Solo trata de escucharme.. por favor (🇷🇺 x 🇵🇪)

Retorno

Perú fue el primero en despertarse y comenzaba a preparar el desayuno, pero hizo tanto alboroto que despertó a su madre en el proceso.

Tahuantinsuyo se despertó rápidamente pensando que alguien se había metido algún intruso a su casa, por lo que salió toda molesta y con el San Martin en mano lista para atacar.

Fuera de mi casa intruso... - dice toda molesta pero se detiene al ver solo a su hijo con la cara con un poco de haría.

Pasa algo mamá - dice nervioso en señas al ver el San Martin.

¿Pero que? - la mujer baja aquella arma mortal dejándolo a un lado para acercarse a su hijo - no pasa nada mi wawa y que haces despierto tan temprano y cubierto de harina.

Bueno, yo quería llevar unas cuantas papitas rellenas a mi trabajo -  responde a que el peruano algo apenado con suave movimientos de manos.

Mi lindo wawa - dice la mujer en señas acercándose a su hijo y colocando manos a la masa para ayudarlo y así terminar mas rápido, cosa que su hijo le agradeció con una sonrisa sumamente tierna.

El bicolor una vez listo y con todos arreglado, alisto sus cosas y corrió hacia la puerta pero es detenido por su progenitora que lo sostiene del hombro y le jala hacia ella en un abrazo amoroso y maternal.

No te preocupes mi wawa, yo te llevo - le dice la mujer una vez se separo de su hijo, para dirigirse a por las llaves, aunque era el auto de la empresa donde ella trabajaba tenía la autorización de poder usarlo para cosas personas, prioritarias y urgentes y claro su hijo siempre seria prioridad en todo.

En la empresa se encontraba la señorita Lidia junto Turquía quienes platicaban de una manera amena, ambos se encontraban muy cerca a la gran ventana polarizada del sexto piso, pero al ver que de un auto bajaba un blanquirojo aquella plática se detuvo bruscamente.

Vaya ya es la segunda vez que veo a aquel niño bajar del mismo auto - dice el turco con una sonrisa malvada de medio lado.

Al parecer se fue a moverle la cola a alguien, pero mejor para mi, así puedo acercarme mas al jefe - le responde la libia con una sonrisa de oreja a oreja recordando aquella invitación de cena que el jefe le había hecho - aunque pensé que ya dejaría de trabajar en esta empresa, como te comente la otra vez el jefe se veía con cara de pocos amigos cuando ese niño nos interrumpió.

Eres una mujer hermoso y muy astuta pero maneja bien tus cartas - le responde con una ligera sonrisa - yo me encargaré de aquel sordo, le tengo ganas desde ya un buen tiempo, pero siempre para con Ucrania o con Rusia y no puedo acercarme. 

Hahaha... cuando no, aunque siempre pensé que tenías buenos gustos pero ahora lo estoy comenzando a dudar - le responde cruzándose de brazos - casi todas y todos los de tu área y me atrevo a decir de otras áreas, han desfilado por tu cama

Y eso te molesta - pregunta el turco levantando una ceja.

No, pero me sorprende que quieras ligarte a ese mocoso - responde aquella mujer con desgano - estas desesperado por cogerte a alguien o...

No, nada de eso, es solo que... - el turco no responde solo sonríe de medio lado de un modo sádico - solo quiero jugar con el y su cuerpecito es solo eso.

Eso es... - la mujer no pudo terminar de hablar debido a que alguien que apareció de la nada les llamo la atención.

Señorita Libia, en lugar de estar parloteando debería estar cumpliendo con su trabajo - dice un joven pitufino serio y con los brazos cruzados, no le agradaba para nada ese par, pero tenía que mantener las apariencias - recibí la llamada del empresario ingles que me dijo que aun no le llega la confirmación de la fecha para la reunión -