Capítulo 9

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Pablo: Aprobé, Marizza, lo hice - dijo feliz y la abrazó - me saqué un 10, calificación perfecta
Marizza: Sos un genio - sonrió
Profesor: ¿Usted es la responsable de este milagro? - salió del salón y le habló a Marizza
Pablo: Sí, es una genia
Profesor: También la felicito señorita Andrade - sonrió y se fue
Pablo: Te invito un café
Marizza: No puedo, me tengo que ir
Pablo: ¿No tenes clases?
Marizza: No, solo vine a ver cómo le iba a mis alumnos
Pablo: ¿Dónde vas?
Marizza: Tengo que hacer trámites
Pablo: Si necesitas que te lleve a algún lado, vos decime
Marizza: A la constructora JM, ¿La ubicas?
Pablo: Sí, creo que sí. Vamos - Ambos fueron en dirección al auto de Pablo para ir a la constructora del tío de Marizza
Marizza: Gracias - sonrió cuando llegaron - ahora anda a descansar y a celebrar que seguís en la carrera
Pablo: Suerte con lo que tenés que hacer
Marizza: Gracias

Marizza bajó del auto y entró a la constructora. Hace muchos años no andaba por esos pasillos, desde que tenía unos 11 o 12 años.

Al llegar, fue hasta donde una secretaria para pedirle hablar con su tío. Luego de unos 5 minutos la hicieron pasar

Juan: Marizza, ¿Cómo estás?. Toma asiento
Marizza: Bien. Necesito que seas breve, ¿Por qué fuiste ayer a mi casa con una trabajadora social?
Juan: Simple, te llamé, te pedí que me llamaras. No lo quisiste hacer por las buenas, tuve que acercarme a mi sobrino por las malas
Marizza: ¿Tu sobrino? ¿Y qué querés de Lautaro? Lo has visto 5 veces en toda tu vida
Juan: Voy a ser directo, quiero la custodia de Lautaro
Marizza: ¿Qué?
Juan: Podemos hacerlo por las buenas que es que tú me dejes la custodia y arreglamos horarios para que lo veas e incluso puede uno que otro fin de semana quedarse en tu casucha o hacerlo por las malas que es pedirle la custodia a un juez.
Marizza: No para, no me parece para nada tú idea. ¿Desde cuándo te interesa tu sobrino? Desde que mi mamá renunció a esta constructora vos te encargaste que ni ella ni su familia tuviera un peso de esto que era del abuelo
Juan: Pero Marizza, seguís igual de insolente. ¿Eso le querés enseñar a tu hermano?
Marizza: No te voy a dar la custodia de mi hermano, ni por las buenas ni por las malas - dijo enojada y levantadose
Juan: Por las malas entonces, espera la citación del juez
Marizza: ¿Por qué querés su custodia?
Juan: ¿Por qué no pensas un poco? Yo le puedo dar un mejor futuro a él que vos
Marizza: Él está bien conmigo
Juan: Yo creo que el juez sabrá lo que es mejor para él. Nos vemos en el juicio - Dijo y Marizza bajó en el ascensor destruída, le partía el corazón la idea de tener que separarse  de Lautaro.

Cuando llegó al primer piso vio a Pablo a fuera de su auto quien al notar que venía con sus ojos llenos de lágrimas solo le abrió los brazos y Marizza se aferró a ellos.

Pablo: ¿Qué te pasó?
Marizza: ¿Por qué no te fuiste?
Pablo: Algo me decía que ibas a necesitar un amigo cuando salieras de ahí

Capítulo cortito 😱😯 Gracias por seguir está novela ♥️

Mi Responsabilidad - Novela Pablizza Donde viven las historias. Descúbrelo ahora