes. Su pereza y castidad desaparecieron cuando se lanzó a los brazos de la pasión prohibida solo porque esta lo llevaba al limite de lo que su cuerpo soportaba, dejando sangre, sudor y lágrimas al hechizo de un par de ojos color azul.

Él día en que fue corrompido.

Y no le importaba, lo haría de nuevo con tal de probar de la manzana y consumirse en llamas.

¿Era él pecado entrenado a su sistema? ¿por eso no le importaba nada mas que los impactos duros y certeros a su figura moldeable?

Amaba lo que James le daba, era sobredosis de dopamina. Él amor que se profesaban no era bueno a los ojos del cielo, pero es sincero, profundo.

Esto le costaría caro.

En creces lo pagaba, sufría en silencio y era lo mejor, así si Bucky no se enteraría que mientras se acoplaban como destinados, él agonizaba por sus pecados, no le mostraría su mirada apagada ni mucho menos las plumas que perdieron su color blanquecino ahora teñidas en negro.

Se quedaba sentado en una esquina de la jaula en donde su soldado se enfrentaba con él escuadrón de la muerte, él frío se insertaba en sus huesos haciéndolo temblar tan abruptamente, sacudiendo su débil cuerpo mientras mas de aquel veneno lo consumía.

A los ojos de James él era él mismo angelito que le canto y dio un tierno beso, era una ilusión creada con la poca fuerza que le quedaba, así como la magia en sus alas se había marchitado.

Era un ángel sin propósito.

-Peter...

Abrió los ojos desde de un rato canalizando él dolor, James lo miraba con esos ojos como él océano por él cual pecaría.

Sonrió débilmente y acarició su mejilla, dejando a Bucky estático por lo helada que se sentía su manita, no era cálida como siempre lo había sido.

-Mi hermoso ángel, ¿ que tienes vida mía ?

-Estuviste maravilloso Bucky... S-sabia que ganarías.- dijo con dificultades ante la presión imprevista en su pecho.

-Peter... Te siento recuerdas... Y tus ojos ya no me brillan como antes.

Los ojos son la ventanas del alma y aunque James no viera él veneno correr por sus venas sabia que su bello ángel no estaba bien, y para él era imposible estar bien si Peter sufría, era su única debilidad.

-Mi guerrero sin alas.- beso su mejilla con lagrimas amenazando con traicionarlo.-hay estrellas que tienen que desaparecer para que otras brillen.

- ¿Que me tratas de decir con eso?

-¿Me amas?

Bucky no quería entender lo que ocurría, creía que si lo hacia terminaría llorando como la primera vez que le borraron la memoria. Así que junto sus bocas en un beso que significó tantas cosas, una chispa de aquella magia perdida se encendió mostrándole a ambos la verdad.

Living proof-winterSpiderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora