𝔐𝔬𝔫𝔞𝔯𝔮𝔲𝔦̨𝔞 ℌ𝔬𝔫𝔬𝔨𝔲𝔰 ☾︎ᵘⁿ ᵐᵘⁿᵈᵒ ᵈᵉ ᵐᵃᵍⁱᵃ☾︎
❛❛𝒰𝓃 ℱℯ́𝓃𝒾𝓍 𝒷𝓁𝒶𝓃𝒸ℴ ℯ𝓈 𝓊𝓃𝒶 𝓂𝒶𝓁𝒹𝒾𝒸𝒾ℴ́𝓃❞
Tras cinco años de aislamiento del mundo exterior, Hyorin Fénix y su hermano Hyunjun deciden abandonar su hogar en el Reino de las Ni...
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Hyunjun despierta primero por los rayos del sol y abre los ojos lentamente. Su cuerpo se encontraba mejor. Estaba un poco débil pero no era de preocuparse. Gira a la derecha y ve a Hyorin dormida profundamente, da una casi invisible sonrisa y se levanta del piso. Observa a su alrededor y ve como todos estaban dormidos. Hyunjun y Hyorin eran los únicos que tenían el traje para el agua puesto. Hyunjun deambuló un poco por el barco hasta que encontró los baños con ducha, regresa por ropa y después se limpia.
Regresa y aun se encontraban dormidos. Ve que en donde las personas estaban descansando, en el fuego había comida que nadie había tocado, al ver que nadie veía con sus dedos índice y medio atrae dos pinchitos de Dakkochi que habían quedado anoche. Regresa a donde había dormido dándole la espalda a los demás y mueve delicadamente a Hyorin para que despierte.
—¿Ya llegamos? — pregunta cansada.
—No creo que falte mucho. Debes de despertar, mira lo que conseguí. — Hyorin abre sus ojos suficientes para ver lo que su hermano le mostraba y eran dos pinchitos de Dakkochi. Hyorin se sienta rápido sobre la cobija dándole la espalda a los demás igual que Hyunjun y su hermano le da uno de los pinchitos para después los dos empezar a comer lentamente.
—Gracias, Hyunjun. — Su hermano sonríe.
—No me agradezcas— Hyunjun quita unos trozos de pollo de su pinchito y los clava en el de Hyorin. — Soy tu hermano mayor. Es mi deber. —
Los dos terminan de comer Dakkochi y Hyunjun le comenta lo de las duchas que encontró. Él ya tenía puesto el uniforme de la escuela. Una camisa de botones blanca con un pin de oro de la escuela, un pantalón un poco pegado al cuerpo negro, cinto y sin corbata Acompañado de un saco hasta la cadera de vestir negro con bordados dorados grandes por los dos lados de enfrente. Mientras se duchaba, Hyunjun estaba recargado en la puerta vigilando que nadie entrara. Cerro los ojos y no pudo evitar pensar en que tenía demasiada hambre aún.
Hyorin salió con un vestido negro un poco pegado y corto pero lo normal, la tela llegaba al cuello, pero era de manga corta, el bordado dorado estaba en grande con su pin y tenía puesto un suéter negro de lana delgado que había traído de casa. Los dos regresan a donde durmieron y juntaron todo lo que estaba en el suelo. Para después regresar y sentarse.
—Debo de admitir que tengo un poco de envidia contigo. —Dice Hyunjun de la nada.
—¿Qué? ¿Por qué? — dice vacilona Hyorin.
—Tu uniforme da menos calor que el mío. —Hyorin da una pequeña risa para después empujarlo por el hombro.
—El increíble y poderoso Hyunjun está preocupado que el uniforme afecte la velocidad que corre por sus venas. — Su hermano mueve la mano de Hyorin para que no lo esté golpeando y sonríe.
