Iguales dabi y tu

4- sinceridad

-Yo era una estudiante de tercer año en U.A, prometía ser una heroe grande por mi quirk aunque mi forma de ser no era de mucho agrado para los héroes...- Volvi a respirar y exhalar lento-por querer demostrar mi madera de héroe me inventes una misión absurda sola y me infiltre entre villanos con la esperanza de conseguir cualquier información por más vaga que sea así llegar con algo y que me elogiaran y reconocieran por mi hazaña... pero fue todo lo contrario, me vincularon a la liga, me torturaron en una silla eléctrica, pese a tener testigos de que no fui a aliarme con villanos no lo tomaron en cuenta simplemente me quitaron toda posibilidad de cumplir mi meta.. por la tortura y por qué me quitaron mi sueño por mi mente empezaron a correr fuertes ideas asesinas, apenas me dejaron en mi casa deshice el rastreador que tenía con un ácido y me escapé solo con dinero y lo que llevaba puesto, mientras caminaba por estos lados tratando de mentalizarme que ya viviría acá mientras planeaba mi venganza contra los héroes de u.a, decidí que me iría a apostar para relajarme y ganar más dinero, pese atrampas gane una suma alta y una villana intento matarme, sin pensarlo por el odio que traía encima le desgarré la garganta y la dejé desangrándose en el pavimento...- cuando termine de relatar todo, empecé a llorar y a afligirme más.

Ambos chicos se miraron tratando de buscar las palabras apropiadas para decirme.

-En otras circunstancias te hubiéramos matado por ser infiltrada pero ahora eres una villana más, por petición de toga formaras parte de la élite de la liga, esto quiere decir que estas solo bajo nosotros, tienes poder con subordinados y demás como toga, y bueno te vamos a entrenar y todo a cambio de tu ayuda con tu quirk-dijo shigaraki, al parecer el piensa bastante las situaciones.

-Ya mataste así que no habría caso de hacerte una prueba de lealtad, pero por si las dudas mañana matarás a una heroína que encontramos hace unos días- dijo para pararse del sofá e irse al bar a servirse un trago.

Estaba analizando la situación pero era demasiado surrealista, ahora se supone que soy villana y trabajo con la mafia más poderosa y grande de Japón.

-E-entendido-dije respirando y exhalando repetidas veces para calmarme

Dabi estaba callado, se veía que estaba pensativo y algo triste, ni idea por qué.

-Ya llegué, te traje este top, unos short y estás sandalias porque acá mucho lujo y la cosa pero la climatización es tan ineficiente que hace un calor infernal-dijo toga entregándome la aprendas.

-Es porque es verano toga que esperas, no podemos controlar el clima- dijo shigaraki negando mientras se sentaba en el sofá y prendía la televisión buscando Netflix.

-Acá hay un baño ve a cambiarte y tira a la basura el vestido y botines- dijo guiándome al baño, me adentré a este y empecé a desvestirme, realmente era grande y lujoso, quizás debería darme un baño.

Finalmente salí de la ducha, fue corta para no abusar pero me relajó bastante, me puse la ropa que me dio toga aunque para mi mala suerte no tenía ropa interior y tener harto busto con un top sin brasier no es muy buena combinación además que el top era algo pequeño, definitivamente no puedo levantar los brazos estando con este top. Procedí a peinarme con los dedos todo mi cabello para luego finalmente botar a la basura ese vestido negro lleno de sangre junto a los botines salpicados también de esta, fue lo mejor deshacerme de esa ropa aunque sabía bien que deshacerme de la ropa no cambiaría lo que hice.