¶Embarazada de mi Mejor Amigo «ⓣⓐⓔⓗⓨⓤⓝⓖ, BTS y tú» COMPLETA

VEINTIOCHO

                                     YoonSu;

Tae me ayudó rápidamente con las maletas. De hecho casi no dejó ni el cinco por ciento de mi ropa en el closet. Al salir con las maletas, mi hermano venía entrando. Nos miró a mi y a Tae con el ceño fruncido y algo curioso.
—¿Que está pasando? —nos miró.
Cierto. Yoongi aún no sabía acerca de Tae y de mi.

—Pues...tengo que decirte algo —dije.

El arqueó una ceja y dejó sus cosas sobre el sofá.
—¿Que pasó? —preguntó.

—Tae y yo...estamos saliendo —solté de una buena vez.

Su rostro se tornó bastante sorprendido.
—¿¡En serio!? —exclamó. Nosotros dos asentimos—. ¡Vaya!. ¡Pero que callados! –río levemente.

—Yo rompí con Irene y Su con Jackson. Ahora me llevaré a tu hermana porque la quiero conmigo. Espero y no te moleste —jodió mi amigo-novio.
Se sentía tan raro no ver ya a Tae como amigo. Digo...seguiríamos siendo amigos. Pero ahora oficialmente éramos novios.

—Por mi —mi hermano hace ademanes restándole importancia y le pegué divertida. El rió—. En lo absoluto Kim. Toda tuya.

—Perfecto —asintió Tae risueño. Me miró—. Su, ve bajando. Hyung me ayudará con las maletas. Es que quiero hablar de algo con él antes.

Yo asentí y salí. Al poco rato mi hermano bajó junto con Tae y las maletas. Las acomodaron en el auto y luego Tae se despidió de mi hermano para entrar al auto mientras entonces yo me despedía de YoonGi.

—Bueno enana, espero que sigas viniendo a trabajar —mi hermano besa mi frente y yo asiento sonriendo.

—Sip. Mañana mismo vendré. Tú solo mantén mi depa en orden. ¿Bueno? —lo señalo con el dedo y asiente.

Nos damos un abrazo y me adentro al auto. Tae arranco el vehículo y volví a agitar mi mano en despedida hacia mi hermano.

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Cuándo llegamos a casa de Tae, yo me dirigí emocionada a llevar mis cosas al antiguo cuarto pero Taehyung me lo prohibió ya que me contó que dormiría con él.
—Pero...

—No hay peros —sentenció—. Ese cuarto que tu usas se arreglara para que sea de nuestro hijo.

—Oh...—sonreí y asentí emocionada.

Adoraba esta actitud paternal de Taehyung. La verdad aún no me había puesto a pensar en eso, pero me alegraba de que él ya estuviese atento.

Tae decidió pedir comida al hotel, mientras yo me ponía y organizaba un poco de mi ropa junto a la de él.
Había traído mucha, pero a pesar de que Tae también tenía bastante ropa, su closet era bastante grande también.
Luego de organizar algo, me dí una ducha y me puse un cómodo vestido amarillo claro de dormir. Peiné mi cabello haciéndome luego una trenza y salí cuándo Taehyung me llamó indicando que la comida ya había llegado.

—Yo iré preparando todo. Tu date una ducha —beso su mejilla.

El asiente y va a ducharse mientras yo organizaba todo para comer.
Vaya...realmente no pensé que ahora estaba literal...haciendo una familia con Tae. Se me hacía un sueño casi imposible de creer.
Pero me gustaba.

Unos minutos después Tae vino y nos sentamos juntos para disfrutar de la deliciosa comida que habían traído para nosotros.

—Te lo comes todo. Quiero que mi hijo esté bien alimentado —me señaló. Yo asentí divertida.

Taehyung y yo comimos entre charlas, y luego de terminar acordamos de fregar las cosas sucias juntos.
—Estaba pensando Su... —me mira Tae mientras secaba –yo fregaba y el con un paño secaba y ponía todo en su lugar–.

—¿Que? —lo miro.

—Te pondré a Top de nuevo —respondió. Arquee una ceja.

—¿Por qué?. Ay no Tae. No quiero guarda-espaldas. Es muy incómodo.

—Su...ya lo decidí. Tendrás a Top de guarda-espaldas de nuevo. Te lo había quitado porque te fuiste de momento de aquí pero ahora lo tendrás de nuevo y no se diga más.

Yo bufé pero asentí.
—Está bien. Si eso te tranquiliza —puse los ojos en blanco.

—Si. Me tranquiliza mucho —besó mi mejilla complacido.

Terminamos de fregar y fuimos a su cuarto para ver la televisión ya que el tenía un televisor allí y podíamos estar más cómodos.
Nos acostamos en la cama, bueno, no exactamente acostados, más bien recostados al cabecero de esta, mientras una serie se mostraba en la televisión.

—Nuestro hijo está creciendo muy bien —Tae mira mi barriga la cuál había crecido bastante.

—Sí —sonreí enternecida.

—Su...¿sabes que tan feliz estaría nuestro hijo si al nacer se encuentra con sus padres casados? —pregunta de momento.

Analizo lentamente lo que quiso decir. Al mirarlo directamente me veía con una sonrisa maliciosa en sus labios.
—¿Eh? —balbucee tratando de entender nuevamente lo que me quiso decir.

El estalló en una carcajada bastante dulce para mi. La risa de Taehyung era tan angelical y melodiosa. Siempre me había gustado.
—¿Lo repito mejor? —me mira divertido.

Pestañee viéndolo y el sujetó mis manos arrodillado sobre la cama. Mi corazón se había disparado y juro que podría morir.
—¿Aceptas casarte conmigo? —pide.

Yo reí levemente —Taehyung...¿que...haces?. Estás loco —realmente me era imposible creer esto.

—¿Eso es un no? —hace un puchero.

—¿Realmente estás hablando en serio? —entre-cierro mis ojos viéndolo.

—¡Pues claro tontita! —despeina mi cabello—. ¿Entonces?. ¿Si?.

—Es que...—volví a sonreír sintiendo ganas de llorar—. Es...demasiado ¿no?.

—Solo dime que sí anda —ríe y empieza a darme cortos besos en los labios.

Yo vuelvo a reír y con la emoción a flor de piel asiento —Claro que si acepto casarme contigo.

El rió y me dió un beso más duradero. Mientras sus labios se mezclaban suavemente con los míos, sentí movimientos dentro de mi vientre y me alejé.
—Creo que está feliz. Se está moviendo —reí.

Tae puso su mano sobre mi barriga y me miró feliz al sentir los movimientos del niño.
—¿Crees que haya escuchado todo? —pregunta y yo asiento.

—Sí. Lo escuchó todo. Ya el puede saber todo lo que ocurre en su exterior. Es tan lindo —susurré feliz.

—Yo te dije que se pondría contento —besó mi frente y me sonrió—. ¿Sabes algo Su?.

—¿Mhm? —lo miré.

—Agradezco que me hayas dado este hijo. Creo que...a parte de que estoy conociendo esta felicidad inmensa al ser padre, estoy aún más feliz porque este hijo me dió la oportunidad de quererte. O bueno...de darme cuenta de cuanto te quería —me miró con sus ojos brillosos.

Yo sonreí y lo abrazé.
—Te quiero....¿mi amor? —reí al decir esas palabras que aunque sonaban extrañas por simple hecho de que hace unos días atrás Tae solo era mi amigo, sonaban a la misma vez dulces.

—Ohhh —rió Taehyung acariciando mi cabello—. Yo también te quiero, cariño.